Cuervo [JiKook]

Fantasmas

Seis meses completos habían pasado desde que Jimin y yo disidimos formalizar nuestra relación.

Seis meses donde Jimin había estado tratando de superar sus problemas y continuar con su vida de una forma tranquila.

Había sido realmente difícil. Mantener una relación con Jimin no era fácil en absoluto, pero estábamos bien.

Él había vuelto a comer normalmente. Si bien su apetito algunas veces decaía, siempre lograba terminar el plato sin devolverlo en el váter.

Ahora no tenía ojeras y se mantuvo una buena temporada lejos del alcohol.

Hoseok y mi tía estaban felices de verlo así. Taehyung, yo y el resto de los chicos también, por supuesto.

Pero de todas formas aun no lográbamos hacer que Jimin se perdone a sí mismo y eso nos mantenía en un limbo constante, sin poder avanzar más de lo que lo hicimos.

Así que decidí que tenía que hacer otra cosa.

Tal vez jugar un poco con fuego.

El problema era que mi idea era algo riesgosa, por lo que dudaba un poco.

Pero lo que sí era seguro es que con esto Jimin o se recuperaba por completo, o terminaba de romperse.

La segunda alternativa no me gustaba, pero algunas veces hay que tocar fondo de una manera dura y dolorosa para poder mirar hacia arriba y salir.

—Hoseok ¿podemos hablar un segundo?

—Sí, seguro ¿qué sucede? —Mi primo se encontraba ordenando unos papeles cuando toqué su puerta y me adentré a su habitación.

Luego de meditar mi idea unos días, decidí que si no lo intentaba íbamos a perder todo lo que habíamos avanzado con Jimin.

Porque estaba decayendo de nuevo...

—Umm, necesito pedirte un favor muy importante.

—Te escucho —Respondió dejando lo que hacía para prestarme completa atención.

—Hace unas semanas me comentaste que Yoongi tenía una hermana que vivía acá.

—Sí ¿qué sucede con eso?

—Necesito hablar con ella. —Hoseok me miró confundido, así que me expliqué. —En realidad, necesito que Jimin hable con ella.

—No, Jungkook, no me parece una buena idea. Tal vez a Jimin no le haga bien ver a SunHee.

—O tal vez sí y mucho

—No te entiendo

—Corremos el riesgo de que al hablar con ella termine de romperse, sí. Pero creo que nadie más podría aclararle las cosas a Jimin. Ella estuvo con Yoongi todo ese tiempo antes de que decidiera suicidarse. —Hoseok no estaba seguro, lo veía en su rostro. —Realmente no tenemos alternativa Hoseok, es lo único que nos queda por probar. Jimin... Jimin está recayendo.

—¿Qué?

—Lo que escuchaste... —Los ojos se me aguaron a este punto y sorbí por la nariz. —Ayer no pudo almorzar y tuvo un ataque de ansiedad por ello. Anoche lo escuché devolver la cena también. No está durmiendo bien y lo veo muy decaído. Es lo único que nos queda, Hoseok, necesitamos llevarlo con ella.

—Pero... ¿y si no funciona? ¿Qué pasará con Jimin si termina de romperse?

—Cuando tocas fondo lo único que queda es subir. Jimin nos tiene a todos nosotros. Si se rompe lo ayudaremos a salir.

—... Está bien.

.

—Jimin-ah, apresúrate o llegaremos tarde.