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- ...entonces todo está dicho, así se hará- anuncie y Philip y Harley asintieron...

El plan tenía que salir bien, tal vez sería la última oportunidad de hablar claramente con Steven, ya que por boca de Philip; Steven parece querer volver a su lugar natal o algo así, sin embargo no es que quiera evitárselo ya que cada quien tienen derecho a sus opiniones e ideas, pero si quería por lo menos que todo quedase claro...

Harley salió junto a un muy bonito atuendo formal. Ella convencería a Steven de que el hotel sería perfecto para la fiesta de el cumpleaños de Harley, aunque claramente le hotel era todo menos lo que ella planeaba solo era una cuartada para llevarlo hasta ahí. Mientras tanto Philip se encontraba junto a mí listo para leer cualquier pensamiento de Steven y así poder saber si se dio cuenta antes de tiempo...

Yo me encontraba justamente en el salón en donde Harley haría pasar a Steven para luego cerrar las puertas y ventanas, resulta que con algo de nuestros ahorras; la mayoría de parte de Philip, logramos conseguir una pequeña habitación que recientemente fue usada como para eventos aunque no esa clase de eventos en donde la gente se viste formal y todo es armonioso y algo calmado...

- listo, están viniendo- murmuró Philip -mejor te escribo, es posible que escuche- susurro casi inaudible. Tomó una hoja con delicadeza y con muchísimo cuidado comenzó a escurrir según lo que percibía -Harley piensa que está tenso ya que apenas y quería salir del lugar- añadió escribiendo de nuevo en el papel -no tiene ni idea y eso es bueno ya que solo le faltan unos...

Antes de que terminara de escribir. En un abrir y cerrar de ojos Philip desapareció de mi lado y me encontré con un Steven confundido y con su ceño fruncido, Harley tampoco estaba y la puerta ya se encontraba cerrada, vaya que eran más rápidos de lo que yo misma esperaba, es decir desaparecer en segundos es genial hasta para mí, una simple humana...

Steven se tensó más de lo que pude haberme imaginado, di ciertos pasos hacia él hasta urdir frente a frente y a unos cuantos centímetros de distancia, no estaba dispuesta a irme sin avanzar más de lo que la vez pasada ya había avanzado...

- que haces tú aquí?- pregunto Steven serio y con frialdad...

- gracias por venir- informe nerviosa, pero claro vino con una mentira, me di un golpe mental ¿acaso la fiebre afecta también tu cerebro? -quiero hablar contigo Steven...sé que no quieres escucharme y que posiblemente me odias quizá, sé que no soy mayor cosa y por esa misma razón tampoco tendría porqué merecer tus disculpas sin embargo y aunque me odies...

- no te odio Gardy, eres una persona única, respetable y diferente ante mi punto de vista- anunció un poco más relajado pero con la misma seriedad en sus ojos, sus ojos estaban oscuros pero por lo menos podía observar un poco más sus orbes azules claros...

- y te lo agradezco- asentí, sentí un mareo repentino -pero enserio lo lamento, sé que no me creerás, quizá creas que todo es maniobra de Harley o incluso de Philip, sin embargo no es así. Enserio me nació venir aquí ante ti, pues me siento fatal, nunca te he tenido miedo y justo ahora no lo tengo, incluso si me mordieras- murmuré, pero me tuve que sostener sobre mi otro pie y no pude observarlo a los ojos, el mareo parecía resistir más de unos segundos -me quede petrificada por tus ojos, pero nada más, nunca te tuve...enserio...Steven- termine alarmada...

Y cuando creí poder dar mis últimas palabras, todo a mi alrededor empezó a dar más vueltas y en un abrir y cerrar de ojos mis piernas flaquearon y me sentía más acalorada que nunca, siguiendo de un escalofrío en mi cuerpo entero. Intente agarrarme de algo pero cerca solo se encontraba una pared...

Suspire y me tape los ojos con la palma de mi mano, me encontraba re mal y el mareo empeoraba. Justo cuando creía que todo se calmaría mis piernas flaquearon más de lo normal y en unos segundos todo oscureció, lo último que sentí fue un escalofríos seguido de un lugar cómodo y a mí temperatura...

Una Adicción © Donde viven las historias. Descúbrelo ahora