Un Apetito Adolescente

Una entrega especial (pagina 7 y 8)

Hoy me levante de madrugada para asegurarme de que el cuerpo de Victoria estaba en donde lo dejé, como era de esperarse estaba nervioso...ya era la segunda chica a la que le hacia esto, pero realmente me gusta..no me puedo detener, es una fuerza que me toma y me obliga a hacerlo... no lo logro comprender aún,¿será que alguien intenta mostrarme algo? No lo creo...no existen ese tipo de cosas; después de razonar un momento sobre mi problema, escondí los restos de la chica en una bolsa oscura y nuevamente la introduje en la nevera, sonó el timbre y dí un pequeño salto, ¡demonios! ¿y si eran agentes? Mi puerta no tenía ningún tipo de espejo unilateral ni.. el famoso "ojo mágico"; yo no queria que me atraparan, asi que solo guarde silencio, escuché que cada vez golpeaban con mas fuerza hasta que de pronto se detuvo...en ese momento sentí calma, pero.. no por mucho, la puerta se abrió por la fuerza que había puesto aquella persona, desde mi recámara pude ver que era mi padre.. ¡vaya! Enserio estaba asustado, pero ya no más...me dijo -hola hijo, cuanto tiempo sin verte, ¿acaso no me querías abrir? Jajaja- después de saludarlo el me invitó a comer a un restaurante cercano, no era bueno el lugar pero llevaba un largo tiempo sin mi padre asi que no dije nada;hablamos sobre muchas tonterías hasta que el sacó un tema que la verdad me llamó la atención cual bola de estambre a un gato, me dijo que el salia a cazar animales con unas armas que había conseguido, velozmente le pedí que me las mostrara, a lo que el con mucho cuidado abrío su bolsa...era genial, enserio me gustaron; cuando terminamos con la comida el me llevó a probar las armas a el bosque.. eran muy potentes,ruidosas y no controlaba su retroceso, todo iba de mal en peor hasta que sacó lo mejor de todo...una navaja arrojadiza que el mismo creó, era rapida,silenciosa, mortal, y sobre todo podía usarse de cerca, él me dijo que era algo importante porque le llevó mucho tiempo perfeccionarla, pero aún asi la colocó en mi mano y dijo que ya era mía, solamente le sonreí a la cara y nos devolvimos a nuestros hogares; fue bueno verlo, cambió desde que me fui de la casa, al menos ya no tomaba alcohol...

Con esta navaja puedo hacer muchas cosas interesantes, muero de ganas por poder probarla, aunque...no necesariamente en un animal :) la probaré pronto...ya tengo en mente quién podrá comprobar su buen filo.