Strange Love

Capítulo 4: Empujones, histeria y un encuentro inesperado.

JI YONG

Tuve que ahogar la risa al ver su expresión al darse cuenta que estaba rodeada de los chicos, sus ojos parecián salirse le de las cuencas y su boca formaba una diminuta "o", la verdad es que era realmente adorable y diferente.

Justo cuando pensé que se me lanzaría cual loca a los brazos al grito de "Oppa", no lo hizo. Bueno si que gritó, pero nada parecido a eso, o bien no tenía la menor idea de quién era yo, lo cual es probable ya que es extranjera o bien lo disimulaba muy bien.

- No vamos a hacerte daño preciosa- Le susurré al oído, haciendo que diese un saltito por el susto.

- ¿Eres estúpido? Deja de hacer eso.

Me había dicho algo, pero no tenía idea de lo que significaba, porque ese idioma no era coreano. Todos la mirábamos extrañados, hasta que pareció darse cuenta y se sonrojó.

-Lo siento - se disculpó con los chicos- se me escapó. Y tú- dijo señalándome - deja de hacer eso de una vez. No me susurres, y si es posible ni me hables.

-¿Que idioma era ese?- No le hice caso y le pregunté directamente- ¿De dónde eres?

- Español- me contestó apretando los dientes- y es todo lo que diré.

-Umm, muy bien. Solo una cosa más.

-¿ Y a hora que quieres?

- Si, no piensas hablarme linda, ¿Entonces como sabré a donde quieres ir?

Al escuchar mi pregunta se quedo completamente tiesa, sus mejillas se encendieron por segunda vez. Seguidamente se llevó las mano derecha a la frente avergonzada, murmurando en lo que supongo era nuevamente español.

Entonces me fijé que en la parte interna de la muñeca tenía un tatuaje, curioso le aparté la mano de su cara y la atrapé en las mías. Era un tatuaje sencillo, un nombre masculino, Anthony, entre dos alas y una aureola rodeando la h.

- ¿Quién es Anthony?

Mi pregunta pareció despertarla del estupor que le había causado que la tomara de la mano. Se deshizo del agarre con brusquedad, y vi sus hermosos ojos llenándose de una inmensa tristeza. Apartó rápidamente su mirada de mi, para enfocarla en la ventana.

-No es asunto tuyo- dijo al fin con la voz quebrada- voy a Gangnan, concretamente aquí- me pasó un papel con la dirección- si podéis os lo agradecería profundamente, si por el contrario es mucha molestia, me bajaré.

-No es molestia.

Daesung respondió tan atento como siempre, yo solo podía mirarla de reojo y preguntarme quien era ese tal Anthony, y que es lo que le había hecho para que luciera así de perdida.

Me sorprendí sintiendo rabia ante un desconocido, del que solo sabía el nombre, no debería importarme, después de todo, ¿que probabilidades había realmente de que nos volviéramos a encontrar? Sorprendentemente, este nuevo pensamiento me inquietó.

Observé el papel unos segundos, para finalmente ver escrita una dirección con letra muy pulcra: 747-7, Hannam-dong, Yongsan-gu, Seúl, 140-738, si la memória no me fallaba ahí se ubicaba el famoso hotel Grand Hyatt, J.J Mahoney's.

-¿Te hospedas aquí?

-¿Importa eso?- respondió encogiéndose de hombros- Tengo que llegar ahí, es todo lo que necesitas saber.

Sin darme apenas cuenta, habíamos llegado a frente a la entrada del hotel al que nos había pedido acercarla, el tiempo había corrido demasiado rápido y no había conseguido averiguar prácticamente nada de la misteriosa chica.