ORANGE

Capítulo 5

Mejores amigos del planeta

Pasó una semana y al fin tenía mi teléfono de vuelta.  Estaba en la universidad.  Le envié un mensaje a Aiden.

You:
Hola Naranja :)
Naranja:
¡Hola! Pregunta que te hago...
¿Cuál de los dos es tu número?

You:
Ahh... los dos. :D Precisamente eso mismo te iba a decir.

Naranja:
Hahahaha ahh bueno... pues gravaré los dos entonces.

Caminaba mientras escribía.  Pero yo, torpe al fin,  choqué con alguien.  Mi teléfono cayó al suelo y quedó hecho cantos.  Me iba a dar un ataque cardiaco.  Ni me había fijado en la persona que chocó conmigo.  Solo me agaché y al ver mi teléfono caí en estado de desespero. 

_ ¡Rayos!  Que torpe soy... -Escuché la voz de un chico hablar.  Fue ahí cuando miré.  Era un chico alto de tez blanca, ojos marrones, cabello negro y ojos bien rasgados. 
_ Lo siento... mandaré a arreglar la pantalla de tu celular.  -Dijo avergonzado, aferrándose a mi teléfono.
_ Olvídalo.  ¿Tienes idea de cuánto vale ese trabajo?  -Dije tratando de no molestarme.
_ Es gratis.  -Dijo.
_ ¿Ahh?
_ Mi padre trabaja en eso y no creo que me lo cobre. -Dijo. 
_ ¿Cómo te llamas? -Pregunté.
_ Joshua. 
_ Bien, Joshua.  Olvídalo.  -Dije y traté de seguir mi camino.  Pero él quitó mi celular bruscamente y lo guardó en su bolsillo. 
_ El miércoles a las 12:30pm frente a la universidad.  -Dijo con una media sonrisa y siguió caminando al revés, de tal forma en que seguía mirándome.  Yo me quedé perpleja.
_ Tráelo puntual.  -Fue lo primero que se me ocurrió decir.  Entonces se volteó y levantó su mano con su pulgar arriba.
_ !Lo haré!  -Gritó discretamente.

Nada más eso me faltaba. Es que a mí me pasaban cosas. Al menos con mi familia no tenía tanto problema porque el problema era yo. Pero bueno....
Ya era miércoles. Y justo como Joshua había dicho, ahí estaba parada como una tonta. Pasaron minutos y él no llegaba. Pasó media hora y ese cabezón no aparecía. Y yo por otra parte pasando pena. Hasta que al fin apareció.
_ Perdón por llegar tarde. Estaba haciendo un examen. -Dijo parándose frente a mí pasmado. Yo no sabía si reír o llorar.
_ Aquí traje tu teléfono. -Dijo sacándolo del bolsillo. Estaba como nuevo. Yo estaba emocionada.
_ ¿Cuánto es?
_ Te dije que nada.
_ Gracias.
_ El torpe fui yo.
_ No... yo era la que caminaba a la vez que texteaba.
_ Los dos fuimos despistados. -Dijo sonriente.
_ Si... ¿Hay algo que yo pueda hacer por ti? Digo... es por lo del celular. Me siento mal si no pago. -Dije.
_ Bueno... en realidad si. ¿Eres buena en las matemáticas? -Preguntó.
_ Ni me hagas reír. Soy pésima. -Dije.
_ Qué lástima... Pues ya sé qué puedes hacer...
_ ¿Qué? -Pregunté nerviosa. Entonces escuché una voz a lo lejos.
_ ¡Grace! -Cuando veo, era Blake.
_ ¡Rayos! Es Blake. -Dije mirando al suelo para evitar que me viera aunque era muy tarde. Venía en dirección a mí. Se paró a mi lado y me colocó el brazo sin pena alguna.
_ Te he buscado por todas partes. Tú me debes una conversación... -Dijo con su actitud tan arrogante. Quité su brazo de mí.
_ No te debo ninguna conversación y si me disculpas, estoy hablando con alguien. -Dije rodeando mis ojos, tomé el brazo de Joshua y nos adentramos a la universidad.
_ Es tan infantil el idiota. -Dije incómoda.
_ Él es...
_ Un idiota que es amigo del ex de una amiga. Está pendiente a mí.. pero me enteré de muchas estupideces que él a hecho a las chicas.
_ Ohh.. Entonces si te molesta, me avisas para caerle encima. -Dijo.
_ No es necesario que te involucres.
_ Entonces te llamas Grace...
_ Sí.
_ Sabes Grace.... Me caes muy bien. -Dijo sonriente.
_ Igual tú. -Dije pasmada.
_ Que bueno.
_ ¿Qué querías que hiciera por ti? -Pregunté.
_ ¿Podrías ser mi amiga? -Preguntó avergonzado.
_ Eh.. sí ¿?
_ Sé que es raro preguntar algo así pero solo decía porque tengo muchas amistades que me traicionaron y en estos momentos estoy teniendo problemas con mi familia. Necesito alguien que me escuche. No te quiero obligar porque no quiero que te sientas...
_ Sí.
_ ¿Ahh? -Preguntó asombrado.
_ Dije que sí. Eso no es una molestia. -Contesté riendo.
_ Gracias. -Dijo.

Nos intercambiamos los números de teléfono y luego continúe mi camino.
Pasaron los días las semanas y tres meses. Ya me había encontrado con Aiden unas cuantas veces ya y nos pasábamos hablando largas horas por teléfono. Con Joshua fue lo mismo. A cada rato nos pasábamos juntos en la universidad. En cuanto Loren y las demás. Nada cambió. Era un jueves. Le escribí a Aiden y él término llamando.
_ Adivina qué....
_ ¿Qué? -Pregunté.
_ Conseguí trabajo para ti. -Dijo.
_ ¿¡Qué!?
_ Mi agencia busca fotógrafos urgente. Sé que tienes el talento. -Dijo.
_ Oye naranja ¿Sabes qué? Eres el mejor. -Dije emocionada.
_ Lo sé. Llama por teléfono a la agencia. Te lo enviaré por texto. Ya ellos tienen conocimiento sobre ti. Les envié las fotos del shooting de la primera vez que salimos en el parque.
_ Nice.

Perfecto. Yo sí que me sacaba a los mejores amigos del planeta. Pasaron los días. Me aceptaron el trabajo. Yo estaba muy contenta.