Capitulo 13

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El frío me estremecía, me dolía la cabeza como si me hubieran golpeado con una piedra enorme, me enderece mire alredor, aún era de noche y la cabaña estaba con las luces apagadas, busque a Gabriel y ahí estaba recargado en el árbol, probablemente inconsciente que dormido.

Me pase la mano derecha por mi cabeza y sentí un líquido, con la luz que daba la luna pude ver un brillo tenue

-Perfecto sangre-me levanté, sacudí la ropa, me acerque a Gabriel tome su pulso, me relaje al ver que estaba vivo.

El ruido de la ciudad me tranquilizaba aunque no era mucho pero se podía escuchar el sonido de los carros y una que otra policía u ambulancia, a lo lejos.

Pensé en dejar ahí a Gabriel pero el bosque aún tenía animales, peligrosos.

Lo arrastre hasta la puerta de la cabaña, salí del bosque, entré a mi auto, pero todo me daba vueltas, me comenzaba a marear como si me hubiera subido a una montaña rusa, abrí la puerta y vomite.

No estaba en condiciones para manejar, tome mi celular pero la pantalla marcaba batería baja 6%, tenía unas ganas tremendas de golpear algo por la rabia pero no estaba en condiciones digamos "buenas" para pegar con un simple puño.

Me dolía demasiado la cabeza y el brazo como si me lo hubiera lastimado algún nervio, hice el asiento para atrás, controlando mi respiración, el cansancio podía más con el dolor y conmigo, sólo sentí que mis párpados se cerraban y mi visión disminuía

-¿Qué es mejor? Estar muerto o vivir-

-No lo se-reí

-Yo creo que tenemos que averiguarlo-

-¿cómo harás eso?-

-probablemente sea estar muerto-se levanto-Gracias por preocuparte por mi pero tu y yo sabemos que nadie nos entiende, sólo prométeme que siempre me recordarás

-¿pero qué dices?-estaba confundido

-Sólo prometelo-frunció el ceño

-Si, siempre te recordare y te recuerdo pero no entiendo-

Me beso lentamente y sonrió tristemente

-Adiós-

-Adiós-estaba extrañado con su comportamiento.

-Bueno-

-CHAZ!! VEN RÁPIDO-Decía Gabriel alterado

Corrí hasta su casa y...

Entré a la habitación de el, no era posible, caí de rodillas.

-No es posible, no es posible, ¡¿PORQUÉ?!-

-NO, ESTO NO ES REAL-

Desperté de un salto, mi respiración estaba agitada, estaba sudado me apoye en el volante y mis lágrimas empezaron a caer, tenía tiempo que no tenía esa pesadilla, es pesadilla que no me dejaba en paz, me percate que ya era de día.

Salí del carro y comencé a caminar por la carretera esperando que alguien me ayudara, pero no hubo respuesta alguna durante un buen tiempo, hasta después de 1 hora de camino, un carro me ayudo.

-¿mal día?-dijo la anciana que manejaba

-Así es-sonreí, estaba agradecido por haberme ayudado-¿le puedo ayudar en algo?-

-Si, a cargar unas bolsas y después te llevo a tu casa-decía sin despegar la mirada del camino, hasta que volteó rápidamente y paro en seco el auto haciendo que se moviera bruscamente-hijo mío tienes sangre en la cabeza, debemos ir al hospital-

El chico del cabello AzulDonde viven las historias. Descúbrelo ahora