Llega un punto en que la vida
se vuelve insostenible.
Y empiezas a tener miedo.
Miedo a vivir.
Miedo a no morir.¿Qué pasa si transcurren los años y envejezco y me consumo,
pero no llego a nada?
Como un tren que recorre
las vías fatigosamente,
soltando chispas,
humo y calor.
Un tren sempiterno que, habiendo tenido un inicio
no tendrá jamás un final.
Pasará el tiempo y
él seguirá traqueteando,
en ruinas por dentro y
con un aspecto lamentablemente mal disimulado por fuera.
Sin destino,
sin motivos,
sin sentido.
¿Qué pasará sin un día (hoy)
ya no puedo más?
¿Si he tenido suficiente?
¿Si ya no puedo levantar
la vista de mis rodillas?
¿Si aun sintiendo
el dolor corriendo (saliendo)
por mis venas,
no soy capaz de irme?
¿Si no puedo?Tendré que seguir sufriendo. Vagaré por las calles
cómo un cadáver putrefacto
con aspecto de niña
con cara de vieja
y agujeros negros
por ojos,
boca de viento....
Yo no tengo miedo a la muerte, tengo miedo a no morir nunca.
Maud☠
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La melancólica muerte de mi alma
Non-FictionY yo me cubro, yo me envuelvo, me mezo en mi nostalgia preferida, me abrazo a la almohada y lloro, me avergüenzo de mi edad y no comprendo por qué, tan de repente, ya no soy una niña.. A. Pizarnik ☾