La Vida De Un Zorn

Ataque Especial

Comenzando la siguiente ronda, Dooma tomo control sobre el dö, corriendo hacia el frente con tres de sus compañeros tras él buscando defenderlo de cualquier ataque de parte del equipo contrario hasta que el líder grito el nombre de Ness llamando su atención y este se encontró con la mirada fija del mayor antes de que patear a él balón a su dirección.
Muy apenas se dio unos segundos para reaccionar y tener el dö a sus pies, no espero explicaciones ni un porque, solo supo que no debería quedarse quieto, y más que el equipo contrario iba ahora a su dirección, una de sus mejores habilidades era su agilidad, aunque no es lo mismo escapar de sus hermanos con intensiones de asearlo a que cinco aspirantes a soldados vengan en su dirección con el único propósito de arrebatarle el balón y su oportunidad de vencer.

No sabe si fueron sus nervios o la presión de ver a los equipos anteriores, pero algo en su interior le dio la fuerza y velocidad de poder esquivar al menos tres cadetes, al ver a la chica que anteriormente le había derribado, alcanzó a localizar al líder quien mantenía a la raya al jugador restante del otro equipo, cuando ambas miradas chocaron entre sí, el de anteojos le hizo un movimiento con la cabeza, en dirección a uno de los gemelos, Ness asintió y en una finta logró desubicar a la chica logrando pasar el balón a Ben.

El plan era cansar y burlar a los del otro equipo para tirar el último kai, para eso los demás debían proteger a quien tuviera el dö deteniendo a los demás.

Un plan seguramente sencillo, sin contar que uno debía encargarse de al menos dos jugadores, y que de parte de su equipo, Nero, seguía sin moverse de su lugar
¿Pero que demonios le pasa?

Un grito proveniente de Dooma le despertó de sus pensamientos, al parecer a causa de el egocentrismo de Ben terminaron por quitarle la pelota justo cuando se preparaba para anotar. Ahora dejan recuperar el dö y anotar ese último Kai antes de que el tiempo se acabase o si no... Quien sabe, tratándose de Gober cualquier castigo era posible.

Debía admitir que su plan tenía fallas, y graves, sabiendo como eran los gemelos, tanto juntos como separados, no previnieron que la vanidad de los mencionados fuera un gran obstáculo para poder realizar alguna estrategia. Tampoco contaron con la agresividad que eran los miembros del equipo J, sin duda eran salvajes, y no lo decía porque algunos tenían rasgos de animales, sino que eran impredecibles, no median su fuerza, y respondían a base de gruñidos, y para peor de todo, ahora mismo estaban acabando con todos uno por uno.

No parecía que estuviesen realmente interesados en pasar la ronda, esos chicos tienen sed de sangre, lo ha visto en sus miradas y vaya sorpresa, es la misma mirada que tiene el comandante Gober.

El primero en caer fue Ben, que si bien podía ir a la misma velocidad que la de los miembros del equipo contrario, no tenía muy buenos reflejos, puesto que una vez que lo rodearon los golpes no se hicieron esperar, y no conforme de ser cinco contra uno, cada miembro concentró cierta cantidad de Sen sobre sus extremidades para que sus golpes realmente hicieran suficiente daño.

Jack, que por querer ayudar a su hermano, fue la segunda víctima de aquella lluvia de puños, le hicieron exactamente lo mismo que a su hermano, aún cuando Dooma intento ir con él para sacarlo del embrollo aquello solo hizo empeorar las cosas, tomaron al chico veloz de una de sus piernas y lo arrojaron contra el cuerpo del de piel grisácea causando que el choque los dejara aturdidos e incapaces de seguir con el partido.

Eso ya no era un juego, era una lucha donde es vencer o morir, lo último casi literalmente y sabía que nadie de los presentes iba a ayudarlo, ni siquiera el comandante que encantado de la vida, se deleitaba con el sufrimiento de los cadetes, y más ahora que el siguiente en sufrir severos daños era Ness.