Dia 4

697 29 9
                                    

12.22 pm

Habían tocado la puerta por tercera vez y yo prendería estar muerto antes que abrir, ya que a pesar de que la noche anterior no había bebido mucho, ahora tenía una resaca terrible, sintiendo como me martillaban al medio de mi frente.

-Louis-escuché su voz llamando-abre la puerta.

-¡Lárgate!-le grité de vuelta-vuelve a medio día o mañana si quieres.

Me volví a acomodar en la cama para seguir durmiendo, pero ahí estaba el sonido de sus nudillos golpeando mi puerta.

-Mierda...

Susurré mientras me levantaba de mala gana y aunque había bebido menos que él, mucho menos, se veía con una sonrisa radiante, el pelo húmedo y nuestro desayuno en una bandeja.

-Buenos días.

Le levanté la mano sin ganas y me volví a acostar en la cama, pero sentí como esta se hundió, ya que se sentaba junto a mí.

-¿Qué hora es?

Le pregunté después de girarme y verlo con un bowl lleno de frambuesas y manzana cortada en cuadros.

-Doce treinta.

-¿Cómo...?

No terminé de preguntar y él estaba sonriendo orgulloso.

-Tuve que convencer a las chicas de la cocina para que nos dieran el desayuno. Llevé un poco tarde, pero lo conseguí.

-¿Qué trajiste?

Me levanté tímido y lento para revisar la bandeja con la mirada. Había una jarra llena de jugo de naranja, otra de solo agua y mucha comida. Esto era mejor que cuando desayunábamos en el comedor.

-¿Cómo te sientes?

-¿Yo?

Me preguntó con la boca llena de manzana.

Negué mirando la bandeja y sabía que no recordaría nada de la noche anterior, pero tampoco tenía ganas de repetir todo lo que había pasado.

Terminamos comiendo todo lo que había traído y ahora que estaba satisfecho me volví a acostar para intentar dormir aunque sea unas horas y así no estar de mal humor durante el día.

-Te tengo una propuesta.

Solo tuve que girar la vista, porque se había recostado junto a mí. ¿Cómo mierda podía estar de tan buen humor? Juro que lo vi beber el doble que yo anoche.

-Mañana.

Solo le respondí eso y se vio decepcionado, pero insistió en su idea.

-Pero tengo una idea genial para....

-Mañana.

Le volví a repetir porque hoy no quería salir. Solo iba a ser yo, mi cama y mis ganas de dormir.

-Te propongo un trato.

-Mañana.

-Puedes...-se vio frustrado-¿puedes primero escucharme?

Suspire cansado y me giré para mirarlo mejor mientras hablaba, pero me mostró un papel blanco, así que lo tomé de entre sus dedos y comencé a leerlo.

Era sobre un tour que harían por algunos lugares patrimoniales de la isla.

-¿Quieres ir?

-Me gustaría-asintió-bueno, para que tu conozcas y...

-¿Dónde es?

-Al otro lado de la ciudad. Si quieres almorzamos y vamos o...o comemos después, no lo sé.

Coleccionando Atardeceres {Larry Stylinson} [Terminada]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora