Capítulo 4

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Lo veo abrirme la puerta del carro, me trajo a su apartamento. Es un edificio enorme debe de contener unos 30 pisos, está en una zona exclusiva, obviamente alejado del mío. Entramos tomados de las manos y siento pura electricidad las cuales envían descargas constante a mi cuerpo. Tengo dopamina gobernando mi cuerpo, necesito descargar todo esto. Esta noche será una forma de descargar el pasado, cada orgasmo será una forma de soltar todo y volar hacia la felicidad. Después de esta noche nacerá una nueva Beatríz, una mas fuerte y menos tonta. Una Beatríz capaz de olvidar todo incluido el hombre perfecto que me lleva tomado de la mano.

                                                              *        *       *

Entramos al ascensor. Lo veo como se coloca frente a mi, su mirada arde y me trasmite miradas ardientes cargadas de deseo. Veo como la naturaleza arrastra con violencia en sus ojos, es deseo, el me desea. Un hombre guapo y hermoso arde de deseo por mi.

-muero de ganas de tomarte aquí y ahora, pero no puedo hacer eso. Hoy no- Enmanuel termina de decir esto como si fuera una promesa.

Entonces lo beso. Lo beso como nunca he besado a otro hombre, con decisión e intensamente. El al principio no responde pero luego de unos minutos su lengua exige la mía, la cual despierta y se une a la danza electrizante de un preámbulo de infierno eterno.

-He llego a la conclusión de que ya no quiero un ángel, Beatríz,  permiteme domar tus demonios- dice El entre jadeos mientras recupera el aire.

-Yo soy mis demonios y la vida me ha enseñado a pelear mis batallas.

Enmanuel me regala una sonrisa torcida. ¡oh Dios de la perfección, hombres calientes y guapos!. El ascensor por fin llega, es tan lindo aquí. Es el doble de mi apartamento, elegante. Es obvio este hombre hombre tiene dinero, se nota en su manera de actuar, es malditamente seguro y desprende testosteronas.

-muy lindo lugar, digno de un Dios- digo mientras inclino mi ceja izquierda.
El me mira con misterio y preguntas mientras agrega:
-A la orden de mi ángel.
Cuando quise reaccionar el ya estaba frente a mi, con una mano Rosando mi mejilla izquierda. Este es el momento exacto donde mis neuronas dejan de funcionar y le seden todo el control a las hormonas. Me toma por la cintura mientras susurra a mi oído:

-Eres hermosa Beatríz. Dante sentiría envidia de mi en este preciso momento.

Esto es lo mas hermoso que un hombre me ha dicho. No puedo responder nada y creo es por el sencillo motivo que las hormonas no me lo permiten. El me besa, pero no es un beso cualquiera. Este hombre hombre me besa como si estuviera sediento y en mis labios encontrara toda el agua que necesita para sobrevivir. Jadeo, estoy muy excitada. El tiene el control y así me gusta. Esta convertido en un explorador y mi cuerpo es lo desconocido, necesita ser explorado y conquistado. Acaricia mi cadera y mi trasero de una manera fuerte y rápida mientras murmura cosas que no logro entender.

Sus caricias son el aviso de un hombre caritativo el cual prefiere dar que recibir. Es malditamente atento y presta una atención desesperante a tocar, saborear y besar, parte por parte de mi cuerpo. Lo veo tomarse su tiempo besando mi cuello, mientras yo acarició su espalda. Es tan guapo, tan fuerte. Me toma en sus brazos y es como si el hubiera Leido mis pensamientos, esto es justo lo que quiero olvidar el preámbulo e ir directo al acto. Cruza toda la sala de estar, conmigo en brazos, hasta llegar a su habitación. Me deja de pié mientras baja el cierre de mi vestido, este se cae al piso y yo me encuentro en ropa interior y tacones frente a un Dios. El se detiene a observarme, veo como sus ojos me estudian mi cuerpo y esto es jodidamente incomodo, el lo nota porque susurra  en mi oído:
-Realmente eres hermosa, la mujer mas hermosa que mis ojos han visto.

Al terminar de decir esto me ayuda a salir de mi vestido, es un caballero y para todo se toma un tiempo sorprendente. Cuando sacó mis tacones se tomo un tiempo hermoso para acariciar mis píes, este hombre es sorprendente. No soporto mas y me lanzo en sus brazos, lo beso. Lo hago porque es la única forma que tengo de trasmitir el mar de emociones y sensaciones que navega mi cuerpo. Mi beso grita, te quiero a ti... Dentro de mi.... Ahora.

Lo veo como se empieza a desabrochar su camisa, luego su pantalón. Es hermoso  y no puedo evitar darle una mirada de morbosa que lo hace sonreír. Mi ojos lo siguen a todos lados. El continua con esa sonrisa de suficiencia y luego de torturarme me abraza y besa. Nunca había sentido esto, nuestro cuerpos juntos se sienten jodidamente bien.

-te haré disfrutar ángel, te mostraré el cielo- justo en ese momento inician las caricias desenfrenadas.

Somos una enredadera de cuerpos, caricias y besos. El es un Dios en el arte del placer. Inicia besando mi cuello, mientras con sus manos acaricia mis senos. Mi cuerpo ya no esta bajo mi control es el quien manda. Lo observo dejar un reguero de besos desde mi cuello hasta mi seno izquierdo. Es una sensación tan calidad y placentera que lo único que puedo hacer es abandonarme al disfrute de ella. Siento su recorrido mientras besa mi vientre, ¡Diablos! Como amo eso y lo que viene después. El me mira y me sonríe con malicia, separa mis piernas e inicia besando mis mulos, hace aproximaciones a mi sexo pero no lo toca, es realmente desesperante.

-oh por favor Enmanuel- susurro entre jadeos y movimientos de cadera.

-tranquila cariño, tenemos toda la noche para esto- dice esto mientras se sumerge entre mis piernas.
Es tan bueno ahí, muevo mis caderas para acercarlo mas, el se detiene y dice:
-tienes que ser un ángel bueno Beatríz- su mirada es intensa y oscura.

Enmanuel no es un Dios, es un diablo y por el me dejaría arrastrar gustosa al infierno. Lo agarro por el cabello y lo hundo mas en mi, besa, succiona y con un dedo acaricia. Siento como introduce un dedo dentro de mi, mi espalda se arquea. Inicia un juego de dentro fuera, mis músculos se contraen y mi orgasmo llega abrazador y gratificante.

-Que dulce ángel-murmura Enmanuel aun entre mis piernas.
Se coloca un preservativo mientras me besa. Se coloca sobre mi y se introduce de la manera mas rica y respetuosa posible.

-Rico, tal como lo imaginé.
He inician los movimientos de un van y ven de sensaciones las cuales me hacen responder a el en movimientos y gemidos los cuales no llevan a un estado orgasmico extremadamente placentero.

                                                                    *    *   *
Despierto sorprendida no reconozco el lugar donde estoy. Mi mente despierta y me regala una porción gratificante de recuerdos.¡carajo!. Me muevo lentamente, para poder escapar de esta cama y no despertar al Dios que duerme a mi lado. Cuando logro librarme recojo todas mis pertenencias.

Veo que hay papeles sobre la mesita de estar que descansa en su sala y decido escribirle una nota, es cierto que me voy como una delincuente pero me imagino que al despertar estará confundido, incluso puede creer que no fue real. Ese pensamiento me hace triza el estomago me encantaría que el me recuerde, después de todo yo no voy a poder olvidarlo y mientras pienso esto salgo de su casa dejando una nota, con la dignidad en el piso y mis tacones en las manos.

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