Capítulo especial

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Lo sientoooo no es la continuación del capítulo anterior, bueno, sólo un poquito, un mínimo, mínimo adelanto hay, pero nada importante.

Solo quería desearles a quienes lean esta historia una Feliz Navidad🎄🎄(a quienes la celebren y a quienes no que sean muy felices también)

Aquí
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Una Navidad junto a Mina

Yaten y Seiya trataban de arreglar el desperfecto mecánico del auto de Serena.
Tenían abierto el capó y Lita estaba al volante tratando de hacerlo encender.
Mina recostada fuera del hyundai rojo, pensaba en sus jefes, en la pareja tan maravillosa que eran cuando los conoció, años atrás, cuando comenzó a trabajar con ellos.

Recordó una Navidad, una de tantas que había vivido junto a ellos. Los pequeños contaban con cinco años y eran unos pequeños demonios, traviesos a más no poder.

Un veinticuatro de diciembre en la tarde, trataba sin éxito de darles un baño, Luna ayudaba a Serena en la cocina y Darien preparaba todo en la sala para recibir a su familia.

_Niños, regresen a la tina!

Los niños corrían por toda la casa desnudos, ella iba tras ellos en ropa interior, los gemelos la habían empapado y ella salió sin ningún escrúpulo para tratar de atraparlos.
Los niños llegaron a la sala, tirando todo a su paso incluso el enorme árbol lleno de adornos navideños que Darien acababa de decorar. El pelinegro los atrapó a los dos y los cargo en sus brazos.
Enseguida se paralizó al verla en la sala semidesnuda.

_Mina!!! Que significa esto?

El la miraba con sorpresa, para su desgracia esa mirada no expresaba nada más que eso.
Ese hombre le gustaba demasiado, si no estuviera casado con Serena, que era una buena mujer a quien ella estimaba mucho, lo hubiese perseguido hasta el fin del mundo, también estaba el hecho de que no conocía a nadie más enamorado de su esposa.

_Perdón jefecito es que los niños mojaron toda mi ropa y...

Darien dejó de mirarla para gritar hacia la cocina.

_Serena, Serena ven aquí!

La rubia salió de la cocina con un delantal y sus manos todas sucias de masa para hacer galletas navideñas.

_Que te sucede?

Darien señaló con su cabeza, porque aún sostenía a sus pequeños.

_Mira, está mujer es una descarada!

Para Mina se veía furioso y aún así se veía perfecto, como un Dios, que bajo a la tierra sólo para ser admirado.

Serena no se enojó, sólo sonrió ante la expresión de su marido que se veía como ella cuando veía una cucaracha, aterrado y sin saber como actuar.
Ella sabía perfectamente que pasaba cuando bañaban a esos pequeños angelitos.

_Darien no es para tanto, tu sabes como son nuestros hijos. Luna ayuda a Mina con los niños.

Luna apareció desde la cocina se veía un tanto enojada, tomo a los niños de brazos de Darien y se dirigió al baño. Mina la siguió.

_Sólo tu para hacer eso, será mejor que te pongas una bata y vayas a disculparte.
No es la primera vez que haces disparates, quieres perder el empleo?

Mina se colocaba rápidamente una bata, mientras Luna colocaba a los niños en la tina.

_No yooo, sabes no me percaté y cuando vi estaba frente al papacito.

Te enamoraré otra vezDonde viven las historias. Descúbrelo ahora