Venganza.

¤~ 21 ~¤

Él bajo del auto, ella lo siguió.

Él  frenó y se dejó estar en la entrada.

Abrió la puerta y entro, ella lo imitó.

La puerta se cerró, ahora si que estaba perdida.

Jimin no la miro y se sentó en el sillón, todo su cuerpo dolía. Cerró sus ojos y suspiro cansado de todo.

Ella intentó perder el miedo y se acercó a él. Llegó hasta él y tomó con delicadeza el mentón de Jimin, los ojos de (___) recorrían cada rincón del rostro de Jimin.

Se asustó al ver que su pómulo izquierzo tenía un moreton.

Con cierta sutileza soltó el rostro de Jimin y camino en dirección a su cuarto, ahí había un pequeño botiquín.

Él no le dijo nada, no quería hablar, Sentía que explotaria si abria su boca.
Suspiro y tocó con su mano su labios, la sangre ya había secado y dolía como los mil demonios.

Al tiempo ella bajo las escaleras, casi cae en el último escalón pero no le dio importancia, llego adonde estaba él. Seguía en la misma posición.

-- deja ... deja que Cure tus heridas -- esa frase tenía muchos significados para Jimin -- por  favor. -- Él solo asintió.

Cogió un poco de algodón y agua oxigenada, limpio con delicadeza el corte del labio y luego le siguió el pómulo.

Colocó un poco de pomada en el moreton.

Jimin hacia muecas de dolor al sentir la presión de los dedos de la chica. Pero no emitía ningún sonido Estaba cansado. Él solo quería acostarse en su cama.
Suspiro y cerró sus ojos. Él también estaba cansado de todo.

-- perdón y gracias -- su voz sono un tanto apagada. -- gracias por llegar y sacarme de mi casa, gracias por salvarme de aquellos sujetos... yo... yo enserio te lo agradezco Jimin... -- hubo un momento en el que se quebró y rompió en llanto. -- perdón, perdón por haber huido, perdón por causarte problemas, perdón por los golpes... yo... No... no... queria... te pido perdón... -- su cabeza estaba a gachas, sus lagrimas caían en su regazo, no quería levantar la mirada seguramente se veía lamentable.

Él la sujeto de la barbilla obligándola  a levantar la mirada, sus ojos conectaron con los de (___), con delicadeza se deshizo de los mechones rebeldes que osaban cubrir el rostro de la joven.

La yema de sus dedos recorrió el rastro de las lagrimas, limpio cada una de las lagrimas que cubrían su rostro.
Una oleada de calor fue lo que (___) sintió.

-- perdón por todo -- dijo él cerca de ella, su mano aún seguía en el mentón de (___). -- perdón. Esto no debía pasar -- susurro muy cerca de ella.

Ella impulsada por varias emociones se lanzó a él y lo abrazo, de verdad que necesitaba ese abrazo, de verdad que necesitaba sentirse protegida, había sido mucho para un solo día, había sido muy fuerte, todo la tomó tan de sorpresa.

Él la recibió y acaricio suavemente su cabeza, tenerla secuestrada había sido parte de su plan Pero, inesperadamente las cosas se dieron vuelta. Esto no tenía que pasar.

Estuvieron varios minutos en esa posición. Ella aún seguía sollozando. Sus ojos seguían rojos.

-- Jimin... tu... tu lo sabías?? -- deseaba con todo su ser que él no supiera nada.

-- hablaremos de eso mañana, hoy necesitas descansar.

Asi fue como él la recosto en su cuarto y la dejo estar.

[...]

En un bar lleno de mujeres ofrecidas, se encontraba Siwoon, él pudo fácilmente ir con Hye pero no quería verla, no ahora.

Una rubia con caderas de infarto estaba a su disposición, podría decirse que la mujer era bella Pero, todo era silicona. Nada real.

Se Sentía estúpido al pensar en Irene.

Bebía  con furia uno, dos, tres vasos de whisky.

Quería olvidar todo, se suponía que todo estaría bien, que todos sería perfecto pero nada resultó ser lo que él esperaba. 

Con fuerza sujeto el brazo de la rubia y la llevo a uno de los baños, necesitaba de alguna forma desquitar su ira con alguien y esa rubia había resultado ganadora.

No espero a que la situación se calentara, la increpó de golpe.
Introdujo su hombría muy de golpe en la rubia.

Ella se retórica pero no de placer si no de dolor.

Con ella deshizo su ira, la golpeó, incluso la hizo sangrar.

Digamos que ya estaba satisfecho. Sin decir nada y tirando un par de billetes salió del lugar y se fue hacia su auto.
Golpeó el volante con fuerza y aceleró con furia.

[...]

Irene miraba con melancolía la foto de su hija, varios momentos vinieron a su mente, le dolía haber sido de esa manera, se arrepentia de todo lo que había hecho, deseaba redimir su pasado, quería por lo menos estar con la conciencia algo tranquila.

-- te falle mi niña -- con sus dedos recorrió la foto -- yo... como lo siento... no debí... pero... Perdón, donde sea que te encuentres.

Se dejó caer y abrazo con añoranza la foto de su hija. Deseaba que ella descansara en paz, y ella también quería paz.

Una idea que podría destruir todo paso por su mente, no lo pensó dos veces y planeó como haría para que su alma descansará en paz. Él necesitaba saber la verdad, aunque sea ya demasiado tarde.

-- te daré la paz que deseas hija...

[...]

Ya era de mañana y como los otros días el clima seguía de malas.

Ella abrió sus ojos, algo inchados por haber llorado la noche anterior. Y lo vio, lo vio a él durmiendo tan plácidamente en un sillón que se encontraban en un rincón. Se veía tan pacífico, como si nada le afectará, como si todo su entorno fuera nada. Ella quería sentir esa paz, envidiaba esa paz.

Curiosa de verlo así se dirigió hacia él.
Estuvo un muy buen tiempo contempladolo, su amigo había crecido y se había convertido en un hombre, un hombre muy guapo.

Su respiración era cálida. Con sus dedos recorrió su nariz, él no era malo, era sumamente tierno.

Que Lo había llevado a hacer lo que hizo??

Ella quería respuestas, y las respuestas las tenía él.