Son muchos años que pasaron sin robarte un beso ,solo quiero un beso,
y por esa boca no me importa ser ladrón...7:40 A.M.
Era el cuarto día sin mi celular y no sabía qué hacer con mi vida, en los primeros dos días sin él, el sábado y domingo habían encargado dos tareas y yo ni enterada, porque los encargados del grupo lo habían difundido vía whats app. También es el segundo día que me levanto tarde, no tan tarde como la vez pasada, pero tarde al fin, desperté a las 7:20, solo tenía tiempo para bañarme o desayunar, obviamente prefería bañarme, no podía dar una sucia imágen frente a los profesores y doctores que me dan clase, y mucho menos frente a las personas de mi trabajo, si, hoy me tocaba trabajar.
Añadiendo que estaba muy estresada de que no me había podido comunicar ni con mi familia, ni con mis amigos.
− ¿Por qué rayos no pasa un maldito taxi? –me quejaba, mientras trataba de buscar algún taxi cerca, ya que no podía pedir uber ... porque no tenía un celular para poder hacerlo.
En lo que esperaba a fuera de mi casa esperando que pasara un taxi, llegó un auto de lujo color blanco y aparcó justo fuera de mi casa, a unos metros de donde estaba parada yo.
No pude ver quién era, los vidrios estaban tintados de una manera oscurísima.
− Dale amor, que bonito que me esperes a fuera de casa –me dijo burlón el que se iba bajando del coche, Marquito , aka mi futuro esposo (según el).
− Ja−Ja, ya quisieras que eso estuviera pasando querido.
− No, fuera de juego , ¿Por qué no me contestas las malditas llamadas, mensajes, dm's, señales de humo? , ¿quién te crees María Fernanda Solares Castillo , para asustarme de esa manera? –me abrazó como saludo, para después mirarme serio.
− Una persona que se ha quedado sin un maldito teléfono celular o movi , como quieras llamarle para poder contestar tus malditas llamadas, mensajes y dm's –fruncí el ceño.
− ¿Por qué? .
− Porque choqué con el hermano de Theo y mi celular salió volando, muriendo en el proceso –le expliqué.
− ¿y por qué no me avisaste desde ese día para saberlo?, te hubiera podido no sé, dar uno de los móviles que me regalan todo el tiempo, o pude haberte comprado uno en ese momento.
− Para empezar no me vas a regalar nada, ni comprar mucho menos, yo sola me lo voy a comprar –le dije.
− ¿Ahh , si? , ¿cuándo? –me cuestionó.
− Ehh, pues en unas semanas cuando reciba mi pago.
− ¿ Y mientras tanto vas a estar así incomunicada de la vida? –me vio feo.
− Pues si –levanté la barbilla en muestra de dignidad –Bueno , mucha charla y ya se me hizo tarde, chao ...
− ¿A dónde vas señorita? ─ me pregunta.
− Mmm a la universidad, duh ─lo mire como si fuera demasiado obvio, y pues lo era.
− ¿En qué te vas a ir?
− En autobús, taxi , lo que sea ─ me encogí de hombros.
− Te llevo ─me sonrió.
− Pero tienes entrenamiento ─lo vi dudosa.
− Estoy resentido de unos ligamentos, no voy a poder entrenar con los demás , voy a tener unas sesiones especiales por las tardes ─me explicó.
− Oh, ¿estás bien? ─ lo miré.
− Sip, así que súbete al coche que ya vas tarde ─me ordenó.
− Como diga capitán ─hice una seña rara, como si el fuera de verdad mi capitán.
− Prefiero que me llames amor ─hizo una mueca con la boca, como si estuviera pensando.
− ¡Ja!, en tus sueños ─me burlé.
− Pues en mis sueños me llamas de esa y mil maneras más ─levanto ambas cejas en un juego extraño.
− Eres un enfermo ─le di un golpe en el brazo mientras se lo decía.
− Auch, me dices amor, cariño , bebé. Eres una mal pensada ─se quejaba.
− Bueno, dale que no llego a clase "cariño".
− Con esos incentivos hasta vuelo para llegar rápido ─se ríe.
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Mientras conducía hacía la dirección que me había dado mi hermano, repasaba lo que le iba a decir a la chica para que aceptara el móvil que le había comprado y de paso aceptara que la acercara a la universidad.
Pero al parecer hoy no podría llevar mi plan a cabo, alguien había llegado antes que yo, Marco.
Solo podía ver que estaban hablando, más no escucharlos pues yo estaba un par de manzanas/cuadras atrás del que parecía ser el coche del tipo ese, solo se veía que él le decía algo y ella se reía, lo que me había dicho mi hermano era cierto, el tipo ese estaba tras de la mexicana.
Planeaba esperar a que se fuera , porque según lo que sabía de los entrenamientos del Real Madrid eran a la misma hora que ella entraba a clases, pero mis planes cambiaron al ver que ella se subía al coche de el, probablemente para dirigirse a clases.
─ Paciencia ─murmuré, mañana sería otro día y tendría mejor suerte.
HOLAAAA , SI PUDE TERMINAR UN CAPÍTULO ANTES DE EL LUNES , ESPERO LES GUSTE MUCHOOOO, PACIENCIA , LUCAS Y MAIRE ESTÁN A PUNTO DE ENTRAR EN ACCIÓN JUNTITOS, VOTEN Y COMENTEN POR FAVOOOOOOR <3
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Mi mala || Lucas Hernández
FanfictionEl Atlético de Madrid y el Real Madrid nunca han sido una buena combinación.