Capítulo 6

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La noche ha caído, me encontraba con Zalgo en el comedor, estaba parada a su lado mientras él comía un gran bufé.

- ¿Siempre comes solo? —pregunte mirándolo y luego agregue—, señor.

La herida que él me había provocado palpitaba, era algo doloroso...

- No estoy solo, estas aquí, ¿no? —siguió comiendo.

- No me refería a eso, señor. Es decir, comer junto con alguien,yo solo estoy parada a su lado, no estoy disfrutando la comida con usted.

- ¿Tienes hambre?

- ¡No,no! No me malinterprete es que... Ah... Un poco, sí.

- Sienta te.

- ¿Qué?

- ¿Eres sorda? Que te sientes en la mesa.

- Umm, esta bien.

Obedecí y me senté a su lado. Chasqueo los dedos y luego apareció mucha comida al frente mio, estaba casi babeando, no había comido nada en todo el día.

- Come algo. No esta envenenado o algo.

Lo mire y luego empecé a comer, primero comí un poco de pasta, estaba muy buena, todo esta delicioso.

- Es-esta bueno, señor... —dije con la boca llena.

- ¿No tienes modales? No hables con la boca llena.

No le respondí, seguí comiendo a gusto.

***

Luego de comer fui a la habitación que se me fue asignada. Al llegar lo primero que hice fue tirarme a la cama.

- Estoy cansada.

Y en un bostezo quede dormida.

***

Me desperté temprano y me encamine al baño encontrando me con Zalgo.

- Buen día señor.

- No tiene nada de bueno ___.

- Es solo educación. Una buena mañana para mi seria una donde este mi f-familia... —Susurre. 

- ¿Qué dijiste? 

- N-nada.

Y pase de él, no quería seguir con aquella conversación. - Ya veo—escuche por parte de él mientras entraba al baño.

Al salir del baño, ya vestida con un vestido simple color blanco y unas zapatillas negras, empecé a caminar sin rumbo, hasta llegar a la habitación donde estaba Zalgo ayer. Toque la puerta y escuche un ''Pase'' de parte de él.

- Oh, eres tú —dijo y siguió su lectura. 

- Perdón si interrumpo algo... señor—aun se me hacía raro hablar así, por momentos se me olvida como debía dirigirme a él.

- ¿Qué deseas? —dijo sin apartar la vista del libro y me di cuenta de que sus cuernos ya no estaban.

- Tus cuernos...

- Oh, simplemente los oculte. 

- ¿Cómo tú...?

- Ah ___, preguntas mucho, no seas tan curiosa, ¿eso es todo lo que tienes que decir me?

- No, no. No era eso, es que, no se exactamente que hago aquí o que se supone que deba hacer. Y no quiero caminar por tu castillo yo sola, me puedo perder, mi orientación es mala... 

- Por eso acabaste aquí.

- E-so no viene al caso, solo quiero saber que debo hacer.

- Ah, se supone que debes estar a mi lado todo el día, como una esclava, perdón, es decir, sirvienta.

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