Tenemos unos minutos para actuar antes de que el gas nos inhabilite, así que los tres nos miramos, pensando cómo salir de aquí.
Mientras nosotros estamos al borde de un ataque de nervios, el policía sigue conduciendo tranquilamente, como si nada pasase. Está hablando con alguien por teléfono:
-Los tengo a todos, llegamos en cinco minutos-. Eso es todo lo que consigo oír a través del cristal que nos separa.
Alguien me quita la mochila y me giro para ver por qué.
Al darme la vuelta, veo a la chica buscando desesperadamente en ella. Saca un paquete de pañuelos y empieza a meterlos en el conducto del aire, hasta que lo tapa completamente y el gas para de salir.Me mira eufórica y le devuelvo la sonrisa, es un gran avance.
Lo malo es que ahora nos queda lo más difícil: conseguir salir del coche y evitar que el policía nos coja otra vez.Miro a mi alrededor analizando el coche. El cristal está tintado y eso ya nos da algo de ventaja, porque el policía cree que estamos inconscientes.
Tengo una idea.
Me llevo un dedo a los labios para indicarles a Ian y a la chica que no hagan ruido y cojo mi mochila.
Rebusco en su interior hasta encontrar una manzana (me la iba a comer al llegar a la casa que tenemos comprada) y junto la manzana está...
¡Bien!
La navaja sigue ahí.
La cojo y se la enseño a la chica y a mi hermano, y luego señalo al policía con ella. Ambos asienten, e Ian me sonríe, como diciendo que todo va a salir bien. Su sonrisa me tranquiliza un poco. Lo suficiente para que la mano que sujeta la navaja deje de temblar.El coche se detiene y la puerta del conductor se abre.
Los tres aguantamos la respiración, preparándonos para lo que se no viene encima.El policía llega a la altura de mi puerta y me pongo en tensión, preparado para saltar.
La puerta se abre y mi mano se mueve rápidamente clavándole la navaja en el brazo al policía. Da un paso atrás con una expresión de dolor y desconcierto y aprovecho ese momento de debilidad para salir corriendo.
Ian y la chica salen corriendo por la otra puerta del coche y los tres corremos como si la vida nos fuera en ello (que en realidad nos va).
El policía tardó un rato en reaccionar y ahora nos persigue por la calle, pero ya es tarde para él porque le llevamos mucha ventaja. Giramos a la derecha en una esquina y nos metemos en la primera tienda que vemos: un supermercado. Nos mezclamos con la gente y miramos por la cristalera de la tienda justo a tiempo para ver al policía pasar corriendo por delante de la cristalera.
Se le ve muy enfadado, corre sujentándose el brazo herido (era necesario hacerle eso), gritando maldiciones y con una expresión de odio surcándole el rostro.Pasados unos minutos, los tres salimos del supermercado, mi hermano dejando poco a poco de llorar y la desconocida y yo más relajados.
- ¿Cómo os llamáis?- Después de lo sucedido, esa pregunta me desconcierta. Aún así respondo.- Matías, y él es Ian, mi hermano-. Le aprieto el hombro a Ian para transmitirle tranquilidad.
-Yo soy Lauren-. Dice con un hilo de voz, y súbitamente empieza a llorar- ¡Mierda, no sé dónde están mis padres y estamos en otro país sin dinero ni nada!-un señor que pasa por la otra acera nos mira mal, pero ella sigue gritando y llorando- ¡Y como si no fuese poco, un puto chalado que se hace pasar por policía nos intenta secuestrar...!-.
Esto último lo dice más bajo, rompiendo otra vez a llorar.-Lauren- ella levanta la cabeza para mirarme, tiene los ojos rojos y los puños apretados contra su costado- encontraremos a tus padres y a los nuestros, te lo prometo. No sé cómo, pero lo conseguiremos-. Se lo digo muy enserio y creo que ella lo nota, porque deja de llorar.
Ya estoy más tranquilo aunque las palabras del policía me inquietan. Justo antes de encerrarnos nos dijo: "Creedme, que pronto os reuniréis con vuestros padres".
¿Los tienen secuestrados él y quien le esperaba en el sitio al que nos llevaba? ¿Por qué? ¿Les habrán hecho daño?
Formulo muchas preguntas en mi mente, todas intentando evitar la pregunta que más miedo me da hacerme:
¿Podremos hacer algo para ayudarlos?* ¡Holaa!! Aquí os traigo el capítulo seis. Si os gustó hacedmelo saber dándole a la estrellita de abajo. Mañana publicaré el siguiente capítulo :D*
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¡Reacciona cuando te hablo!
AventuraMatías Patterson es un chico de 15 años que lleva una vida completamente normal, hasta que un día, su vida cambia totalmente. Cuando se sube a un avión con su madre y su hermano, algo se tuerce en el vuelo y varias personas desaparecen. Entre ellas...