Ya son las 2:30 a.m. y sigo estudiando este libro que me tiene algo matada la vista y aunque pocos lo saben uso lentes, en la escuela me decian rata. Me gustaba pasar mucho tiempo detras de los libros, la biblioteca era mi lugar favorito.
Pero conforme fui creciendo mi mentalidad cambio, empece a ver el arte con otros ojos y ame sin duda ese lugar. De pequeña queria ser escritora pero luego tube ese cambio radical que pasamos los jovenes en la adolecencia.
Salgo a comprar algo. A esta hora en Londres todavia hay restaurantes y lugares de comida rapida abiertos.
Me pongo una chaqueta negra y salgo lista para caminar y asi pensar un poco mientras tanto.
Sin querer la puerta de al lado de mi apartamento se encontraba abierta y algunas cajas afuera.
Alguien se muda -dije
Y segui caminando.
Pero una voz sale por todo el corredor.
Eres tu pelo colocho. -dijo
Esa voz -pense
La conozco.
Es el carayyyyy. -sollosé girandome de mala gana.
Hey hola vecino -dije entre dientes como evadiendo ver su cuerpo sexy super bien formado un torax muy marcado por el ejercicio y su pelo que me daban ganas de cojerlo fuerte y pegarlo contra la pared besandolo por cada una de sus partes descubiertas.
Quieres pasar? Tengo algo de comida y cafe caliente. - dijo formando una sonrisa perfecta que cualquier mujer caeria a sus pies.
Ummmmm ok. -dije algo asustada por su atrevimiento como que sabia que tenia hambre. O será que me observa.
Al entrar observe un total desorden cajas por todos lados y ropa.
Disculpa el desorden pero estoy mudandome y no he tenido tiempo de poder colocar mis cosas. La universidad y otros asuntos me ponen loco. -me dijo algo apenado.
No te preocupes deverias ver el mio -dije. Parece algo asi como una batalla campal.
Nos reimos juntos con pena.
Quieres cafe negro, con leche o jugo. -me dijo muy atento.
Cafe negro porfavor -le conteste observando por una ventana hacia los pisos de abajo del rascacielo donde estabamos.
Sentí su mano caliente que estremecio cada parte de mi cuerpo cuando tocó mi cintura. Por debajo de la caqueta.
Puedo? -dijo muy cerca de mi.
Y se la dí- con ganas de deborar sus labios al verlos tan cerca.
Me paso el cafe y un rico pastel de chocolate que tenia en su pequeña refigeradora. No dude en hacer una burla.
Esa refrigeradora si es enorme -dije comiendo un pedazo de pastel.
Deberias ver mas al dueño es mas grande.
Escupí practicamenté el pedazo de pastel llena de pena pero wl rapidamente me paso sus dedos por mi barbilla limpiando las migajas.
Rayos -pense. El si sabe como seducir a una mujer.
Cambie la cara y me limpie como pude.
Y ¿que vez por esta ventana? -le dije como extrañada.
A ti. - contestó sin bajarme la mirada.
¿ a mi ? ¿y a mi porque? - dije habriendo mis ojos muy grande.
Porque eres hermosa.y me gusta verte salir corriendo hacia la universidad. Cuando vas de compra a la esquina del otro lado por un refresco y unas galletas que me imagino que son tus favoritas. Pero mas me encanta verte salir con tu pelo suelto y que el aire juegue con el. Me imagino que son mis manos tomandolo y me gusta pensar que te acompaño a todo lugar desde esta ventana.
Quede atonicá. Tenia un nuevo vecino que practicamente me acosaba desde una ventana y para colmos tiene fantasias raras conmigo si ni siquiera se quien es.
Eres hermosa -me dijo.
Desde el primer dia que llegue a este lugar pense en hablarte pero eres muy seria y tenia miedo de ganarme una bofetada de tus bellas manos.
Pero ahora estas aqui frente a mi y mis unicas ganas son de comerte a besos, romperte la ropa de golpe y hacerte el amor sobre el suelo de madera.
Abrí mis ojos asombrada. No pude decir nada.
Luego de unos segundos conteste:
Tengo que irme gracias por el cafe y el pastel. -pense que deberia salir pronto de ahi. Antes de quedar envuelta en sus brazos fornidos.
Gracias por entrar y no te preocupes no muerdo. Bueno si tu no quieres -me dijo con una sonrisa picara.
Buenas noches, y descansa -conteste.
Igualmente -me respondió
Y salí como siempre corriendo.
