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- Vicchan está... Vicchan está... - balbuce sin poder creer lo que leía y releía una y otra vez en la pequeña carta que había recibido.

No podía ser cierto ¿No? Quiero decir, hace un año me despedí de Vicchan para siempre, las cartas que nos mandábamos día a día culminaron con esa pelea que tuvimos al decirle que aplicaría para una universidad en Tokio.

Y ahora, ahora llega esta carta que no tiene ni remitente ni estampilla justo como las que siempre me mandaba Vicchan.

- ¿Qué está pasando? - me senté al borde de la cama confundido, sosteniendo mi cabeza con sentimientos mezclados caóticamente en mi interior.

Estaba sorprendido, asustado pero al mismo tiempo ridículamente feliz por poder saber de nuevo de Vicchan, de mi preciado amigo quien desde pequeño me acompaño en los momentos más difíciles y felices de mi vida ¿Cómo supo en que universidad estaba?

Salte de mi asiento en el borde de la cama para salir de mi dormitorio a toda prisa, ignore el llamado de algunas personas en mi carrera hacia la recepción, estaba mucho más preocupado por responder las preguntas que se repetían una y otra vez en mi cabeza.

Trastabille un poco al llegar frente a la recepción donde el encargado, amigo de Phichit, me veía sorprendido, supongo que nunca se esperó que alguien tan taciturno como yo hiciera algo como llegar desesperantemente a la recepción del dormitorio, pero francamente no me importaba ahora.

- ¡Disculpe ¿Sabe quién dejo esto en el buzón de mi casillero?! - pregunte alzando la voz sin importarme mucho el asustar aún más a chico.

- N-No... Las cartas llegan juntas al buzón del dormitorio... y-yo solo las clasifico por destinatario - respondió encogido de hombros tartamudeando un poco, pero su sorpresa no aminoro la aflicción estoy seguro se reflejaba en mi cara en ese momento.

- Ya veo... - balbuce de nuevo en mi normal tono adormilado.

No negaría que era una decepción el no tener ni una sola pista del supuesto Vicchan que me había enviado esa nota.

- Lo siento - me disculpe, poco arrepentido de mis bruscas acciones, el chico negó sonriendo.

Volví a mi dormitorio notablemente deprimido, y de nuevo ignorando varios llamados a mí alrededor, no tenía ánimos para nada más que para sumirme en la incertidumbre de la vida bajo mis sabanas al menos por las 8 horas de sueño que necesitaba para poder concentrarme en las clases del día siguiente.

Al llegar reorganice todos los libros y hojas sueltas que había usado para los deberes, tome el sobre de la carta de Vicchan para guardarla de nuevo en el sobre, notando que había algo escrito dentro del sobre que no había visto antes.

" X-Choume-XXX-Bunkyo-XX

Banca 3-Sauce Hueco"

Era la dirección de un parque cercano a la universidad que ya había visitado antes con Phichit y un par de amigos suyos ¿Qué quería decir Vicchan con eso?

Me quede pensando un momento, pero como si mi cuerpo entendiera mejor de lo que mi mente lo hacía, volví a sentarme frente a mi escritorio, tome una hoja en blanco, mi bolígrafo favorito y empecé a escribir.

"Querido Vicchan.

Eres tú ¿Cierto?

¿Cómo es que me encontraste?

¿Cómo supiste en que universidad había entrado?

Hace más de un año que no hablamos, me sorprendió mucho tu carta.

Pero estoy feliz de volver a saber de ti.

Han sido muchas cosas las que han pasado desde que dejamos de hablar...

Te extrañe mucho todo este tiempo, sinceramente espero que estés bien.

No estoy del todo seguro de captar tu mensaje pero hare lo que dices.

Tengo que llevar la carta al sitio que me marcaste para que puedas encontrarla ¿No?

Siempre has sido así, Vicchan.

Tan misterioso.

Atte. Tú Yuuri"

Termine de escribir, sintiéndome algo avergonzado y rayando algunas palabras de la carta para que Vicchan o cualquiera que la encontrara no me hiciera sentir apenado al pensar que la leyera.

Ya que no tenía sobres por el momento, improvise uno con una hoja de color azul y un poco de cinta adhesiva. Luego de escribir "Para: Vicchan" en el sobre mire mi reloj dándome cuenta de que ya era demasiado tarde como para ir a dejar la carta.

Suspire de nuevo, pero ahora de alivio, al dejar la carta en el escritorio, programe el despertador un par de horas antes para el día siguiente, sin falta, llevar la carta hacia el lugar que me había indicado Vicchan.

Tenía tal nudo de emoción en la boca delestómago que no supe cómo ni cuándo me quede dormido, seguramente con unasonrisa boba en mi rostro.

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Y esto es todo por hoy, mis pequeños saltamontes ~

Espero no sea difícil de digerir la idea de Vicchan como una persona, francamente no estaba cuerdo a la hora de platear muy bien la historia, pero creo que es parte del encanto de la trama (incluyendo a la película) el sentirse un poco confundido al principio.

Aún así espero que les guste este pequeño aporte al cumpleaños del Kachudon. Nos leemos luego ~

♚ Tokyo BOY  ♚ [ - Katsuki Yuuri - ]Where stories live. Discover now