3:15 a.m.
Sigo en el ordenador, con la mente en blanco y sin ninguna idea de qué poder escribir.
Divago por mis pensamientos tratando de tener alguna idea o un recuerdo que plasmar, últimamente (desde hace 3 meses) he tratado de conciliar el sueño, me he puesto a ver las absurdas novelas de televisión sobre chicos que tienen ese amor prohibido que los lleva a la locura o a romper alguna regla de casa, desobedecen a sus padres o terminan en algún enredo con alguien de la familia, mafia, la muchacha o con el tipo que le gusta; hasta eh tratado de ver CD's de mi infancia en la vieja disquera de mi padre, en la mayoría de ellos mis padres decían lo lindo que me veía haciendo tal cosa o la otra, ya sea una tontería o no.Mi madre decía que de grande sería un apuesto chico, muy inteligente y encantador, mientras que mi padre se echaba a reír y decía que sería un arrasador con las mujeres y un gran ejecutivo, mi madre lo miraba crédula y le daba ligeros besos en la comisura de los labios y él se sonrojaba, me levantaba y me ponía en su hombro mientras ellos se besaban y yo solo los miraba todo inocente; quién diría que con el pasar del tiempo se separarían porque mi padre se había enamorado de otra mujer en un viaje a New York, mi madre no se había enterado de eso hasta que el hermano de él se lo dijo en una reunión, ella entró en un cuadro de depresión terrible, dejó el trabajo por un tiempo, salía con sus amigas y no volvía hasta la noche o hasta el día siguiente si es que se acordaba de que tenía un hijo en casa esperándola con el beso de las buenas noches o con la cena fría en el comedor; cuando ella no llegaba le dejaba una pequeña nota: "Tu cena está en la refri, yo la hice esta vez Ma!. Te quiero.", luego me dirigía a su cuarto y me cubría con sus sábanas, pensando en que ella llegaría y me daría ese beso, no importa si olía a licor, solo quería sentir sus cálidos labios en mi frente para poder sentirme seguro y dormir en paz.
Con el pasar de los años -5 años para ser exactos- y una que otra relación fallida, mi madre decidió empezar de cero, yo para ese entonces ya contaba con 15 años y me llevaba muy bien con los chicos de la escuela, no quería perder a mis amigos que me tardé años en conseguir; después de las noches y cenas fallidas decidí dejar de intentar y de pensar en el simple echo de que mi madre volvería, ya no iba a su cuarto ahora dormía en el mío, tal vez lloraba y me lamentaba diciendo que era un mal hijo y que por mi culpa ella no volvía, hasta que una noche me recosté en el sillón, miré al techo y me dejé llevar por mis pensamientos, al rato llegué a la conclusión de que ya todo estaba perdido y de que yo no era un fracasado como pensaba, dejé de abrazarla y de decirle los buenos días todas las mañanas cuando me dirigía a tomar el desayuno, la trataría frío y así transcurrió un año. Hasta que una madrugada como todas las otras me levantaba por un vaso de agua, me dirigí a la cocina y al momento de abrir la refrigeradora escuché un estruendo terrible, me dirigí a la sala y vi dos botellas de whisky, una estaba a medio tomar y la otra rota, la silueta de una mujer se divisaba en el montículo de sabanas, era ella, mi madre al parecer no se quedaba en paz con salir una noche, quería continuar la fiesta en casa; la levanté y apoyé uno de sus brazos en mi hombro para poder llevarla a su cuarto.- Eh!- Apenas y abría la boca olía terriblemente a licor- déjame, quiero que me sueltes.
- Mamá ya basta - la acomodé bien-¿qué demonios te pasa por la cabeza?!
- A mí no me hablas así! déjate de estupideces me oíste?!
- Qué?! Mamá mírate estas echa un asco, hueles a alcohol, traes todo el escote casi sin botones y me gritas a mí?! Quién sabe qué porquerías hayas estado haciendo afuera!.
- Joder, son mis cosas, ya déjame, si a él no le importé, por qué debería de importarte a ti? eres igual a él -empieza a derramar lágrimas.
- quería llorar al verla así, me contuve- Pero yo soy tu hijo,que te quede eso en claro, podré ser igual que él, porque es mi padre, tal vez no el mejor pero yo no tengo la culpa de lo que él hizo, yo solo era un niño, pero ya, vamos a tu cuarto.
La cargué igual que a una niña de 6 años, le saqué los zapatos, la recosté en su cama y la arropé, tenía ganas de llorar al verla así toda destruida y acabada, es una mujer muy fuerte, lo sé aunque ella no lo demuestre; le di ese beso que esperé por largos años todas las noches en su cama. Salí de su habitación y vi como una ligera sonrisa se dibuja en su rostro, fue la mejor imagen que pude en ver en toda mi corta vida.
Es el mejor recuerdo que tengo de ella, tal vez doloroso, pero ninguno se compara a ese; ahora ya sé que puedo escribir esta madrugada.
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Whatever 🐝
De TodoTodo lo escrito fue basado en experiencias (mías y de amigos). 🐝 Fue escrito cuando tuve 15 y creo que lo continuaré jaja 🤓 ©️2016