Se sintio un poco perdida al momento de tener bajo su cuidado al pequeño niño que ahora posaba su cabeza en su regazo conciliando el sueño luego de un largo día de mucho caminar.
Recordaba que la madre del pequeño le había dado una ultima sonrisa rogándole que le protegiera para luego ser atravesada por las garras de ese monstruo y como el padre yacía inerte en el suelo después de proteger con su vida a su familia para que al fin el único sobreviviente fuera su pequeño retoño.
Inuyasha tampoco había sido de gran ayuda a pesar de que ya tenía una leve idea y excasa experiencia.
Suzume ahora no sabia como actuar nunca había tenido a ningún niño bajo su cuidado, había jugado con los niños de su aldea y les había cantado pero hasta ahí llegaba su experiencia.
Extrañamente dentro de ella sentía que parecia una madre primeriza.
Al ver llegar a Inuyasha por la puerta sonrió y con un dedo le pidió silencio para no despertar al niño. En la manos del hanyo traía un poco de madera y pescados los cuales cocinarian y seria la cena de ese día. Vio como Inuyasha encendió la fogota y comenzó a cocinar los pescados con bastante soltura.
Suzume solo se había quedado viendo como Inuyasha terminaba de asar el último pescado para luego dárselo, ella sonrió y con la mano libre movió al niño hasta lograrlo despertarlo y que comiera un poco para que luego durmiera con el estómago lleno.
—¿Tu nombre es Ren, verdad?
—Si.
—¿Tu edad es?—a Suzume le pareció raro para ser un niño parecia muy reservado aunque había la posibilidad de que aun estuviera abrumado por los acontecimientos de la mañana.
—Nueve años—respondio terminando su ultimo pez y volviendo a reposar su cabeza sobre el regazo de ella—¿ahora se podria decir que eres mi mamá?
Ella asintió lentamente.
Después de todo su madre biológica la había dejado a cargo de ella y ya que no tenia mas parientes no le quedaba de otra que quedarse con el niño.
El pequeño paso sus brazos por la cintura de Suzume y pronto su traje comenzo a mojarse por las lágrimas que salían de los ojos del niño y los sollozos se hicieron presentes.
Suzume dio unas cuantas palmaditas en la espalda para calmarlo. Y sin que se dieran cuenta el pequeño ya estaba durmiendo.
¿En que estaría pensando ella al albergar aun pequeño niño?
Nunca había cuidado de uno y ahora debía pretender ser una madre para Ren. Solto un suspiro mirando hacia Inuyasha, él estaba tranquilo y solo miraba por la puerta las gotas de lluvia que caían. Sentia como si el clima se compadeciera de Ren y lo acompañara en su tristeza haciendo caer aquellas gotas de agua.
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Después de la tormenta
FanficEl demonio cayó aún costado de ella, y el cuerpo inerte de otro cayó pero este había muerto no por una flecha había muerto por la espada de su compañero. Otros dos demonios cayeron y fueron por una espada y el ataque de un pequeño zorro. Su viaje...