Un recuerdo lo cambia todo.

¡¡A vuelto!!

Pasaron ya las dos semanas desde que Hans, el decimotercer príncipe de las Islas del Sur se había marchado a un viaje de entrenamiento, Elsa ese día se levanto muy temprano, decidió levantar a Anna temprano también para no tomar desayuno sola.

—Anna, ya levantate, no quiero tomar desayuno sola y estoy de muy buen humor— dijo Elsa abriendo las cortinas de la habitación de Anna con muchas ganas

—Elsa cinco minutos más, por favor—

—Que no, ya levantate— dijo quitando la ropa de cama que estaba encima de Anna

—Esta bien— Anna se sentó en la cama y Elsa se retiro para que se vistiera

Paso el rato y Kristoff con Anna junto con Olaf se sentaron en la mesa. Elsa llego derrepente con una sonrisa en su rostro.

—Wow!! Elsa ¿Porque tan feliz?— pregunta Kristoff con curiosidad

—Oh bueno por dos cosas, una porque mi muñeco de nieve favorito ya esta junto a nosotros, ¿no es así? Olaf— dijo Elsa con una alegría muy grande

—Oh claro que si—

—¿Oye Olaf ? cuentame ¿Que aprendiste con los trolls?— dijo Elsa

—Oh bueno con los trolls, aprendimos canciones y hacer manualidades, ya sabes Elsa cosas con las manos—

—Si claro cuando era pequeña solía ser mi pasatiempo favorito, claro que habían muchos más como...—

—Elsa— dijo Anna

—Los libros...—

—Elsa— repitió

—La escritura y...—

—¡¡Elsa!!—

—Oh vaya Anna no se grita en la mesa ¿Que pasa?—

—Y cual es la otra razón? de tu felicidad—

—Oh, mi felicidad, emm...- comenzó a ponerse nerviosa —Bueno hoy...— hasta allí llego porque Damian entro y dijo —Disculpeme majestad, pero el barco en el que se traslada Hans ya esta a la vista—

Elsa sonrie amplio y agradece mentalmente a Damian por haber entrado —Gracias Damian—

Elsa solo agradeció la comida y se retiró, espero muy paciente en el vestíbulo, leía, pero no podía concentrarse asi que solo se sentó en uno de los sillones, tanto esperar se aburrió y le dio sueño, se quedo dormida.

Mientras tanto en el barco Hans se asomaba por la orilla para ver el reino de Arendelle, pensaba en Elsa ¿Como estará? ¿quien la habrá cuidado? todas esas dudas desaparecían cada vez mas cerca de Arendelle

—Hola!— dijo Dario uno de los soldados también enviado al entrenamiento

—Buenos días, Dario—

—¿Que piensas?—

—Bueno pienso en muchas cosas, pero pienso más la persona que mas amo— dice un poco sonrojado

—¿Amas a alguien?— Preguntó

—Si, ¿por que?—

—Porque yo he estado enamorado antes y es un problema, es horrible ella va querer cambiarte y tratara de hacerlo, por años y años y años...—

—Entonces...—

—Dejame terminar... y AÑOS—

—Ella es distinta, tiene algo... bueno me hace sentir algo que jamas sentí— dijo Hans

—Yo solo decía, bueno ya llegaremos... iré a buscar mis cosas—dijo retirándose

Hans por su parte ya tenia su maleta en la manó, ni siquiera se dio cuenta cuando el barco llego a Arendelle, bajo lo mas rápido que pudo y se dirigió al castillo. Al llegar allá busco a Elsa en su habitación, en la biblioteca, en el comedor, la cocina solo le quedaba el vestíbulo así que al abrir la puerta allí vio a Elsa dormida, sumida en sus sueños, esos ojos azules de rubí estaban cerrados y su cabello olía a rosas, Hans se acerco a ella y le dio un tierno besó en la mejilla, Elsa abrió los ojos y vio esos ojitos verdes que la volvían loca se abalanzo sobre Hans los dos cayeron al suelo y se dieron un fugaz beso a ojos cerrados.

Al levantarse los dos se abrazaron y se dieron otro besito

—Amor, te extrañe mucho...— dijo Elsa

—Si y yo igual ¿que hiciste sin mi todo este tiempo?—

—Muchas cosas, te explico después, ahora... emm sobre Anna—

—¿Anna? ¿Le ocurrió algo a Anna?—

—No!! Anna esta bien... solo que recuerdas cuándo Anna nos vio besándonos?—

—Oh... claro ¿por que?—

—He decidido contarle la verdad, ella dijo que estaría de acuerdo—

—¿Enserio?— dijo Hans

—Pues si ya qu...- eso alcanzo a decir Elsa ya que Hans la tomo y la besó

Luego de eso se retiraron al comedor, ellos suponían que allí estarían todos Anna, Kristoff, Olaf y sobretodo para Elsa, Albert...