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Junmyeon había sido el causante de tal desastre, ¡ahora lo sabía! Nunca debió comprarle esos shorts de pijama a su novio durante una rebaja solo porque se viesen muy cómodos, se había dejado llevar por la oferta.
Oh, es que en ese momento no sabía lo bien que los luciría el chino durante las mañanas al poner agua a hervir. Era ahí cuando podía apreciar los muslos bien formados de Yixing gracias al ejercicio, porque esa prenda apenas y le cubría la parte inferior del cuerpo.
Y es que su pareja también era muy olvidadiza, así que cuando ya no le quedaban más boxers en el cajón, porque todos aún permanecían humedos, usaba únicamente los malditos shorts. Se quedaba en casa, haciendo algunos quehaceres o simplemente se tiraba en la cama. Esa prenda parecía tener mejor suerte que él ya que no había podido tocar a su jodido novio por culpa de sus largas jornadas de trabajo.
Estuvo más feliz cuando el canoso de su jefe le permitió irse temprano gracias a su desempeño las últimas semanas, dijo que se merecía un pequeño descanso, pero para ese momento el coreano no podía pensar en nada más que llegar a su departamento, el que compartía con el pelinegro.
ㅡ¡Llegué, Yixing! ㅡanunció con la alegría acariciando su mejillas.
Caminó hasta la cocina y fue el colmo, ¡ahí estaban los malditos! Presumiendo que tocaban al chino más que él durante las últimas semanas.
ㅡ¿Por qué la pijama? Son las ocho ㅡcuestionó dejando su mochila en la pequeña mesita dentro de la habitación.
ㅡEstuve lavando ropa ㅡindicó a medida que enjuaba unos platos enjabonadosㅡ, me quedé sin ropa interior ㅡrio culpable.
Junmyeon no lo aguantó, no tenía que hacerlo. Si esos días sin intimidad no habían sido suficientes iba a enloquecer con el postre servido en sus narices.
El menor con las mejillas ruborizadas preguntó qué sucedía cuando sintió la erección del castaño en su trasero. No le molestaba, todo lo contrario, hacía su piel entibiar por debajo de la ropa.
ㅡNada ㅡrespondió con la voz llena de deseo, colando sus manos dentro de esos malditos shorts.
Yixing se hizo un manojo de gemidos cuando su novio empezó a masturbarlo y, con ayuda del líquido pre-seminal, estiraba su entrada.
ㅡJ-Junmyeon ㅡjadeó, las piernas le temblaban.
El nombrado no demoró en desabrocharse el pantalón y dejar que cayeran al suelo antes de apartar con furia la prenda que cubría las partes íntimas del chino, no la retiró, solo la apartó lo suficiente, esos shorts eran tan holgados que había logrado penetrarlo sin quitárselos.
ㅡ¡Ah! ㅡgimió con el primer golpe, aferrándose al lavaderoㅡ M-Mh.
ㅡOdio estos shorts ㅡgruñó sacando gran parte de su miembro antes de enterrarse con un golpe certeroㅡ, los detesto.
El pelinegro apretaba la esponja con la que había estado lavando los platos, provocando que toda la espuma saliese de a montones.
ㅡVoy a deshacerme de ellos ㅡle besó el cuello cuando sus embestidas alcanzaron gran velocidad.
ㅡ¡S-Sí! ㅡgimió corriéndose dentro de sus preciados shorts.
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¿Qué tal el primer día? ¿Salió bien? ;^;
Los amo, ¡gracias por el apoyo! Entre puerks nos amamos 6u6