"En la vida todo se aprende"

Capítulo 1: "Mi tranquila vida"

Un par de niños pelinegros de aproximadamente 8 años jugaban en el jardín de una hermosa vivienda mientras sus padres los observaban jugar.

Creo que los niños se han vuelto muy buenos amigos, decía una mujer de cabello negro corto mirando a una mujer de cabello negro largo.

Si es cierto, desde que mi hija conoció a tú hijo y se dio cuenta que al él le gustan las luchas tanto como a ella, no hay día que no quiera que la traigamos aquí para que ambos jueguen a ellas, decía la bella mujer de cabello largo sonriendo.

Si a mi hijo le pasa igual, siempre esta preguntándome cuando traerán a la pequeña Milk, dijo la mujer de cabello negro corto sonriendo.

Si es cierto Gokú y Milk son muy buenos para las luchas, tanto así que mi hijo dice que cuando los dos sean grandes serán los mejores luchadores del país, dijo un hombre de cabello alborotado.

Mi princesa piensa igual, dijo un gigantesco hombre.

Oye amigo y ¿cómo vas con tu nuevo negocio?, decía el hombre de cabello alborotado mirando al gigantesco hombre.

La verdad mejor de lo que pensé, si el negocio sigue así creo que en un año recuperare no solo el capital que invertí sino obtendré muy buenas ganancias y hasta llegue a extender mi negocio por todo el país, decía el hombre.

Pues me alegro por ti amigo, es bueno que te este yendo tan bien, dijo el hombre de cabello alborotado.

¡Gracias Bardock¡ dijo el gigantesco hombre.

Creo que ya es momento de la cena, dijo la bella mujer de cabello corto.

Si Gine, llama a los niños cariño, dijo el hombre de cabello alborotado.

Si querido, dijo la mujer saliendo al jardín en busca del par de niños.

¡Gokú¡¡Milk¡ venga a comer la cena está lista, dijo la bella mujer de cabello negro corto.

Si mamá, dijo un bello niño de cabello negro alborotado deteniendo el ataque que le estaba por lanzar a su amiguita.

Si señora Gine, dijo dulcemente una niña de cabello negro lacio y flequillo.

Vamos Milk, dijo el pequeño niño de cabello alborotado tomando la pequeña manito de su amiguita mientras en las mejillas de la niña aparecían un pequeño rubor.

Si, si, dijo la pequeña pelinegra caminando junto a su amiguito dentro de la casa.

Minutos después:

La familia Son y la familia Ox compartían una deliciosa cena mientras platicaban.

¿Entonces ya volverán a su pueblo?, decía con tristeza el niño de cabello alborotado.

Si hijo pero la próxima semana volveremos, dijo el señor Ox.

Que bueno, dijo Gokú sonriendo mientras la bella niña pelinegra lo miraba con dulzura.

1 semana después:

Un par de niños pelinegros comían una rebanada de pastel mientras sus padres platicaban entre ellos.

Entonces ya no podrán venir tan seguido, decía Bardock.

No, tengo que supervisar durante estos meses que la distribución de la mercadería sea de manera adecuada y mi esposa pues también estará ocupada realizando otras actividades, decía el señor Ox.

Que pena, ya nos habíamos acostumbrado a que todas las semanas nos visiten, decía Gine con nostalgia.

Si nosotros también ya nos habíamos acostumbrado a venir todas las semanas aquí pero al menos por tres o cuatro meses no podremos hacerlo, dijo la señora Ox.