—Es increíble que hayan asesinado a ese hombre...—¿No te parece más increíble que hayan asesinado a alguien? Hacía casi un siglo que no ocurría algo así. —Interrumpió.
—Verás, Dominique, si hubiera sido una persona común y corriente, no le estarían tomando tanta importancia como lo está siendo ahora.
—Hablamos de un hito negativo para la faz de la tierra, el mundo entero pensará que Ostema es un país violento.
—¿Y a tí que te importa? Ni siquiera eres de este país originalmente.
Dominique se levantó del sofá dirigiéndose a las escaleras.
—Eres grosero... Wess Deller.
—No es necesario que digas mi nombre por completo, querida.
—¡Dejame en paz! —Dijo enfadada.
—No sabía que podías sentirte así. —Contesté sarcástico.
Entonces subió a la habitación, pude escuchar el portazo que dió y como se tumbó en la cama.
Una patrulla policial pasa frente a la casa, detrás de ella hay decenas de esferas de vigilancia siguiéndola con una luz roja, luz que significa que algo anda mal.
Mi celular se enciende debido a una notificación, al parecer van a tomar medidas de vigilancia extrema en todos los vecindarios y barrios de toda la nación Ostema.
Al carajo, puede que envíen Sensores a las calles por primera vez.
Los Sensores, son robots personalizados por la policía para hacerlos parecer personas normales y así adentrarse en la vida de los Ostemos sin sospecharlo. Leí de ello en El Vidente; una página en la Internet que expresa conspiraciones y demás dentro del país.
Quien sabe si su Robot no está siendo utilizado por la policía para espiarlo sin darse cuenta.
Mirando la tele por varios minutos, aburrido de escuchar la noticia de el asesinato de Ross decido encender mi estereo del siglo XX. Es mi verdadero tesoro en este mundo, una adquisición que mi familia ha tenido por generaciones y generaciones.
A pesar de no contar con las conexiones eléctricas necesarias, pude hacerla funcionar cambiando y moviendo ciertos cables para poder adaptarlo a las conexiones de electricidad modernas.
Soy un genio en la tecnología.
Poniendo un cassette antiguo, de hecho el único que tengo, de la década de 1980 de un tipo llamado Michael Jackson, recuerdo que no me gusta escuchar música sin la compañía de Dominique.
La pobre debe estar sentada en la cama sin nada más que hacer.
Dejo mi cerveza sobre la mesita a un lado del sofá y me dirijo a la habitación. Dentro, ella está tumbada en la cama, cubre su rostro con ambas manos impidiendo verla por completo.
—Domi...
Ella descubre su rostro, sus ojos se posan en mi mientras acomoda la almohada bajo su cabeza.
—Lamento si lo que te dije hace un momento te lastimó... Sabes que no estoy acostumbrado aún a la compañía de otro ser vivo.
Ella me da una pequeña sonrisa.
—Jamás lo estarás conmigo a tu lado.
—Ese es tu propósito aquí, Dominique, —Acaricio su mejilla. —hacer de mi un hombre felíz...
Rápidamente deja ver por completo esos dientes perfectos en ese rostro moreno, uno de sus rulos cae por su mejilla haciéndola ver lo más tierna posible.
—¿Te había dicho que eres hermosa?
—Si... Son 37 veces desde el día que estoy aquí.
Río recordando que ella toma la cuenta de todo.
—Ya lo sabía.
Entonces me tumbo en la cama a su lado, había pasado tiempo que no compartíamos en la misma cama, y es ella la que usualmente me insiste en hacerlo. Un cálido abrazo sella el momento en algo perfecto, pero es interrumpido por una esfera de vigilancia fuera de nuestra ventana, su presencia magnética es perceptible tanto para mi como a la piel de Dominique.
—¿Qué rayos hace eso aquí? —Preguntó Domi.
—No lo sé, debió haber perdido el rumbo de las demás esferas. —Respondí.
Me dirijo a la ventana para bloquear la vista con las cortinas de plomo que instalé, es una medida útil para obtener privacidad con tantas esferas rondando por doquier. El plomo hace que se alejen, el problema es que si las quito en unos minutos las esferas volverán, es una pena ya que obstruyen la vista de un hermoso paisaje holográfico.
Dominique trata de recuperarse de la energía magnética de aquella esfera, así que se cubre con una sábana para aliviar ese efecto.
—Tienes problemas con el magnetismo.
—¿De veras? —Respondió sarcástica.
Ella alza su mano hacia mi bolsillo, mi teléfono celular vibra de una forma extraña y comienza a salirse lentamente. Al segundo después mi celular estaba en la mano derecha de Dominique.
—¡Eso fué fantástico!, No tenía idea que podías hacerlo...
—No te imaginas las cosas que puedo hacer.
Ella me observa de una forma coqueta.
—Prefiero que te recuperes por completo del magnetismo, ¿Sabes?... No quiero que haya un corto circuito o algo dentro de tí.
—Eres un encanto cuando te preocupas así.
—Ve abajo si llegas a sentirte bien.
—Allí estaré. —Dijo mientras intentaba quitar el celular de su mano.
Saliendo de la habitación y bajando por las escaleras veo que la televisión se enciende automáticamente. Eso sólo significa una cosa, hay un comunicado desde la casa de gobierno, y como han estado las cosas este día parece ser algo muy importante.
"Buenas noches, Ostema. Siendo ya las 21:26 del día martes 28 de noviembre vamos directamente a la casa de gobierno, en donde el actual presidente de la nación, Howard Salt, emitirá un comunicado de alta importancia".
Ciertamente tengo ganas de cambiar el canal mientras bebo una cerveza, pero los comunicados de la casa de gobierno suelen significar un cambio drástico en todo el sistema o una muy buena noticia, de cualquier manera, tendré que poner atención a lo que dicen estos tipejos trajeados.
El reporte cambia de escenario a la casa de gobierno, allí está el anciano de Howard Salt frente a un estrado con el símbolo de Ostema, a sus espaldas es notable la entrada a esta. Su voz es amplificada por un pequeño micrófono que es como un parche en su cuello, un Vociferador para ser exactos.
"Esta tarde nos vimos envueltos en una noticia a nivel global, y cierta noticia quedará marcada en la historia de Ostema como el primer caso de homicidio en más de un siglo... —Puedo notar que el Presidente está leyendo desde un celular oculto en la parte inferior del estrado. —También lamento informar, tanto a los votantes como a la familia de Amaro Ross... Que el nuevo dirigente de este país será el candidato del partido socialista; Terrance Renant...".
A pesar de que sus palabras fueron producidas con un notorio nerviosismo, el público y las calles irrumpen el silencio con ovaciones y gritos alegres por la decisión tomada.
Entonces, el nuevo presidente electo sube al estrado, haciendo que Howard Salt parezca un enano a su lado mientras saluda con seriedad al público y a la prensa.
En lo personal, la política nunca me ha interesado en absoluto, es solo que, El Vidente, ha predicho grandes cambios dentro de todo Ostema.
Y con todo lo que pude notar por parte del presidente, es cierto una de las predicciones de El Vidente:
"Los grandes rostros serán privados de su libertad, actuando como robots primitivos, aceptando órdenes de sus nuevos amos".
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Ostema
Ficção CientíficaEl caos y la fuerza policial actúa brutalmente contra los ciudadanos de Ostema, un país donde un dictador ha tomado poder en el gobierno. Darren y Wess, deciden tomar iniciativa y comenzar los primeros movimientos rebeldes en la historia de dicho pa...