Cuando Vi Tu Rostro

¿A qué juegas?

Capítulo 9

Me quedé en shock por un momento y mis labios correspondieron a los suyos. Reaccioné y la separé de mi-no puedes venir a mi casa y besarme sin más, no voy a ser un juguete tuyo. ¿¡Qué te pasa?!-en ese momento le estaba hablando con las manos empuñadas de la rabia...no es que no quisiera besarla, sus labios son jodidamente besables pero necesitaba una explicación al menos...no podía dejarla aparecer y usarme a su antojo sin más.

Luego de un silencio un poco incomodo me di cuenta que una lagrima corría por su mejilla-Lo...yo lo siento, Amy yo lo- hizo una pequeña pausa, luego cayo al suelo en sus rodillas y mas lagrimas corrieron-no tienes idea de cuanto lo siento-a ese punto no dejaba de llorar y su voz sonaba muy quebrada. Es mi mejor amiga aun a pesar de todo, no puedo solo mirarla en ese estado y no hacer nada...me puse a su altura y la abrace-calma pequeña-mi cabeza esta hecha todo un lio, pero con ella así solo puedo pensar en consolarla...a veces detesto quererla tanto, pero supongo que con ella siempre es así-respira si? trata de calmarte un poco y por favor dime algo y te pido que no sea un "lo siento"...suspire y me la quede viendo mientras con mi mano acariciaba su espalda, ya al menos estaba bajando la intensidad de su llanto-mi mi intención nunca fue lastimarte Amy-agacho la cabeza-yo yo esperaba que ya te hubieses ido yo...yo no quería que vieras eso que paso-su voz estaba bastante entrecortada aun por el llanto e hizo una pequeña pausa. El hecho de recordar lo que había pasado dolía pero necesitaba escuchar que paso-solo no querías que lo viera o ¿que?-dije un poco cortante, una parte de mi no quería saber más nada, pero en el fondo esperaba que esto no fuera real-no Amy, no digas eso...sabes yo yo realmente te quiero y no quería hacerte pasar por esto-suspiro-es Alejandro, es él, volvió y y esta vez no se ira-su voz sonaba nerviosa y con toda razón, Alejandro es el padre biológico de Lucy pero las lastimaba tanto física y emocionalmente, a ella y a su madre, hasta que su madre decidió denunciarlo y no se les podía acercar, luego de eso Alejandro desapareció hasta ahora-como que Alejando volvió?!-dije con un tono de preocupación-¿lo has visto? ¿te hizo algo?? !dime algo¡-realmente estaba muy preocupada por lo que pudiera responder, en ese momento omití la principal razón por la que estábamos hablando. Esto era más importante-llego el mismo día en que apareció Thomas o eso creo-tenia la mirada fija al suelo y las palabras salían con cierto desprecio de su boca-lo se porque ese día me toco sacar la basura en la noche y estando afuera vi a Alejandro salir de un auto que estaba estacionando en la cera de frente y me paralice...no pude hacer nada,  yo solo lo veía acercarse hacia mi-se notaba la angustia en sus palabras al recordar aquello, así que no la interrumpí y deje que siguiera a su ritmo-Y y cuando estaba muy cerca apareció Thomas y le gritó "quita las manos de mi chica" y Alejandro me apretó los brazos y dijo que yo era su hija y no podíamos obligarlo a no verme, me estaba maltratando mucho y dolía y creo que se notaba porque Thomas se acercó corriendo y golpeo a Alejandro y este salió corriendo, entro al auto y no se fue sin antes gritar "papá están en casa de nuevo" yo estaba petrificada y Thomas se acercó a mí para consolarme un poco, pregunto quien era ese tipo y le conté quien era Alejandro. Después de contarle él dijo que no se me acercaría más que se iba a encargar de eso-Termino de contarme y creo que parte de mi estaba odiando más a Alejandro que hace un par de años, por volverse a aparecer en su vida.-No quiero imaginar que hubiese pasado si Thomas no hubiese llegado-dije suspirando-Se bien como te colocas cuando Alejandro esta cerca...así que aunque lo deteste con mi vida creo que le debo una a ese cretino-dije con una mueca un poco irónica para bajar la tensión del momento...nunca me ha gustado ver a Lucy tan nerviosa y con ese comentario logre que se calmara un poco-Deja que termine la historia porque Thomas no ha dejado de ser el mismo cretino...-dijo agachando de nuevo la cabeza-respire hondo ya no sabía que más esperar de la situación-¿Qué pasó?-dije con un tono seco. Ella intento volver a mirarme a los ojos pero volvió a bajar la cabeza-Thomas llegó a la mañana siguiente a mi casa y me hizo dejarlo pasar para hablar dentro...-hizo una pausa como recomendada lo sucedido-Fue a asegurarse de que me quedara claro que para mantener a Alejandro lejos de mi habían condiciones...-ahora no solo tenía la cabeza gacha sino que se abrazó a sus rodillas escondiéndose un poco entre sus piernas-Me dijo que debo volver a ser su chica hasta que consiga a alguo mejor y que si me reusaba él mismo se encargaría de que Alejandro estuviera más cerca-suspiró casi entrando en llanto-No pude decirle que no, es...es Alejandro. Tengo mucho miedo Amy...yo solo no quiero volver a tenerlo cerca-suspiró a este punto las lágrimas habían vuelto a salir, esta vez con más intensidad. Yo tenía el corazón hecho pedazos, no solo me llenaba de impotencia el que la estuviese manipulando sino que me partía el corazón verla así, tan frágil, tan vulnerable, tan llena de miedo. Lucy siempre se ha caracterizado por ser la fuerte de las dos aunque mi apariencia haga pensar lo contrario...pero esta vez debo ser yo quien sea fuerte por las dos, no estoy nada de acuerdo con lo que está haciendo el estúpido Thomas y por desgracia se que el puede hacer que esté más segura que yo... fácilmente puede hacer que su Papi le coloque un grupo de seguridad solo para él si así lo quiere (él siempre consigue lo que quiere).

No pude ni siquiera decirle más nada a Lucy, me quedé perdida entre la cantidad de sentimientos que se revolvían en mi cabeza, por un lado seguía teniendo ganas de volver a partirle la cara al estúpido Thomas, por otro le estaba agradecida de haber aparecido justo en el momento en que Alejandro llegó. Aún me siento frustrada por lo que está pasandole a una de las personas que más amo y más aún porque en mis manos hay muy poco que pueda hacer...esa noche solo pude hacer una cosa y fue intentar consolar el llanto de mi en ese momento tan pequeña Lucy. Perdí el conteo de las horas que pasaron mientras sus lágrimas aún corrían y recuerdo a la perfección que solo dejaron de correr cuando por fin se quedó dormida entre llantos y mis brazos que pedían a gritos que se calmara.
No podía dejarla marcharse como estaba y mucho menos tenía corazón para despertarla y hacerla irse, así que con sumo cuidado la tomé en mis brazos y la coloque en mi cama. Yo me acomode cómo pude para no interrumpir su sueño y al poco tiempo me dormí.