Todo parecía estar cubierto por estrellas.
La siguiente vez que abrió los ojos al despertar no veía más que puntos blancos en el cielo, o lo que parecía ser el cielo.
No intento mirar hacia otro lado, tampoco intento mover alguna extremidad, permaneció inmóvil hasta que sus ojos se cansacen de observar.
Oyó un fuerte ruido provenir de sus pies, se oía como una puerta cerrándose de golpe, esta vez intento desviar la vista, no divisó más nada, todo igual al cielo estrellado.
"Creo que no nos ve"
Escuchó susurrar una voz familiar, ronca tal como la de la anciana de la bandeja.
¿Era posible sentir ver sin ver realmente?
Cerró los ojos apretando los párpados, no sentía nada, ni siquiera la fuerza que había ejercido en sus ojos. Pero hubo algo que si sintió por un segundo, una fría mano sobre su frente, cubriendola, y otra en su antebrazo, después de eso, volvió a dormir.