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Lo vi irse después de que me diera un beso en la mejilla y una media sonrisa se dibujó en mi cara.

Mire la roca entre mis dedos y me dispuse a entrar a mi casa pero la sensación de ser observada me detuvo. Busque al causante y me tope con Bill, quien estaba parado en su garaje sin decir nada. A veces olvidaba que éramos vecinos y que nuestros padres eran amigos cercanos.

Lo mire de igual manera esperando inútilmente a qué hablara conmigo o me saludara pero tras ver cómo entraba a su casa decidí hacer lo mismo. Entre a mi habitación relajandome en mi cama y en la oscuridad los pensamientos se apoderaron de mi mente.

Todo lo que habia hecho en este pueblo era perseguir al ojiazul para arrodillarme ante el y ser una completa demente con severos problemas de ira. No era nada de lo que fui antes de llegar aquí, me convertí en una versión de mis abusadoras y eso me provocaba repulsión.

La única esperanza que no dejaría escapar era que con Thomas fuera diferente, deseaba dejar los dramas y toda la mierda de Eso atrás.

Mis ojos poco a poco se cerraban siendo Thomas mi último pensamiento.

(...)

Cerré por fin las libretas con emoción, la asquerosa tarea de verano estaba terminada y por fin podía enfocarme en arreglarme para mi cita.

Mire el reloj que marcaba las 4:00 en punto y camine al baño donde llene la tina para tomar una ducha refrescante. Una vez afuera fui a mi angosto clóset y seleccione una blusa negra que dejaba descubierto mi pecho además un pantalón que acentuaba mi cadera y cintura. Alisé mi cabello para después maquillarme lo más perfecto que pudiera, una capa de rimel y sombra negra fueron todo lo que necesité para estar lista.

Eran las 5:50 y mi pulso aumento al cien cuando el timbre sonó. Baje las escaleras tomando una gran bocanada de aire para disipar lo nerviosa que estaba y abrí la puerta con una sonrisa.

-________-dijo Thomas pasando su mirada de arriba a abajo- Te ves bonita.

-Gracias- respondí cerrando la puerta detrás mio

No pude evitar analizarlo por completo, llevaba una camisa que resaltaba con su piel y lo hacía ver más fornido. Mis mejillas se encendieron cuando noté que se había dado cuenta de lo que hacía.

-Sera mejor que nos apresuremos o llegaremos tarde- tomé su mano y emprendimos camino al cine.

(...)

Estoy segura de que mi risa se podía oir en toda la calle pero era inevitable con las historias que muy alegremente me contaba el pelinegro.

-Es tu turno, cuéntame un buen recuerdo- dijo Thomas con inocencia pero una mueca se formó en mi cara.

-No hay nada bueno para decir-mi voz salió más temblorosa de lo que hubiese querido y mi mirada se clavo en el piso.

-Oh, lo siento no quise....-

-No te preocupes- le di una sonrisa torcida- Tal vez algún día te hablé sobre eso.

Su dedo pulgar acaricio mi mano que aún se encontraba entrelazada con la de el y seguimos caminando entre la gente hasta llegar al lugar donde había una larga fila para entrar.

-Mierda- hablo Tom- No pensé que fuera a estar tan lleno.

La cola se extendía hasta dar vuelta a una calle y supe que pasarían horas antes de que pudiésemos pasar. Nos miramos sin saber que hacer pero lo que estaba claro era que en definitiva no esperaríamos esa cantidad de tiempo.

-_______- una voz familiar me llamo tras mis espaldas.

-Gafotas- solté una risa y abrace a Richie quién iba acompañado de Stan y Eddie- No saben cuánto los extraño.

-Si bueno, es normal- soltó con sarcasmo- Somos inolvidables

-El es Thomas- dije al recordar a mi acompañante- Thomas, ellos son mis amigos.

-¿Iban a entrar a ahí?- Eddie señaló al cine a lo cual asentí.

-Iremos a mi casa a ver una película y como soy un alma caritativa los invito- rodé los ojos al escuchar a Richie y me gire con dirección a Thomas a quien aparte un momento.

-Se que ir con ellos sería cambiar el plan pero los extraño tanto, además de que seguramente te van a caer bien aunque puede que Ri.....- fui interrumpida por el.

-Esta bien, no tienes que darme explicaciones- sonrió con seguridad- Si son tus amigos en automático me caen bien.

Tomé su mano y me acerque a los chicos.

-Esta bien gafotas pero más te vale que sea una buena- le dije y comenzamos a caminar hacia su casa.

Siempre juntos [Bill Denbrough]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora