JIMIN / 지민
Íbamos caminando con las manos entrelazadas. Habían pasado 13 meses con 8 días desde que nos habíamos encontrado. Su tacto era suave y las yemas de sus dedos acariciaban el dorso de mi mano, nos dirigíamos a la feria por segunda vez. Esperaba que en esta ocasión nos fuera mejor, ya que la primera vez que habíamos ido quise verme muy macho diciendo que los juegos mecánicos no me daban miedo y todo había terminado conmigo vomitando después de la montaña rusa, lo cual había sido incómodo y vergonzoso.
No sabía exactamente por qué Jungkook quería volver, pero me inquietaba un poco el hecho de que estaba nervioso, podía notar que cada tanto se acomodaba el cabello y sus manos sudaban más de lo normal. Pensé que podría ser su examen final de la carrera que presentaría un mes después, el pobre había estado al borde del estrés estudiando y autoexigiéndose para salir con mención honorífica, yo realmente no había mucho que pudiera hacer por él, masajes en la espalda y chocolate caliente eran mi mejor forma de decirle "Estoy aquí apoyándote".
Volviendo a ese momento, me sentía muy feliz de que después de unas semanas sin salir tuviéramos una cita, pero me preocupaba que aún así él no disfrutara por toda la presión que lo atormentaba. Rápidamente llegamos al lugar y mis ansiedades desaparecieron al voltear y verlo todo feliz y sonriente por las ganas de subirse a los juegos.
—¿Ya sabes cuál quieres primero?
—Mmmm sí ¡vamos a las sillas flotantes! Después al torbellino, el paseo del amor, los carros chocones, la montaña rusa y la rueda de la fortuna.
—De acuerdo... pero...
—Sí, sí, no te preocupes hyung, no soltaré tu mano en ningún momento —dijo mientras besaba mi mano aún entrelazada con la suya. — Y por el amor de dios no vayas a comer de esas papitas otra vez, no quiero tener el gusto de ver comida procesada de nuevo.
—¡Jungkook! ¡Prometiste no volver a hablar de eso!
—Jajaja, lo siento, es que tu expresión de vergüenza me mata de ternura.
—Tch, mocoso este.
Era curioso como a pesar de no estar marcado, había una conexión profunda entre nosotros, con tomar su mano mi lobo sabía que estabamos protegidos y a salvo, ya fuera de algún peligro mortal o de la maldita casa del terror. Saqué mi labio formando un puchero que rápidamente fue besuqueado por mi novio hasta que una sonrisa se formó en mi boca y nos dispusimos a comenzar con el recorrido.
Después de ir de un juego tras otro y rogarle a Jungkook que ya no nos subieramos por tercera vez a la montaña rusa pensé que podríamos buscar alguna otra atracción a la cual subirnos, pero me soprendí bastante al ver que mi novio se dirigía a la rueda de la fortuna, cuando me había dicho que subiríamos pensé que era una broma, la vez anterior se había quejado amargamente de lo aburrida que era. Entrelazó su mano con la mía mientras caminabamos hacia nuestro destino y pude percibir su nerviosismo de nuevo. Comenzaba a preocuparme, algo no estaba bien, Jungkook era algo tímido, pero conmigo había agarrado confianza y en los últimos meses lo había notado más seguro, a pesar del cansancio y el poco tiempo que podíamos vernos.
Con esos pensamientos rondando en mi cabeza llegamos a la fila.
—¿Jungkook?
—....
—¿Jungkook? ¿Kook?
—Eh ¿Pasa algo?
—¿Está todo bien? ¿Seguro que quieres subirte a esa "atracción aburrida"? —. Enfaticé las comillas con mis manos para aligerar un poco el ambiente
—¿Qué? Ah, no te preocupes bebé, todo en orden —. Acto seguido dejó un beso en mi frente. —Sólo tengo ganas de estar un rato contigo.
Me sonrojé y no dije nada más. A pesar del tiempo y de que era cinco años mayor que él —cosa que Hobi-hyung no dejaba de recordarme— me era inevitable convertirme en un tomate cada vez que decía ese tipo de cosas cursis. Después de unos minutos, finalmente nos tocó pasar y entramos en la pequeña cápsula. Pensé que iríamos frente a frente, pero en cuanto me senté Kook se colocó a un lado de mí mientras tomaba mi mano y apretaba su agarre. No dijimos nada, disfrutabamos en silencio de nuestra compañía, yo coloqué mi cabeza en su hombro y aspiré el delicioso olor que desprendía y que se quedaba conmigo cada vez que nos separabamos. Mi lobo aulló de felicidad, compañía, amor y protección se cernían sobre mí, acompañado de una paz que nunca antes había sentido. Por mí, podríamos habernos quedado ahí por siempre. Cuando llegamos al punto más alto, miles de lucecitas aparecían ante nuestros ojos, las estrellas más las luces de la ciudad conformaban una vista mágica. Me acomodé y pude ver la cara de mi alfa observando el paisaje mientras se mordía los labios. Acerqué mi mano a su mejilla para que volteara hacia mí y deposité un suave beso en sus labios.
—Jimin...
—Dime.
De pronto soltó mi mano y se pasó a la parte de enfrente. De pronto lucía muy serio y parecía buscar las palabras correctas.
—Es que, yo... no sé cómo decirlo...
Eso me puso ansioso y miles de pensamientos cruzaron por mi cabeza ¿Estaría enojado conmigo? ¿Algo malo había pasado? ¿Ya no estaba a gusto con nuestra relación?
—Me estás asustando Kook, lo que sea sólo dilo.
Él tomó una respiración profunda mientras tomaba mis manos.
—Lo siento bebé, no es nada malo. Sabes que soy malo con las palabras y por eso he tratado de pensar cómo decir esto de la mejor manera.
Su mano derecha rebuscó en su bolsillo y sacó una pequeña cajita con un anillo de oro adentro.
¡OH POR DIOS!
—Verás Minnie, he estado pensando mucho, sabes que pronto saldré de la universidad y seré un adulto con todas las de la ley y eso implica pensar en un futuro y yo... no puedo imaginar construir uno sin ti. Sé que eso del matrimonio a ti no te importa mucho, así que no te asustes, si lo deseas podemos casarnos después, lo que yo quiero es hacerte una promesa
—¿Pro-mesa? —. Mi cabeza estaba recuperandose del shock y procesaba lentamente la información
La expresión de Jungkook cambió a esa hermosa sonrisa de conejo que tanto me gustaba
—Sí. Te prometo que estaré siempre contigo, que haré lo que esté en mis manos para hacerte feliz, trataré de ser el mejor alfa y el mejor hombre. Quisiera que aceptes construir un futuro conmigo, porque somos un equipo, tú me ayudas a mantener la cabeza en el piso y a no ser tan exigente conmigo mismo, así como yo te ayudaré cada vez que te sientas inseguro o sientas que no puedes con las cosas. Jimin ¿Aceptarías mi promesa y convertirte oficialmente en mi omega?
Me quedé estupefacto varios segundos, de pronto sentí algo de sabor salado y me di cuenta de que algunas lágrimas se habían deslizado de mis ojos. No me esperaba algo así. Supongo que mi cara no era muy prometedora porque la expresión de Jungkook pasó de ser confiada y nerviosa a asustada. Él sabía que todo el asunto de la marca y las almas destinadas no eran mi cosa favorita del mundo, pero creo que ya lo había superado, si era feliz ¿Qué más daba?
Suspiré profundamente y tomé sus cachetes con mis dos manos para besarlo profundamente. Mi omega y yo sabíamos que responder, no había ninguna duda al respecto.
—Te amo, alfa. Pero si quieres que construyamos nuestro futuro juntos tengo dos condiciones.
Los ojos de mi novio se abrieron y se quedó expectante por mi respuesta.
—Punto número uno, tú también tienes llevar un anillo.
Asintió.
—Punto número dos... en cuanto te gradúes te quiero todas las noches en mi cama.
—... ¿me estás pidiendo que me mude contigo?
Asentí un poco aborchornado por lo que acababa de decir.
—Puedo con eso —. Volvió a sonreír mientras colocaba el anillo en mi dedo y nos fundíamos en un gran abrazo.
❧Muchas gracias por leer, votar y comentar.❧
![](https://img.wattpad.com/cover/121801947-288-k468870.jpg)
ESTÁS LEYENDO
Inefable II Kookmin Omegaverse
Short Story"Del lat. ineffabĭlis 'indecible'. 1. adj. Que no se puede explicar con palabras." Esa es la mejor manera de explicar como se siente Jimin el día en que por breves instantes se encuentra a un desconocido que le remueve todo en su interior. ❁Historia...