Incognito (Liam Payne & tu)

Capítulo 14: Australia, aqui vamos.

Solo faltaban horas, con Abby nos habiamos despertado temprano, para desayunar y arreglarnos muy bien para llegar relucientes.

Nunca imaginamos que serían 15 horas hacia Australia, ni que Abby se comportara como una niña chiquita todo el camino, preguntando cuando ibamos a llegar o cuánto faltaba.

Pero, por fin ya estabamos aquí, según lo que me había dicho Liam, tenía que tomar un taxi hasta el hotel Hilton Sidney y que el nos esperaria en el Hall.

Al llegar al hotel, vi a Liam de inmediato y fui corriendo hasta él. Él me correspondió el abrazo y me dijo al oido:

- Por favor; finge ser una fan - fruncí el ceño esta no era la bienvenida que quería. Tenía que fingir ser una de sus fans, tenía que pensar como ellas. Hice lo prinero que se me vino a la mente y saqué mi celular y me saqué una foto con él. Esperaba que eso funcionara.

Me volvió a abrazar y se acercó a mi oido.

- Gracias, ya esta todo pagado, te espero en el ascensor.

El botones tomó nuestras cosas y con Abby fuimos a su siga.

- ¿Qué esta pasando? - me decía en voz baja mi amiga.

- Parece que no pueden saber quienes somos.

Al abrirse las puertas del ascensor estaba Liam apoyado en la pared con los brazos cruzados esperandonos, apenas nos vió nos abrazo a las dos.

- Perdón, me hubiera gustado recibirlas de mejor manera, pero el hotel esta rodeado de paparazzis.

- No hay problema - dije.

- Les recerve la habitación que esta al frente mio.

- Genial.

El botones abrió nuestra puerta y pudimos ver nuestra gigantesca habitación, la cocina era como nuestro departamentito.

Liam le pagó al botones y fue a abrazarme por la cintura.

- Gracias por todo esto, gran simio.

- Te lo mereces por ayudarme con esta hermosa mujer - podía sentir como mis mejillas comenzaban a arder.

- Si se quieren besar, les informo que no me moveré de aqui hasta unas horas mas, cuando me vaya a la piscina.

- No te preocupes, voy a robarmela - me tomó con sus dos fuertes brazos y me sacó de la habitación, mi torpesa no pudo reaccionar ante eso, pero tampoco sabía si quería que reaccionara contra eso. Cruzó la puerta de su habitación y me besó a penas escuchó que la puerta estaba cerrada. Sus labios los tocaba de nuevo después de tanto tiempo sin saber de ellos. Los extrañaba realmente, extrañaba esas maripositas en mi estomago cada vez que nuestros labios hacian contacto.

- Te extrañe muchisimo - dije

Me quitó un mechon de mi cara, me miró a los ojos y me acarició la espalda. Sabía que significaban todas esas cosas. Significaban que el también necesita de mi. Que tambien extraña nuestros contactos.

Volvimos a besarnos, a veces nos faltaba el aire, pero ninguno de los dos le importaba eso, buscabamos la manera de respirar en que no nos desunieramos. De pronto mi espalda tocó algo suave y acolchonado. Y supe de inmediato que no era el paraiso, si no la cama. Me recosté sobre ella y Liam siguio con migo. Ibamos a hacerlo, pero un golpe en la puerta nos interrumpió, al principio ninguno de los dos tomó atención, pero después los golpidos eran mucho mas fuertes y enojados.

Me arreglé lo mas rápido que pude mientras Liam iba a abrir la puerta.

Entró a la habitación un hombre de 35 - 40 años muy exaltado.

- ¿Quién es ella Liam?

- Una amiga

- ¿Y por qué mierda las cámaras de seguridad me dicen lo contrario?

- Nos gustamos Mark, ¿Hay algún problema con eso?

- Si, se supone que tienes otra novia, si los productores de la compañia de modelos saben que estamos rompiendo el contrato perdemos millones Liam.

- Estoy aburrido Mark, quiero vivir mi vida como un hombre normal, no de farsas.

- ¿Quiéres seguir ganando lo que ganas? ¿Quiéres seguir trabajando en la música?

- Me da lo mismo cuanto gano y este no era el tipo de concepto que tenía de producir música.

- No pensabas asi cuando firmaste el trato.

- ¡Tenia 17 años!

Mark elevó sus hombros y Liam se quedó callado.

¿Yo solo miraba todo esto, qué debia hacer?

- No quiero representaciones publicas de su amor, o lo esconden muy bien o ella tendrá que irse.

Liam quería responder algo, lo notaba en su cara, pero al final no lo hizo. Cuando Mark cerró la puerta, se sentó al lado mio y tapo su cara.

- Lo siento por eso.

- No te preocupes.

No sabía que mas decir, asi que lo abracé, esperaba que con eso demostrara que no estaba enojada.

-Quería evitarte eso, pero llevas ni siquiera una hora y ya lo pasaste.

Podía escuchar en sus palabras cuan triste y desepcionado estaba.

- Liam - necesitaba que me mirara para demostrarle que no estaba mintiendo. Cuando me miró por fin, pude seguir - cuando acepte venir, sabía que me iba a encontrar con esto, además necesito que me enseñes de tu vida, qué haces, a dónde vas, las personas que te rodean, todo.

El trato de examinar, a traves de mis ojos, si lo que decía era verdad o no, y cuando consiguió la respuesta se acercó a mi con una pasión nunca antes vista en un hombre, lo cual, me exitO demasiado.

Ibamos a volver a lo que estabamos haciendo antes de que Mark nos interrumpiera, pero parecía que el destino no quería que tuvieramos un momento a solas, ya que su celular comenzó a sonar, el no iba a contestar, pero tuve que decirle que lo hiciera, no quería ser un estorbo en todo esto.

- Voy en seguida - terminaba la llamada.

- ¿Tienes que ir?

- Sí - decia con una mueca - Si quieres puedes ir conmigo.

- Prefiero ir a desempacar y buscar a Abby para ir a la piscina.

- Te veo ahi luego

- Claro.

Ordené mi pelo y fui a la puerta, pero antes que pudiera abrirla, sus fuertes manos me giraron y enpujaron hasta que nuestros labios se dieron un beso de despedida.