3

18 1 0
                                    


Academia para Jóvenes Vexamitas "General Olix". Ciudad de Sutaar. Ubicada en lo que antiguamente fue una ciudad del norte de México.

Los 40 alumnos del paralelo "A" de tipo insecto/arácnido del primer año de instrucción de la academia Olix, estaban muy atentos a la clase de historia que les impartía el maestro Spencer, todos estos chicos de catorce años eran hijos nacidos en la tierra de padres Vexamitas, aquellos chicos asistían de lunes a domingo a las clases.

-Después de la Gran Catástrofe el bando Ribo y el bando Toback replegaron sus tropas a sus respectivos territorios, luego de que sus máximos representantes perecieron en dicha batalla. Gran parte del continente americano quedó a cargo de la coalición humano-ribo, un amplio territorio de Europa quedó dominada por los Toback- explicaba el maestro Spencer a sus alumnos el cual se percató que una alumna levantó la mano para hacer una pregunta.
- Dime, cadete Kelly – dijo el maestro a su alumna.
-Sí, tengo entendido que también existen otras facciones guerreras de Vexamia aparte de los Ribos y Tobaks. ¿es eso cierto?- preguntó la joven.
-Sí, así es Kelly, parte de África del norte pertenece actualmente al ejercito Neutral, aproximadamente la mitad de Asia a grupos guerrilleros formados por humanos y Vexamitas, hay mucho territorio en disputa y principalmente conflictos en las fronteras- Respondió el experto maestro de historia de aproximadamente 55 años quien llevaba 6 años impartiendo clases en la Academia Olix.
- Hay varias facciones que se han formado a lo largo del planeta y me gustaría darles a conocer sobre estas pero lamentablemente ya se terminó la clase- se percató el profesor mirando su reloj, al instante sonó una campana que daba por terminada la clase.
-Bueno eso es todo por hoy- dijo el maestro y se retiró del aula.
-Al menos no envió tarea- comentó Jeivex.
-Si tendremos la noche libre, Jeivex!!- exclamo emocionado Krao.
-Pues sí, al fin podremos descansar un poco de las tareas de Historia - acotó Jeivex con una pequeña sonrisa, pues llevaban casi un mes con tareas de consulta sin descanso.
-¿Sabes que sigue en el horario?- pregunto Jeivex a Krao.
-Déjame revisar- dijo el joven mientras buscaba el horario.
-Tenemos combate cuerpo a cuerpo, Jeivex. Llevamos casi 4 semanas en la academia y ¿aún no memorizan el horario, chicos?
-Es porque son unos retardados- dijo un alumno sentado en uno de los asientos al final del aula, el resto de la clase reía por el comentario mientras recogían sus útiles y se dirigían a la clase de combate cuerpo a cuerpo.
Jeivex y Krao miraron al chico enfadados.
-No le hagan caso chicos, Tarko es un Idiota que cree que está por encima de los demás por ser hijo de uno de los "ocho máximos comandantes"- dijo Kelly con un poco de desprecio en sus palabras. –Sí, démonos prisa a la próxima clase, no quiero ser regañado por el maestro Dicon- dijo Jeivex y partieron.

Hasta ese día, había pasado un mes desde el inicio de clases. Jeivex y Krao hicieron una nueva amiga en su aula, una chica muy inteligente que siempre los ayudaba en sus tareas de historia. Ese primer mes fue relativamente fácil para los chicos ya que tenían muy pocas horas de entrenamiento y más se la pasaban con tareas teóricas.

-Buenos días cadetes- saludaba un imponente Ribo ubicado en el centro del área de combate cuerpo a cuerpo a los alumnos que estaban formados frente a él. Su enorme estatura y test morena combinada con un temperamento fuerte y severo ya había infundido mucho respeto y temor en los cadetes.


-¡Buenos días, Sargento Dicon!- respondieron al unísono todos los alumnos.

 –El área de combate cuerpo a cuerpo es la más pequeña de todas las áreas de entrenamiento, como se habrán dado cuenta todos los alumnos de grados superiores también reciben clases aquí y las áreas son medidas para cada clase, en esta área contamos con 40 m2, este es el lugar donde aprobarán o reprobarán mi clase-.

El maestro Dicon tenia el rango de sargento. Poseía un tono de voz fuerte y los alumnos ya se habían dado cuenta que era muy estricto por tal motivo ponían toda su atención en sus palabras.

Mundo GuerraDonde viven las historias. Descúbrelo ahora