Noviembre realmente nunca ha sido el mes favorito de Frank. Suele indicar el verdadero comienzo de su temporada de enfermedad con la forma en que el frío finalmente se asienta como una niebla de humo inevitable, sin importar cuantas capas de ropa se ponga. Ahora, sin embargo, sólo significa el comienzo de la temporada vacacional y una abrumadora consciencia sobre lo tranquila que está su casa. Nunca antes ha querido una familia grande con ansias.
La ventaja, sin embargo, es el hecho de que noviembre está lleno con el "Día de los Profesionales*" lo que significa sagrados días libres para Frank y un paso rápido a principios de diciembre. Aunque han sido poco más de cuatro semanas, Frank encuentra que el silencio de su casa sigue siendo inquietante y es poco lo que tanta música o televisión a todo volumen pueden hacer. Algunas noches es tan malo, que Frank bebe más cervezas de las que debería, acurrucándose con sus perros y quedándose dormido en el sofá sólo para despertar con resaca, un calambre en el cuello o un tirón en la espalda y un enorme sentido de arrepentimiento.
Gerard ayuda, en la mayor parte, ya que el sexo (si no sólo sus conversaciones) hace de buena distracción. Sus manos siempre son tan seguras y su boca lo es más. Siempre se va, sin embargo, y las mañanas siguientes, Frank está tan vacío como se sentía antes.
El trabajo no es tan malo. Lindsey y Jessicka generalmente tienen suficientes chismes o historias del fin de semana para mantener su cabeza ocupada durante la hora del almuerzo y Bob le tiene montones de trabajo durante las horas operativas. No es hasta un poco después de las tres, cuando ha llamado a todos los autobuses, y recuerda que Carter no correrá para sentarse en su Silla del Comandante, que se siente de la mierda de nuevo.
A pesar de que lo intentó, Frank no logra que Daniela le conteste alguna de sus llamadas. Entiende que quiere tener un descanso limpio y todo, pero cree que ella debe saber qué tan inviable es en realidad. Si Frank siente esta pérdida, sólo puede imaginarse cómo se están sintiendo Corey, Curtis y Carter.
Extrañamente, una noche, mientras está acomodado con sus perros y su Kindle, su teléfono suena, y está luchando para contestar porque dice Daniela Wilson y - "¿Hola?" dice, "¿Dani? Ha sido como un mes y justo ahora me llamas de vuelta."
"¿Frank?" escucha, y su corazón se hincha porque es la voz de Carter. Con eso, Corey y Curtis interrumpen con un, "¡Hola, Frank!" y Frank ni siquiera intenta contener ese sollozo de felicidad.
"Hola, chicos," dice, sorbiendo.
"Te extrañamos, Frank."
"Los extraño también. Mucho, mucho, mucho. Está muy tranquilo por aquí sin ustedes tres discutiendo, peleando y siendo pequeños hooligans. ¿Les gustan sus nuevas escuelas, chicos?"
Curtis murmura algo vagamente afirmativo, mientras Carter da un vehemente, "¡No!" y luego dice, "Mamá no nos deja ir a visitarte. Dice que vives muy lejos y y y -" Hay un traqueteo y luego Frank escucha un tono severo, puertas azotándose, antes de escuchar a su prima en la línea, sonando más que exasperada y dice, "Frank."
Tragando grueso, Frank contesta, "Dani. ¿Qué carajos, hombre?"
Ella suspira y no es difícil imaginarse la forma en que se está pellizcando el puente de la nariz, negando con la cabeza, cerrando los ojos. "Lo siento, Frank," finalmente dice. "Es lo mejor. Sé que es difícil, y los chicos me odian completamente por eso - muchas gracias - pero creo que al final será -"
"No," Frank dice, y no reconoce su voz, "no es lo mejor. No puedes simplemente cortarme de sus vidas así. Son mi familia. No es justo -"
"No te atrevas a hablarme de lo justo, joder," escupe. Sí, está bien... tal vez esa fue una pobre elección de palabras, piensa, Lo no justo sería estar encerrado por más de un mes por un crimen que no cometiste. "Yo no - ¿sabes qué? Corey nunca antes había ido al zoológico..." Suena tan enojada. "Curtis ni siquiera había ido a un juego de hockey y Carter -" Su voz se corta y Frank de pronto se siente tan culpable. "Él no me deja siquiera abrazarlo. Se niega a hablar conmigo y cada vez que lo escucho sin querer hablando con Curtis, está hablando de ti."
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Un Constante Trabajo en Progreso
Short StoryFrank pasa su tiempo en la Primaria Cedar Creek apestando para responder los teléfonos, cuidando niños, dando vueltas en su silla, y evitando miradas del Director Bryar. Su vida da un gran vuelco cuando su prima Dani va a la cárcel y de pronto tiene...