«Minseok era un omega que no entendía porque ningún alfa se le acercaba»
«Jongdae era un alfa celoso que esperaba el momento perfecto para acortejar a su hyung favorito»
⇝Top! kjd 〔alfa〕
⇝Bottom! kms 〔omega〕
⇝Mencionamiento de otras parejas.
Capítul...
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A duras penas pudo dormir, luego de que Jongdae lo dejase allí lleno de arrepentimiento inmediato no le quedó más remedio que irse a su solitaria cabaña a llorar, ahora sabía que los sentimientos del alfa eran verdaderos y era como un sueño hecho realidad, pero ojalá no se hubiese enterado de aquello y dicho aquellas cosas al amor de su vida, porque, aunque fuesen ciertas, ¿Qué importaba ahora? Ya no podía cambiar nada, y que un millón de alfas estuvieran detrás de él no hará que deje de amar a Jongdae.
Se sentía destrozado, regresar a su cabaña y ver esas hermosas flores que Jongdae le había regalado sólo logró romperlo más, se sentía tan triste que apenas y podía caminar, su lobo sólo lloraba en su interior después de haberlo retado hace un rato. Se había quedado dormido sobre la foto de Jongdae y él de niños, y con muchas lágrimas en los ojos.
Jamás se imaginó despertarse por muchos aromas mezclándose en su cabaña, y todos eran de alfas. Extrañado se asomó por la ventana al lado de su puerta y, oh, una fila de muchos alfas se encontraban detrás de esta, aunque a Minseok le entraron los nervios su lobo no se movió ni dijo absolutamente nada importándole muy poco la presencia de tantos alfas allí. Minseok no sabía porque habían tantos alfas en su casa, y lo ponía nervioso porque sabía lo celoso que Jongdae era y no sabía cómo podía reaccionar ante eso.
Sin embargo, respiró profundamente y acomodó un poco su cabello, cepillo sus dientes rápidamente y luego se volvió hacia la puerta para preguntarle a esa estampida de personas porque estaban allí, al abrir la puerta llamó rápidamente la atención, todos eran alfas conocidos en la manada, algunos hasta habían presentado hace poco, muchos tenían ramos de rosas o azucenas que crecían cerca de las praderas.
—¿Los puedo ayudar? —Preguntó con la voz temblorosa, la verdad es que las sonrisas y miradas que le dedicaban aquellos alfas mayores y menores que él lo ponían muy incómodo.
—¡Minseok! Joder estas hermoso. —Exclamó el alfa que se encontraba de primero en la fila gruñéndole a los demás detrás de él para que mantuvieran su distancia.
Bueno eso sí que era extraño, Minseok no se esperaba para nada ese cumplido, y sin saber qué hacer tan sólo sonrió y murmuró un gracias, se sentía muy incómodo pues podía notar como todos los alfas se empujaban para acercarse más hacia él, agradecidamente el primero de la fila los mantenía a raya, porque él quería ser el único en acercarse.
Minseok retrocedió pero ya aquel alfa bastante mayor lo tomo de los hombros y enterró su rostro en su cuello, aquello se sintió horrible y Minseok solo quería correr.
—Seré un buen alfa para ti, Oh Minseok. —Gruñó el susodicho en su cuello, Minseok se sintió asqueado, él ya tenía un alfa y no era ninguno de esa bola de incompetentes.
