Cap. 31: Ser la música

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Verán soy una persona que le fascinan los cuentos del verdadero amor, de las almas gemelas, o del hombre de tu vida. Esas historias eran de mis favoritas porque siempre al final de cada película de cada historia terminaba como en un cuento "y vivieron felices por siempre" Y digo los amaba... porque ahora los detesto, los detesto demasiado, ya no hay un final feliz para mi.

-Quiero que terminemos -con esas palabras mi cuento había quedado terminado 

-¿No te parece cruel decir eso justo ahora? -dijo con palabras serias, no pude distinguir ni tristeza ni enojo. Solo vacío... Vacío en sus palabras, en su mirada y en esos ojos que hasta hace un momento me prometían un amor eterno. 

-Será igual de cruel si lo digo después o si lo hubiese dicho antes -mientras aun sostenía ese ramo de flores en mi mano, trataba de mantener mis palabras frías sin tristeza y ni una gota de amor ¿Es eso posible para un mortal como yo? -Ya no quiero estar contigo Germán 

-¿Era esto lo que querías decirme? 

-Si era esto, pero no tuve oportunidad... -me solté de su mano procure escapar de aquel lugar pero Germán me había seguido y pronto tomó mi brazo y ya no pude seguir mi camino.

-¿Por que haces esto Lenay? -aquella multitud de hace rato había quedado atrás lejos de nuestra discusión. Me partía el alma mirar los ojos de Germán que ahora me decían a grito desesperado esto fuera solo una broma

-Me he dado cuenta... que no te amo tanto como creía

-¡Eso es mentira! -Me miraba fijamente a los ojos convencido un cien por cien de sus palabras -Sabes que puedo leer cada una de tus expresiones como a la palma de mi mano

-Entonces esta vez te has equivocado, mis sentimientos por... jason siguen latentes y no lo he podido olvidar. No puedo hacer nada para luchar contra eso

-¡¿Tu quieres que me crea eso Lenay?! Yo sé lo que te hizo Jason y se que de ninguna manera volverías con el 

-¡No importa! ¡Planeo darle otra oportunidad!

-¡Lenay! Estás rompiendo conmigo y no es por eso... ¿Hice algo para que te enojaras? si es así... voy a pedirte disculpas

-¡Entiende que ya no te amo! Es simple...  ya no quiero verte... mi corazón le pertenece a alguien mas y... y no siento ninguna culpa en tener que decirte esto 

-No es verdad, tu no eres así...  -volvió a tomar mi muñeca, pero esta vez sentí como su mano temblaba -Ve a casa... mañana... mañana hablaremos de nuevo

-¡No quiero hacerlo! no quiero hablarte más ¡Solo déjame Germán! -mi corazón se partía pedazo a pedazos, cada segundo que pasaba mirando sus ojos, tanto que quería correr de ese lugar lo antes posible

-Lenay... Solo dime la verdad... -me dijo en un tono suplicante

-Ya es suficiente -esta vez apareció Jason, como habíamos planeados y tomó mi mano para soltarme del agarre de Germán -Ya oíste lo que ella dijo, solo dejala... -Casi podía escuchar el sonido de aquellos pedazos de su corazón siendo pisoteados, eso lo reflejaban sus ojos cristalizados

-Lenay... -su voz era dolorosamente suplicante -¿De verdad... De verdad quieres ir con el?

-Si... -esa afirmación pareció retumbar en su cabeza, una afirmación que lo dejó inmóvil mirándome fijamente. Jason comenzó a caminar para alejarse de el

Ocho Meses Contigo (Gernay)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora