Es difícil comprender cuando uno ya tiene sus propias responsabilidades, y eso es lo que Venus tendría que entender. Todos somos grandes cuando queremos, pero a la hora de hablar de responsabilidades muchos agachan la cabeza. Como toda loba, de día...
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Con Cleo nos miramos sin entender nada, ¿En dónde nos metimos? Puede ser que acá no le digan entrevista si no casting, capaz así suena como más profesional o más interesante, la verdad no entiendo nada, y ya me quiero ir, aunque también me da demasiada intriga todo esto, ya quiero saber que tenemos que hacer. Cuando ya nos terminamos de cambiar nos miramos la una a la otra, ella lleva puesto ropa interior de encaje color blanco, y unos tacos bien altos, y yo llevo puesto ropa interior también de encaje pero enteriza, color negro con unas botas a cordones largas que también tienen tacos, aún sigo apostando que esto es un cabaret, la única ropa que hay en esta habitación es pura ropa interior de todo un poco, no me siento para nada cómoda con esto, parezco una puta. Cleo se acomoda el cabello y se dispone a abrir la puerta, cuando la abre el chico que estaba afuera quedo boquiabierto cuando se dio vuelta a mirarnos.
- Mejor cierra la boca porque se te va a entrar una mosca.- Dice Cleo y todos estallamos de risa.
- Están Hermosísimas, se lo aseguro, vengan por acá, las voy a llevar a que conozcan a sus compañeras de castings.- Dice y nos lleva a la habitación del lado, pasamos y allí se encuentran tres chicas que apenas nos ven empiezan a hablar, es obvio que hablan de nosotras, pero la verdad es que no me importa en lo más mínimo, luego de pasarlas a las tres chismosas, nos encontramos con una fila llena de chicas vestidas en ropa interior, todas tienen un cuerpazo, Cleo me mira y me dice que me apuesta lo que quiera que vamos a hacer alguna publicidad de ropa interior o algo así, yo no le digo nada, la verdad es que estoy muy confundida ya, el ambiente parece de un cabaret, pero estamos haciendo un casting con ropa interior que podría ser como dice Cleo de promocionar ropa interior.- Chicas quédense acá que ya está por llegar Luke, es el jefe de todo esto, mucha suerte y espero verlas acá mañana trabajando.- Dice y se va con su sonrisa de oreja a oreja, con su pelo color castaño claro casi rubio y sus ojos color miel.
- Estoy híper nerviosa.- Dice Cleo a lo que yo solo asiento. Luego de un rato de espera, abren una puerta delante de la fila y nos hacen pasar a todas al escenario que había en la entrada ya me perdí, esto es un laberinto, y más si está a oscuras como ahora, los nervios invaden todo mi ser, el mismo chico aparece y nos deja a cada una de las chicas de la fila un cartelito con un numero diferente, a Cleo le deja el número 59 y a mí el 60, me he dado cuenta de que no para de mirarla a Cleo, y eso me hace reír.
No me había dado cuenda de que el escenario tiene como una mini pasarela, debajo del escenario se encuentra una mesa con dos sillas, y con varios papeles encima, están todas las chicas arriba del escenario, todas susurrando y eso me hace poner más nerviosa aun, de repente aparece un hombre, su aspecto es de un hombre grande con sobrepeso, canoso y alto.
- Hola ¿cómo están? Mi nombre es Luke, soy el jefe de todo esto, como verán falta alguien, es el dueño del lugar, que siempre llega tarde, cuando llegue vamos a estar dispuestos a comenzar, mientras tanto les voy a pedir que cuando las llamemos estén guardando silencio, las vamos a llamar de a cinco y van a tener que darnos un mini desfile, para poder verlas con atención.- Dice, su voz es áspera y ronca, y tiene otra tonada. Pasa casi corriendo un hombre, saluda a Luke y se sienta, usa anteojos, lleva puesto un traje, es demasiado flaco y su cabello es rizado y castaño, es un friki total. Él no dice nada, solo se sentó y no se presentó ante nosotras.- Él es el dueño como ya les he hablado, y se llama Nelson, ahora les pido que se retiren todas del escenario y en un rato llamaremos a las primeras cinco.- Dice y todas salimos del escenario.
- Puaj, me quedo con el barman mil veces.- Dice Cleo y yo sonrío.
