Arrepentido.

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Disclaimer: Los personajes le pertenecen a Pol-ka Studios y Disney Channel, la historia es completamente mía.    

Capítulo 3

Despedida de solteros.


—¡Chicos, miren quién apareció aquí! ¡Es Ámbar!

Yam gritó a todo pulmón segura que esta noche seria una de las mejores pues todo su trabajo será visto el día de mañana, sus diseños, sus decoraciones, estaba ansiosa, quería que todos lo juzgaran. Ahora aprovecharía cualquier oportunidad para gritar y desahogarse.

Los espectadores, todos los del exJam & roller, le siguieron el juego a Yam y gritaron eufóricos.

La alta chica colocó un gorrito de fiesta en la cabeza de Ámbar, ella se lo quitó al momento con desagrado.

Estaban festejando, se decidió hacer una despedida de solteros en un gran terreno V.I.P. Aunque habían elegido el mismo lugar, todos se lo dividieron, los chicos en la zona sur y las chicas en la norte.

¿Quien decidió esto?

—¿Por qué todos vamos a celebrar la despedida de los novios en el mismo lugar? —Preguntó Ramiro con su característico acento chileno.

—La novia es algo celosa. —Respondió pérdida una Jim molesta porque su amiga estaba tan ocupada tomando los últimos detalles de la boda de mañana.

—No te molestes Jim...

—¡Oigan! ¡Es Sol, digo Luna! —Interrumpió Yam el consuelo de Ramiro hacia Jim, ambos voltearon a ver a Luna.

—¿Es Luna?, ¡Luna! —Jim se dirigió hacia ella olvidando su enojo siendo seguida por Ramiro y todos los chicos.

Luna siempre llamaba la atención de todos.

Simón quien veía todo pero prefirió mantenerse al margen no pudo evitar ver a Ámbar frotando sus brazos ante el frío mirando recelosa a la heredera de los Benson.

Ámbar siempre ha sido así, siempre ha tenido envidia por Luna desde que la conoció; y empeoró desde que se enteró que era Sol.

Aquella tarde luego de escuchar su conversación no lo había notado, sin embargo, saberlo era inevitable.

Pero en ese momento estar frente a esos ojos irritados lo habían roto.

Cancún después de perder el rodafest

—Todos nos equivocamos, yo también asumo mi culpa...

—Si esta es una clase de broma, yo no estoy para tus jueguitos Simón. —Lo interrumpió con dureza— ¿Sabés qué? Andate, no quiero oírte.

Lo estaba echando, era evidente aún así, no accedió y se quedó obedeciendo a las peticiones silenciosas que tenia Ámbar en su mente.

—Ámbar... —Murmuró, siempre hablaba bajo cuando estaba con ella.

—¿Querés que te pida perdón? Si, está bien, lo lamento y lo lamento mucho Simón, no es necesario que me sigas atormentando. Sé que hice mal... —Ámbar no sabia que decir, por más que le pedía perdón para que así la dejara y no la viera tan lamentable él ni siquiera movía un solo músculo—. Sé que jamás me perdonarás...

Emitió un gemido sin querer, su respiración no oía ordenes y ella se maldijo así misma, por otro lado Simón dándose cuenta de esto se dispuso a hablar, sin saber que lo haría.

—¿Qué harás? —Se limitó a decir consciente de lo frío que sonó.

—No, no lo sé... —Le contestó a pesar de que no quería hacerlo y es que ella quería aprovechar cualquier momento para estar cerca del chico que le robó su corazón— Estoy sola, ahora sí, estoy literalmente sola. No tengo a nadie. Mi abuelo ni siquiera es mi abuelo ¿No sé si te enteraste? Pero no soy la que decían que era.

Simón frotó sus cien, le dolía verla así.

—Sí, me enteré de ello.

—Pues mi... El señor Benson, me dijo que me iba a dar hogar, pero no lo quiero, no quiero la lástima de los demás. Ya está, no tengo nada ¿pero eso es bueno, no? Al menos no tengo nada que perder.

El corazón de Simón se oprimió por ver a esa hermosa chica romperse, le había creído, se conmovió, no había necesidad de ya nada, le había perdonado.

—Aún tienes algo.

—¿Algo? ¿Y qué es ese algo?

—A mi.

Simón tenia suficiente, sus lágrimas estaban cayeron de una en una y Ámbar no se salvaba.

Algo le decía que se iba arrepentir.

Pero ahí estaba empujándola hacia él para abrazarla, no consideró que ella levantara la cabeza y poniéndose de puntitas lo besara como nunca lo han besado.


S: 

Hay muchas cosas de las cuales me arrepiento del pasado, como el haber besado a Ámbar ese día, me dejé llevar por lo que decía mi corazón, siempre he sido muy sentimental, ese es mi mayor defecto. 

Despedida de solteros.

Simón se acercó a Ámbar, él quería que en su fiesta de solteros todos estuviesen felices pero ella no colaboraba.

—Dejala tener su momento de fama.

La rubia lo miró de abajo hacia arriba ¿Quién se creía?

—Que bueno que no le hicieron caso de hacer una fiesta de patines hubiera sido nefasto —Ignoró el anterior comentario solo porque se trataba de su fiesta.

—Hubiera sido divertido.

Ambos se miraron al mismo tiempo,  Simón sabia lo que pensaba, un "¿Vos me estás cargando?" se oía a kilómetros, pues Ámbar lo miraba indignada.

El futuro esposo dejando las bromas se fijó en aquellos ojos que un día alagó desde el fondo de su corazón, y su imagen se distorsionó a los de Luna, preguntándose si prefería los ojos de la bella madre tierra o los del profundo e intenso mar.

Ámbar notó el cambio en sus ojos y como se habían desviado hacia Luna, evitar sentirse mal estaba fuera de ella.

Nadie puede pretender lo que siente o lo que no, no se puede fingir, si no se esta dispuesto tarde o temprano se sabrá, y lastimará mucho más de lo que se cree.

Esa noche fue demasiado complicada.

———

Notas:

¿Si fueran Simón volvería con Ámbar? 

Yo la verdad sí le daría mi apoyo y amistad pero no volvería xD

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¿Con quién se casará Álvarez?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora