Parte 24 Descubriendo secretos

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Cuando terminaron la canción Seiya se dispuso a hablar

- ¿Rubia porque hacemos esto tan difícil? – le decía tomando su guitarra y dejándola en el atril – buscamos como complicar esto, se que en este momento, de nuevo, me odias

- ¿lo preguntas de verdad? Creo que la respuesta es más que obvia, no quisiste nada en serio, así que decidí intentar con mi vida – le decía Serena resignada – mientras se volteaba a dejar su guitarra al igual que Seiya – sinceramente no te entiendo, se que primero era solo un juego, somos buenos amigos, luego me querías, querías algo conmigo, nada serio y luego comenzaste a hacer tus cosas

- Pero Serena, debo ser sincero – le decía Seiya tomándole una mano e indicándole que se sentaran – todo esto me da miedo, enamorarme, tener algo serio, además no creo que este seguro de esto, no sé si me sentiré cómodo, te quiero me gustas, pero no quiero que esto termine mal como ya me ha pasado y eche a perder todo...

- Ya lo estas echando a perder – le interrumpía la chica

- Ya lo sé, pero aun así, si te das cuenta, de todas formas como amigos funcionamos bien

- Difiero de eso Seiya, pero te comprendo, entonces déjame intentar rehacer todo, quizás las cosas con Darien si resulten o quizás solo termine de cerrar ese ridículo ciclo y sea feliz – le decía seriamente Serena – no te esperare a que te decidas Seiya Kou, aun que seas atractivo, aun que me encantes, no lo haré, si cuando te decidas, estoy aquí, bien, si no, resígnate.

Diciendo esto, Serena se puso de pie, pero Seiya la detuvo agarrando su mano, provocando que se diera vuelta, en milésimas de segundos él la estaba besando delicadamente. Por un segundo la cabeza de la Rubia le decía sal de ahí, pero luego se acomodo perfectamente a sus labios, realmente le encantaban esos labios esos besos, su ritmo perfecto, no se parecía en nada a los besos de Darien. Seiya a pesar de su ego, esta vez sentía hasta miedo de que la chica sintiera la fuerza con la que latía su corazón, lo sentía es sus oídos y en su garganta a punto de escapar.

Serena se alejo lentamente de él, rompiendo el efecto mágico que provocaba en ella, aun le asustaba esas sensaciones que le provocaba Seiya, como su estomago parecía darse vueltas, como su cabeza no pensaba con claridad, sin duda él era esa mezcla perfecta entre el chico malo y rudo y la ternura hecha persona.

- Olvídate de esto Seiya Kou, debemos concentrarnos, no queda nada para el gran día y no vamos a dejar que esto lo arruine – dijo Serena completamente seria, aun sonrojada y observando los brillantes ojos azules de Seiya

- Lo sé, hagamos otra tregua, hasta el viernes, luego nos seguimos matando – bromeo Seiya.

- Rubia – Seiya la tomo del brazo nuevamente antes que saliera de la sala - ¿tú y Darien, los dos...? – titubeo al preguntar

- Si quieres saber si estamos saliendo y dándonos otra oportunidad, no Seiya, solo hemos salido, me ha invitado, no significa que vaya a volver con él, pero te lo dije, no te esperare eternamente y si esto sale bien, bien, tratare de ser feliz

Dicho esto, Serena salió de la habitación, Seiya se quedo sentado, con la guitarra en su manos, tocando algunos acordes, tratando que sonaran lo mejor posible, en un breve momento de inspiración comenzó a componer una canción, una que sabía perfectamente a quien iba dirigida.

Cuando llego a la sala de estar, Yaten hablaba muy serio por teléfono, mientras todos lo escuchaban con mucha atención, en voz baja Serena le pregunto a Michiru que era lo que pasaba, si recibir respuesta.

Amigos, engaño, amor y musicaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora