Estaba en la biblioteca, buscando algún libro para no aburrirme en los días de invierno, hasta que uno me llamó la atención. Su portada era de color dorado, parecía ser un libro bastante interesante. Entonces me decidí a cogerlo, cuando de repente se abrió una inmensa puerta de la que se escapaban millones de destellos que revoloteaban por todos lados.
–¡Ayúdame, socorro!– dijo una voz del interior de aquella puerta
Casi al instante, tomé el pomo y abrí cuidadosamente para no hacer ruido. Me encontré con una especie joven, rodeado de rosas oscuras. Parecía estar atrapado, solo.
–Hola, ¿te encuentras bien?– le dije
–¿Tu quién eres?– respondió inmediatamente algo sorprendido
–Soy Laia, he oído como gritabas.
–No deberías estar aquí, es peligroso.
–¿De qué hablas?
–Nadie ha podido salvarme, es inútil... El mundo desapareció por mi culpa, una bestia hizo un hechizo que acabó con todo el mundo, menos conmigo.
–¿Qué debo hacer?
–No lo sé.Entonces recordé aquel cuento que mamá me había leído cuando era apenas una niña.
–El hechizo romperás cuando a un roto corazón consigas liberar.
Claro, ese era el antídoto, ¿pero que puedo hacer yo para recomponer un corazón herido?
–Dame tu mano– dijo el joven
Aquellas horribles flores marchitas se fueron. Él me estaba esperando desde hace mucho tiempo.
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Viaje hacia el futuro
RomantizmLaia es una joven muy curiosa, tanto que halla una forma de llegar al futuro. Todo está desierto, menos ese muchacho, él se encuentra vivo, esperando a alguien que lo reviva.