-¿Qué está pasando aquí?- dijo Zeev incrédulo.
Para no estar sorprendido, pensé yo. Había una mujer en mi salón a la que no había visto nunca. Tenía el pelo alborotado y la ropa hecha girones , manchada y con un olor repugnante.
-¡Traédmelo!- gritaba la mujer.
Nadie se movía ya que tenía a Ángel agarrado del cuello.
-¡Traédmelo o lo mato!- seguía gritando.
-Señora tranquilícese y por favor suéltelo.- le pidió Irina muy asustada.
Entonces recordé lo que Aluhe me había dicho: "si cualquier situación te supera solo tienes que decir mi nombre en voz alta." Él tenía poderes a lo mejor podía ayudar.
-Aluhe- susurré.
En ese momento la señora dejó de gritar y me miró. Sus ojos eran los más hermoso y a la vez terrorífico que había visto en mi vida. Sus ojos eran de un blanco puro, no tenían pupila, ni iris, ni nada. Solo blanco.
-¿Dónde está?- dijo mirándome.
-¿Quién? ¿Aluhe?
-¡¿Dónde está?!- volvió a gritar.
Y en ese momento se abalanzó sobre mi. Cerré los ojos a la espera de sentir el fuerte impacto pero eso nunca pasó. Entonces, abrí los ojos y lo vi allí.
Había fuego por todas partes. Lo más extraño fue que no sentí que fuera peligroso. Sino más bien que era parte de mi.
-¿Qué ha pasado aquí?- era Aluhe, había aparecido y estaba controlando a la mujer.
Mis amigos, boquiabiertos, no sabían que estaba pasando ni como reaccionar.
-Ena- me llamó Aluhe-, haz que vuelva.
-¿Cómo?- me quedé pensando y caí en que se refería al fuego- ¿Pero cómo lo hago?
-Tu solo siéntelo.
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Nombres
Fantasy¿Te imaginas un mundo donde todos fueran felices? ¿Dónde no hubiera guerras? ¿Dónde todos fueran "normales"? ¿Puedes hacerlo? Si puedes no sigas leyendo, tienes suerte de tener esa fe en la humanidad y yo no quiero arrebatártela. Si no puedes enton...