ᴇɴ ʙᴜsᴄᴀ ᴅᴇʟ ᴀᴍᴏʀ 《ʀᴜɢɢᴀʀᴏʟ》

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Últimos capítulos

Omnisciente

Karol nerviosa mira a Rugge, él le sonríe, baja la mirada sonrojada.

—¡Princesa!—el italiano trata de cambiar de tema—¿qué haces acá?—pregunta, la niña sonríe mientras se acerca a ellos.

—¿Papi se te olvida que yo vivo acá?—pregunta—¡dah!—lo dice en un tono burlón lo que provoca risas por parte de los mayores.—¿Qué estaban haciendo?—mala idea, el italiano no había podido cambiar de tema, Karol nerviosa se suelta de sus manos entrelazadas, el chico se acerca a un hija, poniéndose de cuclillas para estar a su altura.

—Princesa que te parece si vamos a la sala nos sentamos y te contamos algo ¿sí?—Mariana confundida asiente—vamos—con su mano derecha agarra la mano de Mari y con la izquierda a Karol.

Cuando llegan a la sala Ruggero hace que Mariana se siente en el sofá individual, al frente de este está la de dos personas donde se sentaría él junto a Karol. Para poder llegar a conversar mejor.

—¿Está todo bien?—pregunta cruzándose de brazos la niña. Los adultos se dan una mirada y sonríen.

<< Las mentiras no los llevaran a nada >> —piensan.

—Mi niña...tu papi y yo...—Karol estaba demasiado nerviosa no sabe cómo Mariana se tomara aquella noticia—esta—Ruggero toma su mano, ella voltea a mirarlo, este solo le da una sonrisa. Él iba a continuar.

—Princesa, ¿tú siempre quisiste a Karol como tu mamá no?—Mari se pone nerviosa y mira con los ojos abiertos a Karol, era su secreto.

—Y-yo eh—no sabía que decir, la mexicana sonríe por su reacción.

—Tranquila cariño, tu papi ya lo sabe—susurra, la menor sonríe tranquila ya y asiente.

—¿Te acuerdas cuando me dijiste que querías una mamá que te quiera, cuide y proteja?—la niña asiente ante la pregunta de su padre—¿tú me quieres ver feliz no?—vuelve a pregunta por lo que tiene la misma repuesta, un asentamiento de cabeza—Bueno—Ruggero de repente se había puesto nervioso es en ese momento donde siente el apretón de manos que su novia le había dado—Karol y yo estamos juntos—suelta la respiración que sin querer estaba reteniendo, la niña frunce su ceño y luego asiente para reírse.

—Si papi ya sé—los adultos abren los ojos sorprendidos—están juntos porque Karol se sentó a tu lado—continua obvia.

La mexicana hace una mueca, ahora en estos momentos no sabía si decirle la verdad o no. Ella no quería ganarse el resentimiento de Mariana, su hija. Por otro lado, Ruggero estaba nervioso quería hacer las cosas bien por ello decidió que es importante decirle la verdad de una vez a la pequeña.

—Mari...pequeña—ahora habla Karol— lo que tú papá quiere decir es que...él y yo...—suelta un suspiro.

—Somos novios princesa—termina Ruggero, los dos miran la reacción de la pequeña que abre sus ojos.

—¡¿Qué?!—chilla seria.

—Mariana—susurra Karol al ver como los ojos de la pequeña se llenaban de lágrimas.

—Princesa—ahora susurra Ruggero.

Los dos estaban arrepintiéndose de todo, lo menos que querían era lágrimas de Mariana.

—Y-yo—la niña habla luego de un incómodo silencio—¡Gracias!—chilla levantándose y subiendo al regazo de los dos—Siempre quise una familia—solloza, los adultos la abrazan y sonríen—gracias por cumplir mi sueño—susurra.