Diary.

#3

Acabo de descubrir una cosa IMPRESIONANTE.

Me están tratando de tonto, si ya estaba indignado mejor ni te digo como me siento ahora.

SE ESTÁN PUTO TURNANDO PARA ASEGURARSE DE QUE ESCRIBO AQUÍ Y SÉ QUE NAGI LEE LAS PRIMERAS LÍNEAS PARA ASEGURARSE DE QUE NO HAGO GARABATOS.

No sé cómo sentirme, por Dios.

A Tsunayoshi no le tratan así y el chico es un desastre, ¿por qué a mí sí?

Bah, me duele la cabeza y Fran me está dando esa mirada sin expresión tan suya que es... Jesús, ¿es que ese niño no tiene sentimientos? ¡Su indiferencia es peor que la de Chikusa!

A todo esto, ¿cuándo será su cumpleaños? Tengo que ver qué hacer por él.

Quizá lo mande con Varia ese día... Aunque Bel... Ya veré qué hacer con mi estúpido aprendiz.

Como sea.

Nagi ha exigido que, como una manera de iniciar la terapia, escriba un poco sobre cómo me siento antes de entrar en detalles con mi infancia, mis sentimientos de antes y ahora y no sé qué otras tonterías.

Dios, a veces olvido que es una chica y que sus influencias son la eterna enamorada de Tsunayoshi y el eterno amor del mismo.

Debería prohibirle el salir con esas dos, si va a ser una mafiosa no necesita lazos tan tontos.

Aunque en lo personal me encantaría que siguiera siendo una chica "normal", cuando la salvé tenía claro que la usaría.

Pero ahora estoy libre y quiero que sea feliz, sé que quiere entrar al mundo en que vivo y en el que vivirá Tsunayoshi, para eso tiene que ser fuerte...

Sé que ella es capaz de muchas cosas, pero también es frágil...

Me duele la cabeza, pensar en mi Nagi en la mafia es como pensar en Nana consiguiendo otro marido o M.M dejando en paz el tema de si estaré o no en una relación con ella.

Honestamente, que molestia.

Volviendo a lo de esta ridícula terapida escrita, supongo que...

Me duele la cabeza, así me siento.

Me han contagiado alguna clase de resfriado raro que los simples mortales padecen... ME CAGO EN TI, SAWADA TSUNAYOSHI!

JODER y tan bien que se estaba comiendo helados.

Bah, eso me recuerda que debo escarmentar a ese niño, porque es que...

Pues no sé, me muero lentamente y es su estúpida culpa.

¡¿PERO QUIÉN ME MANDA A MÍ A AYUDARLE EN PLENA PELEA CON LA ALONDRA?! JESÚS BIEN DICE QUE LOS OJOS DONDE DEBEN ESTAR.

Y yo que pensaba que Ryohei no era tan estúpido como para vaciar una cubeta de agua desde la azotea sin mirar hacia abajo, donde la suerte llevó al niño este.

Me duele la cabeza y ahora estoy molesto.

Prepárate Sawada Tsunayoshi, que ni satanás te salvará de mí.