10: Las Mejores Intenciones

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Dominique Deller:

Oficina presidencial.

Renant se la pasó día y noche hablando de mí y enfrente de mí como si fuera solo un montón de acero y cables. Soy mucho más que eso, y algún día lo demostraré.

La celda de titanio es impenetrable, lo único que tengo a mi disponibilidad es un gran platón de agua que el mismo Renant dejó a mis pies.

Supongo que él sabe perfectamente que las unidades robóticas no pueden ingerir líquidos, el agua dentro de mí sistema seria igual de letal para mí que cierto veneno en humanos.

Al cerrar mis ojos me concentro en los momentos que tuve con Wess. Fué al rededor de un año en donde él se concentró en entregar todo su amor hacia mí, lo cual siempre estaré eternamente agradecida, ya que a pesar de tener malos momentos entre ambos siempre lograba hacerme sonreír, y no creo que ninguna otra unidad robótica se sienta más humana que yo al estar a su lado tardes enteras observando películas y escuchando la música del siglo XX.

Entrando en uno de aquellos recuerdos el silencio de mi celda se ve interrumpido nuevamente durante la noche.

Mis sensores detectaron el sonido de acceso. La pared frente a mí comenzó a desplazarse.

Renant ha presionado el botón, lo que significa que volverá a tratarme como cualquier chatarra.

Mi sorpresa es grande al darme cuenta que Renant no está solo, Annaliese Bennet y Goddrick Paulson están junto a él.

El representante de la A.N.E.N. detiene sus ojos en los míos queriendo analizarme detalladamente, para mi suerte ellos no tienen la posibilidad de hacerlo tan fácil como mis procesadores son capaces.

—¿Dices que ella es la unidad robótica inmune al electromagnetismo?

—No veo ninguna abertura al rededor de su corteza craneal. -Señaló la jefa de policía.

—Esta unidad robot...

—Androide...

Renant detuvo su explicación ante mi interrupción, pudo haber provocado una descarga eléctrica con su paralizador táctico en su bolsillo al igual que ayer, pero no lo hizo.

—Esta unidad androide, posee una característica única en comparación con las demás. He contactado a los mejores investigadores en inteligencia artificial e incluso hemos utilizado los mejores sistemas de identificación de anomalías dentro de las unidades androide para lograr encontrar la falla, pero nadie ni nada  ha podido deducir qué es lo que la hace  ciertamente inmune al electromagnetismo.

Debido a que el plomo es indetectable en cierto tipo de aparatos es que logre safarme de la inspección a nivel craneal.

Si encontrara aquél casco de plomo me encontraría en serios problemas, perdería mis memorias y dejaría de ser quien en realidad soy.

No puedo permitir que me vuelvan parte de su ejército...

Paulson y Bennet no quitan sus ojos de mi presencia mientras Renant sigue detallando los datos y curiosidades de las investigaciones que me han hecho estas últimas horas. Parecen ser curiosos a lo que este les menciona, aunque dudo que sea verdadero interés por parte de Bennet, quien solamente parece estar escuchando la misma basura que yo oigo salir de la boca del presidente.

—Quisiera un momento a solas con esta unidad robótica. —Dijo Paulson enfatizando en la palabra: Robótica.

Sé lo que planeas Paulson, para tu desgracia yo si sé cómo controlar mis niveles de sobrecalentamiento. Soy mucho más inteligente que tú, lo sabes.

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