Enferma de amor ...Star x Marco...

Cap 16

Star~ Marco me miraba, esperando a que hablara. Poco a poco mi valor se fue desvaneciendo. No podía decirle. No. No quería que supiera que lo amaba ni que mi enfermedad era por amor. Sólo quería que fuéramos como antes... No pedía nada más. Empezariamos una nueva vida: el seguiría con Jackie y yo... seguramente volvería con Tom. Me sentía cobarde. Pero no podía hacer nada para evitarlo. Estaba paralizada frente a él.

Marco~ Star miraba el suelo, nerviosa. No podia adivinar que pasaba por su cabeza, pero seguramente tenia miedo a hablar. Decidí que había que terminar con esto de una vez y yo lo haría, como todo un hombre.

—No, Star... yo soy el que tengo que hablar contigo —le dije —.

Star me miró asustada. Se podían ver como varias lágrimas caían de sus mejillas. ¡La pobre había sufrido tanto! Pero todo eso terminaría. A partir de ahora todo iba a ser diferente. Quizás me rechazaría, pero al menos sabría lo que siento por ella.

—S-Star... se que estás enferma por mi culpa, que todo lo malo que ha pasado es por mi... Pero sabes, ya no puedo aguantar más y quiero que sepas que yo... en realidad... t-

—Vaya, vaya... Star, Marco... nos encontramos al fin.

Star~ Me di la vuelta para ver de dónde había salido esa voz, y cuando lo vi no pude evitar sentir un escalofrío.

—¡T-toffee! —grité —.

—¿Te sorprende verme, princesa Star? —dijo él, burlamente —.

—¡P-para nada! —mentí —.

—Vaya, vaya... Es el chico karate, ¿no es así?

—¿Que quieres, lagartija? —dijo Marco, molesto —.

—No te metas, mocoso. Esto es entre yo y Star.... Buterfly, necesito que me entregues tu varita.

—¡! ¡¿Qué?! ¡Claro que no! Además, pensé que eso no te interesaba... —dije, extrañada —.

—Yo no soy como Ludo... tengo otros planes. Ya lo verás... —dijo Toffee, dándome un golpe y dejándome inconsciente al instante—.

Marco~ ¡Star había quedado inconsciente! Me sorprendió que Star no pusiera ninguna resistencia al golpe de Toffee. Al parecer estaba muy débil para reaccionar. Todo por mi culpa. Al  ver a Toffee llevándose a Star, me lancé hacia el, tratando de detenerlo, pero no conseguí nada y me golpeó contra el suelo. No quise darme por vencido y tomé mis tijeras dimensionales y la empecé a buscar. Parecía un verdadero loco. Luego, como ya no sabía donde buscarla, fui donde Hekapoo, quien al parecer estaba enterada de la situación y, asustada, me dijo donde estaban.
—Y tu, ¿no vienes a ayudar? —le pregunté —.

—Es algo más grave de lo que crees, Marco, no sabes a que te enfrentas —dijo, sombría —.

—Eso no importa, yo nunca dejo a las personas que amo.

—A Star... ¿L-la... amas?

—S-si... Y aunque no fuera así, es mi mejor amiga y no puedo dejarla sola.

—Mmm... supongo.

—Entonces, ¿me acompañarás?

—No. Toda la Alta Comisión de Magia tomó la decisión de ocultarnos hasta el momento más oportuno.

—Me sorprende que seas así de cobarde, teniendo más poder que yo...

—¡! ¡¿C-cómo te atreves a hablarme así?! Recuerda con quien estás hablando, Marco Díaz. Ahora, ¡márchate de mi vista! Antes que ya no puedas —dijo, furiosa —.