La tradición. (Larry)

CAPITULO 5.

CAPITULO 5.

Había dormido realmente bien, nunca en su vida había sentido una cama tan cómoda, sin mencionar lo suaves de las telas y no solo de las cobijas, la bata que había usado como pijama era realmente suave, además era corta y ancha por lo que había podido moverse como se le antojase, despertó por los rayos de sol que daban directo a la cama y de no haber sido por estos seguro podría haber seguido durmiendo todo el día, aunque seguro ya era tarde, se incorporó frotando sus ojos y retirando los rizos de su cara, estiró sus brazos y justo antes de que pudiese ponerse de pir su mirada choco con la de Louis que se encontraba sentado en uno de los sillones del cuarto, su mirada estaba puesta sobre Harry quien rápidamente se cubrió con las mantas para tapar sus piernas, sintió sus mejillas rojas y su ceño se frunció.

- ¿Qué hace en mis aposentos?

La voz de Harry había salido mas temblorosa y aguda de lo que le hubiese gustado pero no cambio su postura, Louis alzó una de sus cejas y llevo una de sus manos a tu labio inferior para pasearlo por sobre este.

-Es casi medio día, mi madre me obligo a tener una "cita" contigo, pero te vi tan dormido que preferí dejarte así y como es obvio no podía salir y arriesgarme a que me viesen por ahí, mi madre se enteraría.

La voz de Louis era tan arrogante, solo hacía que las ganas de parte de Harry de golpearlo hadta dejarlo inconsciente aumentaran, suspiro dejando caer su rostro entre las sabanas para luego gruñir bajo.

-¿Puedes salir ahora? Debo cambiarme.

-Uhhh... yo creo que no risitos, como ya te dije, no me arriesgaré.

¿Risitos? Louis estaba cavando si tumba solo, pero a eso podían jugar los dos, Harry se levanto de la cama para caminar a paso firme hacia el ropero, en su mente solo maldecía el haber elejido una bata tan corta, por no decir de lo delgada y transparente que era la tela, aceleró el paso hasta el closet y se encerró en este, agradeció tener un closet tan grande, tardo eligiendo su ropa hasta que se decidio por unos pantaloncillos ajustados y una camisa ancha, se veía lindo, o almenos eso pensaba, almenos ya sabía como vestirse, cuando salió rodó los ojos encontrandose con Louis aun en el sillón.

-Tienes unas lindas piernas risitos.

-¿No tiene nada mejor que hacer?

Harry hablo desafiante mientras iba hasta uno de los sillones para sentarse en este, observo a Louis de pies a cabeza, era muy guapo y su porte era serio además de su mirada que intimidaba a cualquiera.

-La verdad es que si, pero estaré aquí hasta la tarde, deben saber que estamos juntos.

-Pudo haber cerrado las cortinas para que yo durmiera más.

Louis río ante el comentario para después ponerse de pie, tomo una campana y que servía para llamar a los criados y volvio sentándose esta vez al lado de Harry, llamo a la campana y antes de que harry lo notara tomo su mentón con una mano acercandolo a su rostro y uniendo sus labios mientras con su otra mano tomaba a harry de la mano entrelazando sus dedos, la puerta se abrió mostrando a Max quir bajo la mirada casi al instante, antes de que Harry siquiera reaccionará Louis se alejo para sonreír de forma arrogante hacia Max.

-¿Puedes traernos panques, leche y jugo? Y porfavor asegurate de tocar a la puerta antes de entrar, no sabes si vas a interrumpir algo.

-Lo siento Príncipe, con su permiso.

Las mejillas de Harry ardían, Louis lo había hecho aproposito para que Max viera la escena, sintio la rabia recorrer su cuerpo y en cuanto la puerta cerro no dudo en estampar su palma en la mejilla de Louis.

-¿Por qie hiciste eso? ¿Eres estupido?

-No me gusta como te ve ese criado, parece que quiere follarte en cada momento.

El ceño de Harry se frunció y su mano se alzó con la intención de azotar nuevamente la mejilla del mayor pero este lo sostuvo con fuerza.

-No te atrevas a golpearme una vez más o yo te golpearme a ti, en unas semanas serás mi esposo y si quiero besarte te besare y no me importa donde sea, si quiero tomarte lo haré y si quiero mandar a matar a cualquier criado lo haré así que no me subestimes Harry, se lo que te digo cuando digo que ese criada quiere lanzarse sobre ti.

La voz de Louis era fuerte y gruesa, Harry sintió miedo y automáticamente corrio hasta su cama para esconderse entre las cobijas y soltar un sollozo, odiaba llorar y sentirse tan debil, odiaba ese lugar, quería volver a casa, quería estar con su familia, quería su cola, quería su cuarto, quería nunca haber conocido a Louis, sintió su cama hundirse y a Louis suspirar, pisó su mano sobre la espalda de Harry y acaricio esta con suavidad.

-Lo lamento Harry, no te haré daño, no me temas.

Suspiro recostandose al lado de harry para luego llevar sus manos a su rostro y tallar este.

-Es dificil para mi, mi padre esta muriendo Harry, mi padre... el me enseño todo lo que se, el era mi ejemplo a seguir, el era mi todo y se esta muriendo y sobre eso tengo que casarme con alguien que no me quiere, tengo que aprender a dirigir no uno si no dos reinos y... aveces siento que no podré Harry, me siento debil, y ayer vi como ese criado te habla y me molesté tanto por que tu eres quien deberá estar conmigo el resto de mi vida, no quiero que de pronto un día despierte y mi esposo haya huido con un criado.

Harry escuchaba atento, cubrió su cuerpo con las mantas para que Louis evitara escuchar sus sollozos, iba a decir algo pero la puerta sono y Louis se levantó para recibir la bandeja con pancakes y la dejo en la mesilla al lado de la cama.

-Provecho Harry, lamento esto.

Dicho esto se acerco a Harry para pasar su mano por los rizos de este antes de marcharse de la habitación, dejando a Harry solo, este solo pudo llorar aún más.

Por la tarde Harry decidió explorar aun más el castillo, tomo su capa junto con una pequeña bolsa donde llebaba un lápiz y una libreta, salió hacia los jardines del palacio, estuvo sentado admirando la variedad de flores que había, sin duda eran mas lindas que las que había en el mar por lo que comenzo a recoger hojas secas las cuales iba guardando entre las hojas de una libreta, también encontro algunos insectos los cuales lograron maravillar al joven, cuando comenzó a oscurecer decidió volver al castillo donde fue hadta la cocina para que le preparasen algo de cenar, la comida que las cocinera preparaban era realmente deliciosa.
Después de haber cenado subió a sus aposentos donde fue directamente al baño, llenó la bañera con agua caliente y se adentro en esta, su piel palida casi se confundía con la bañera, cerro sus ojos relajándose mie tras dejaba que el calor del agua recorriera cada espacio de su piel, poco a poco comenzó a sentir su respiración mas relajada hasta que ya no supo más nada.

-¡¡HARRY POR DIOS DESPIERTA!!

La voz de Louis gritándole y sus manos agitandolo habían hecho que Harry se despertara aturdido, observo a Louis de forma extraña y luego vio a su alrededor, el baño, se había quedado dormido.

-Harry Dios, mírate tienes cola, y tu piel... tienes escamas otra vez.

Harry se incorporó rápidamente, ¿que hora era? No podía ser posible eso.

-¿Q-que hora es?

-Son las 8amm. ¿A que viene eso? Tienes cola y lo que preguntas es.. ¿La hora?

Si mal no recordaba había ido a sus aposentos antes de las 8... las 12 horas habían pasado, pero que estupido, ¿como pudo quedarse dormido?

-L-Louis... en mi tocador hay una concha con perlas dentro, porfavor traela.

Louis hizo lo que Harrh había ordenado y vio como este tomaba una perla para luego regresarle la concha.

-Louis la ultima vez que tome una me desmayé, si lo hago llevame a mi cama, porfavor.

Louis asintió observando como Harry llebaba la perla hasta su bica para luego tragar esta, vio como su rostro se transformaba en una mueca de dolor como de su boca salian quejidos, luego de esto vio como Harry caía desmayado.