One-shots de CNCO

03 • Richard Camacho

—¿Lista para mañana?

—Estoy más que lista, cariño

🌼•••🌼

Llegó el día, el día que esperé durante tantos meses, todo estaba listo

Las puertas del templo de abrieron dejándome ver frente a 210 invitados, el padre y mi novio

Caminé acompañada de mi papá por medio de las hileras de bancas, la gente me observaba sonriente, yo solo miraba al altar nerviosa

Era la boda que siempre soñé, desde chiquita. Una hermosa y grande iglesia, muchos invitados, un grande y delicioso pastel esperando nuestra llegada en el grande y elegante salón para la fiesta. Un vestido precioso y un hombre al que amaba

Al llegar al altar mi padre le entregó mi mano a mi prometido, Joshua Lyra, le dio el típico discurso de que me cuide y eso, le palmeo su hombro y se fue a sentar

El padre dio su discurso de 'Buenos días hermanos y hermanas estamos aquí reunidos para unir en sagrado matrimonio a fulanito y menganita y bla bla bla'

Ya saben, lo que dice el padre

Pero vaya que tenía que decir algo, el pobre padrecito no sabe la saliva que gastó en nada, si ya todos sabemos como es un matrimonio

Le pedí un chance para decir algo, y este me lo otorgó

Costosamente y con sus dificultades por el largo y caro vestido alquilado; me di vuelta quedando de frente con toda la iglesia captando la atención de todos los invitados

—Les agradezco desde el fondo de mi corazón a todos por venir, enserio, que las palabras no me alcanzan para agradecerles a todos los que me apoyaron desde el inicio y los que se unieron a medio camino. Le agradezco a ambas familias, a nuestros conocidos, amigos,  esos que nos quisieron y apoyaron desde que nos conocimos en el colegio apesar de que pensaran que estábamos locos y demás; a nuestros compañeros de trabajo, a esos invitados especiales con los que me honro de tener su magnífica presencia en unos de los días más felices de mi vida, a esas personas cuya invitación había perdido y les avisé anoche sobre la boda y de todos modos están acá; y a esas personas que no conozco, no invité y de todos modos llegaron hoy aquí. No se deben de imaginar las ansias y nervios que tenía de la llegada de este día, el día que contrajera matrimonio con este gran hombre, el hombre que amaba y uno que me amara también; puse mucho de mí para lograr todo lo que se vería hoy. Muchos de ustedes me dieron un grandioso regalo con su presencia, pero algunos trajeron objetos materiales, ustedes me dieron algo, ahora yo les daré algo a cambio. Debajo a cada banca hay un sobre en el respectivo lugar de cada uno de ustedes, pero antes de que los abran, quiero tener junto a mi a una persona muy especial para mi, a mi amiga Gwen— dije mientras le tendí la mano par que me acompañara a mi lado

Al ella llegar a mi lado, los invitados empezaron a agacharse a tomar los sobres y a abrirlos, noté como varios abrían la boca sorprendidos, a otros parecía que sus ojos iban a terminar rodando por el piso de la iglesia, a como habían otros que parecían matar a Joshua con la mirada- mi familia entre esos-

  — Joshua y Gwen — hablé captando de nuevo la atención de todos— Miren, este no es mi día, si bien yo organicé todo, aparentemente el destino no preparó la boda para mi—quité el anillo de compromiso de mi dedo y se lo tiré Joshua— Úsalo con ella, espero seas tan feliz como no lo fuiste conmigo, tu y tu querida— los dejé allí y bajé del altar, caminé a paso decidido a la salida del templo donde arrojé mi ramo y lo pisé

Inocentes lágrimas de rabia inundaron mi vista mientras caminaba por las calles de Miami, no aguantaba mis pies, entonces me saqué los tacones. Mala idea, decenas de piedritas se hundieron en mis pies descalzos y el cemento caliente no ayudba

Llegué a un inocente y pequeño parque verde, varias miradas se posaron en mi, me senté en una banca solitaria y las lágrimas empezaron a salir

Sentí un peso en el otro lado de la banca, pero no le di importancia, hasta que habló

  —Eh chica novia ¿Estas bien?— levanté mi vista para visualizar al idiota que me preguntó eso ¿Que acaso me veo bien?. Pero tampoco fue una idea muy buena, me topé con una intensa mirada oscura sobre mí, era algo extraño entre intimidante y tranquilizadora

  — Pues vieras que me encuentro genial, solo me dieron ganas de ponerme un costoso vestido de novia para venir a llorar al parque ¿Tu estarías bien si tu prometido te engaña con tu amiga de la infancia dos semanas antes de tu boda?—  él solamente soltó una sonora carcajada

  — La verdad no, soy Richard— me tendió su mano

  — Soy _______ —  le correspondí el saludo

🌼4 años después...🌼

  — Richard Camacho ¿Aceptas a _______ _______ como tu esposa para serle fiel, amarla y respetarla en la salud y en la enfermedad hasta que la muerte los separe?

—Acepto

  — Y tu ________ ________ ¿Aceptas a Richard Camacho para serle fiel, amarlo y respetarlo hasta que la muerte los separe?

  — Acepto

— Entonces por el honor que me concede Dios y la iglesia, los declaro, marido y mujer, puede besar a la novia 

Richard me tomó de la cintura y me besó, al fin me había casado, con el hombre que realmente amaba, y que amaba incluso hasta más que como yo lo hacía por mi misma

Desde aquel día en el parque, nos volvimos amigos, el tiempo pasó, una cosa llevó a la otra y hace 7 meses me pidió matrimonio

Con él verdaderamente me la pasé feliz, hubieron días buenos y días horribles, pero con él aprendí una cosa, que nunca necesité estar con la persona perfecta, por que nadie lo es, todos cometemos errores, unos más graves que otros, yo solo necesitaba a alguien que me entendiera y respetara, alguien con quien hacer locuras, que me trate bien, pero lo más importante rea, que le encantara estar conmigo, y todo eso lo hallé en un sola persona:

Richard Camacho

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