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Hace poco que Hopper me dio la gran noticia de que ya podría hacer vida normal; de que iba a ir al instituto con los chicos. Ahora me llamo Jane Hopper, Jim ha decidido adoptarme y, ocupa muy bien su puesto como padre.

El problema es que, ahora que Mike y yo podemos ser vistos juntos (desde el mismo día en el que nos dieron la noticia, ya íbamos los dos montados en su bici por el pueblo), quiere que hoy cene en su casa. Con su familia.

-Le he contado a mi madre todo lo que pasó, está encantada contigo; no te preocupes. Pero a mi padre... No le he dicho que eres la misma chica que tuve escondida en el sótano. Se cabrearía bastante. Podríamos fingir que llegaste hace poco al pueblo.-Me ha dicho Mike esta mañana para intentar acabar de convencerme.

Y aquí estoy. En la puerta de los Wheeler, esperando a que abran y de los nervios.

Mike es quien abre la puerta.

-El -Me sonríe y se acerca para darme un beso en la mejilla.-Estás preciosa. -Me mira a los ojos y yo solo puedo morderme el labio.-Pasa, te estábamos esperando.

Le sonrío nerviosa y, cuando no mira, inspiró profundamente.

Es la primera vez que estoy en su casa desde hace un año y medio. No hay mucha diferencia, solo un par de fotos más. 

Cuando llegamos al comedor tengo a toda su familia mirándome. Nancy, Holly y sus padres.

-¡Jane! -Dice la señora Wheeler. -Que alegría que hayas podido venir. -No me espero que venga hacia mi y me abrace.

-Gracias por invitarme... -Digo yo intentando ocultar mi agobio con tantas miradas.  Creo que Nancy lo nota, porque me giña un ojo disimuladamente.

-Por fin te conocemos. -Dice su padre. -Mike lleva toda la semana revolucionado. Diciéndonos que nos comportemos y no le dejemos en ridículo. 

Lo miro, y él se humedece los labios mientras su cara se vuelve de tono rosa claro y abre mucho los ojos.

-¡Papa! -Le grita Mike. Sus padres y yo solo podemos echarnos a reír.

Díez minutos después estamos todos cenando.

Me siento al lado de Mike, aunque ha sido mala idea: así tengo que encarar a los otros miembros de la família. Nancy habla de como le ha ido el día, pero se que lo hace para que no nos centremos en mí, ayudándome.

Y como ya me había dicho Mike, Karen es una excelente cocinera.

-Está todo riquísimo,  señora Wheeler.

Ella me sonríe con aprobación. Por lo que parece le estoy gustando. Nancy y Mike cruzan una mirada cómplice.

Se forma en silencio que me hace sentir incómoda. Ted es quien lo rompe, pero habría preferido que no lo hiciera.

-Bueno. Cuando nuestro hijo nos dijo que traería a una chica; me imaginaba a alguien muy distinto. -Dice calmado. -No me esperaba que llegara con alguien tan guapa. Me alegro de que se la haya buscado bien.

Todos nos quedamos con los ojos muy abiertos, pero Mike es quien reacciona peor.

-Papá, eres un superficial. -Su noto denota un gran enfado. -No estoy con ella por su aspecto.

-Hijo, solo estoy diciendo que no pensaba que llegarías a alguien como ella. -Intanta arreglarlo, pero lo empeora.

-Ted. -Advierte la señora Wheeler.

-Ya veo lo que confías en mi. -Mike se levanta haciendo ruido con la silla y se va con prisa hacía abajo.

Tanto yo como Nancy estamos tensas y alucinadas, su madre mira a su padre con odio y él hace como si nada. Me entra la duda de si debería quedarme, pero yo sé que no voy a poder.

-Si me disculpais, voy con él. -Intento decirlo de forma educada. Y me levanto. Veo a Karen asentir antes de que yo empiece a correr hacia las escaleras del sótano. 

Vacilo un momento mientras bajo las escalera hacia su habitación/sótano, hasta que lo veo sentado en el sofá toqueteando unas figuras de D&D.

-Mike. -Digo simplemente, sentándome a su lado. Él suspira dejando las figuras de lado y encarándome. Parece devastado.

-Lo siento. -Mira hacia sus manos, que mueve nerviosamente.

-No pasa nad... -Me interrumpe.

-Si que pasa... -Habla sin ganas. -Has venido a escuchar a mi padre hablar de forma superficial de lo poco que valgo y de que te he elegido bien por el simple hecho de que eres guapa.
-Lo suelta todo de golpe. -Te he hecho perder el tiempo.

-No es verdad, enserio. -Le sonrío. Odio ver a Mike de esta manera, y quiero hacerle sentir mejor. Siempre que estoy mal consigue hacerme sentir mejor. -Me da igual si tu padre dice que no vales. Yo sé que si. -Mike deja de mirarse las manos para mirarme a los ojos. -Y encima tu madre es genial.

-Le caes bien. Lo he notado. -Sonríe un poco y le devuelvo la sonrisa. Hay un silencio-No quería que vieras que mi casa no es un hogar. Que es solo eso: Una casa.

-Yo he tenido muchas "casas", pero yo solo siento que estoy en mi hogar en un sitio.

Él levanta una ceja y sonríe de lado.

-¿Con Hopper? -Pero ha entendido por donde voy, porque se acerca a mi.

-Contigo. -Y me abrazo a él.

Mike me apreta contra él y siento como descansa su barbilla en mi cabeza. Nos quedamos así, quietos y en perfecta armonía.

Mileven Oneshots Donde viven las historias. Descúbrelo ahora