You monster [Crust]ǀCrossxDustǀ

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El silencio casi reinaba por la mayoría del hospital pues era de muy noche ya, pero, ¿por qué digo casi? la respuesta es fácil creo yo, es un psiquiátrico después de todo y no siempre se puede dormir con un gustoso silencio en lugar como ese, Dust lo estaba viviendo en carne propia en esos mismos momentos, escuchaba como al otro lado de la pared algunos de los internos hablaban consigo mismos acerca de trivialidades que no tenían ni una sola pizca de sentido o lógica, todo era completamente absurdo, con todo lo que hablaban y por el tono de voz que usaban podía incluso imaginar las expresiones y movimientos que posiblemente realizaban al pronunciar cualquier palabra. Otros por su lado solo se dedicaban a dejar salir su profunda amargura que los oprimía en su día a día. Entre aquellos sollozos logró escuchar en lo lejano uno familiar, juraba haberlo escuchado antes, hizo memoria y ¡bingo! era la adolescente que había escuchado anteriormente en el cuarto blanco.

— ¿Qué hace allí?... ¿un alma joven en un lugar como este?

Trato de sentarse en la camilla, pero lo detuvieron los amarres en sus muñecas y tobillos, las miro detalladamente y noto que había un amarre extra que no le habían hecho, bueno, pensándolo bien no tenía sentido el que le hicieran un amarre en su estómago que no poseía. Le dejó una parte de su peso confiado a sus codos y brazos y escuchó con sumo cuidado el llanto de la muchacha, el no poder localizarlo le provocó cierta molestia. Cerró sus cuencas para mentalizarse mejor hasta que por fin dio resultado, pero hubo algo diferente esta vez, el llanto se escuchaba cada vez más claro y fuerte, «puedo jurar que se escucha como si compartiéramos habitación y ella estuviera acostada en la camilla del lado».

Abrió sus cuencas como platos al caer en la cuenta de que su propio pensamiento tenia razón, sintió como una pequeña cantidad de adrenalina emprendía un viaje desde su corazón a su cráneo, manos y pies y partía de regreso a toda velocidad, como si fuera una carrera por quien llegaba primero la cual era más que importante ganar. Volteó a todas las direcciones que su vista podía proporcionarle, la oscuridad no era de mucha ayuda pero gracias al tiempo que estuvo despierto se había adaptado al menos un poco. No veía nada fuera de lo normal, suspiró sonoramente tratando de regular su pulso al igual que despejar su mente de tantas conspiraciones. Volvió a recostare en la camilla por completo con los huesos relajados.

— Lo siento

Sintió su alma dar un enorme brinco y detenerse durante microsegundos, miro a los lados de la camilla hasta donde le permitían sus ataduras para encontrar algo o alguien, intento jalarlas para mirar por debajo de su camilla pero se detuvo al sentir dolores en sus muñecas, tan siquiera una mísera evidencia de que alguien había estado allí quería, pero no encontró nada dentro de su campo de visión. Dejó caer todo su peso en su columna vertebral una vez más. Cerró con fuerza sus cuencas mientras pensaba en todo, literalmente. Estuvo en su propio mundo hasta que una mano algo fría se paseó gentilmente por encima de su frente, por un momento le puso nervioso... momento... el reconoció la caricia.

— PERDON POR LA ESPERA SANS

— ¡Papyrus tienes helados tus casi inexistentes huesos!

— GUARDA SILENCIO

— Hehe te extrañe hermano

Papyrus siguió brindándole caricias al cráneo contrario al igual que a sus demás huesos, revisó cada uno de ellos viendo la gravedad de sus heridas, Dust se sintió nervioso pues esperaba algún tipo de regaño o algo parecido, en cambio Paps solo guardó silencio, no era un silencio de decepción ni nada parecido, era uno sencillo sin explicación. Habló cuando termino de inspeccionarle.

— DESCANSA YA

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