6 Meses para el objetivo

Capítulo 12: ¿Cómo está Casey?

Narra Jayden

Era tarde, pero aún no podía dormir, estaba nervioso por Casey, me sentía culpable por lo que le sucedió.

Había pasado 6 horas desde que la llevé al hospital... Tal vez si la hubiera sostenido... Si yo no la hubiera dicho que bajara por la cuerda, no hubiera pasado todo esto; Y dudo que me perdone...

Por otro lado volví a pensar en Sophia, Michael, instituto, mi padre, y todo ese estrés que me rodeaba.

-Mi madre entró al cuarto haciéndome volver a la realidad. -Jayden, aún estas despierto?

-Si...si mamá-

-Todo anda bien, cariño?-Dijo mi madre acercandose a mi.

-Para decir verdad...no. Estoy preocupado mamá, no se si Casey estará bien o mal, tal vez no lo sabré porque ella ni me querrá hablar.

-Cielo...¿crees que yo estaba tranquila cuando me llamaste al hospital diciéndome lo que pasó? Jayden, en la vida hay que asumir las consecuencias. Se que ella estará bien.

-¿Y si no es así?

-Si no es asi... haremos lo que sea para hacer que se recupere y tendremos que pensar en positivo. -Dijo poniendo su mano en mi mejilla.

Me sequé las lágrimas y me incorporé un poco más, me habían calmado bastante sus palabras.

-Mamá...¿No estas molesta conmigo?

-No, no fue tu culpa. Jayden, yo confio ciegamente en ti, te conozco perfectamente, y tal vez viaje mucho, pero esta vez voy aprovechar al máximo mi tiempo contigo.-Dijo con una sonrisa.

-Gracias...de verdad, no se que haría sin ti-Dije dándole un abrazo.

Vi como le salió una lágrima y su sonrisa dulce paso a una triste y débil.

-Estás bien, mamá?

-Si...Solo que...Ya sabes, soy muy sentimental-Dijo secandose las lágrimas.

-Descansa Jayden, y me siento muy feliz de que confies en mi y me hayas contado todo, aunque quieras o no tu padre se tendrá que enterar- Dijo cerrándo la puerta de mi habitación.

No pude llegar a decirle adiós, pero me tranquilizó hablar con ella.

-Jayden...si le dices a mamá que no tomé mis pastillas te pasará algo muy malo... Y no quieres que te pase algo malo...¿o si?

Y el Jayden Junior negó rápido con la cabeza.

Y la alarma sonó.

Era ella...la misma niña del sueño anterior

Me desperté mal, no era la primera vez que tenía un sueño conmigo de pequeño y esa niña... No logro entender si es experimento de mi imaginación o algún recuerdo.

Lo que si sé perfectamente es que ya era al menos el sueño número 14 en este mes.

Bajé las escaleras y saludé a Sasha, quien estaba limpiando la cocina.

-Em, Sasha...¿Sabes en dónde están mis padres?.

-Si Jayden, están en la terraza, justo esperándote para desayunar-Dijo sonriendo y sacudiendo la mesa.

Le hice señas de "gracias" y fui a la terraza.

-Buenos días, Jayden- Dijo mi padre.

-Buenos días papá-Dije en voz baja.

Luego me senté y empezamos a desayunar como en los viejos tiempos... En familia.

-Bueno, voy a salir, vuelvo en un rato- Dije levantandome de la mesa.

- Jay ¿a dónde vas? No me gustas que te vayas sin decir a dónde. -Dijo mi madre viéndome fijamente a los ojos.

-Mamá, tengo 17 años, no soy un niño, tranquila, sólo iré a caminar para despejar mi mente.

*
*
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A caminar, ¡Pf, claro!

Me monté en el carro y manejé rápidamente al hospital para ver a Casey. No iba a quedarme tranquilo hasta que hablara con ella.

Al entrar vi a la enfermera que la atendió ayer, Kelly. Me dirigí a ella y a saludé.

-Hola Kelly, soy Jayden, Jayden Clars, y ayer traje a mi amiga Casey. Y...Bueno, quería verla y saber como estaba.

-Hola Jayden. Casey está mejor. Lamentablemente justo ahora no la puedes ver, pero mañana le darán de alta y tendrá que usar un yeso por 3 meses, y tal vez con las terapias podrá tener 2 meses.- Dijo mientras ordenaba en un cajón unas medicinas.

-¿Cuando comienza sus terapias?

-Jayden, las terapias son muy costosas, su padre no podía pagar todo, así que ella sólo tendrá una vez a la semana.

-¿Cuánto es? - Le dije ya preparado para sacar mi billetera.

- Bueno, eso depende, si es con un doctor profesional y los tratamiemtos intensivos. Te recuerdo que son muy costosas.-Dijo leyendo una y otra vez las medicinas.

-Quiero un buen doctor, el mejor que tengan. Y las terapias intensivas...Solo quiero que ella esté bien y se recupere lo antes posible, sin importar la cantidad de dinero que tenga que pagar.

-¿Está seguro? Como dije antes... Las terapias son muy costosas - Dijo Kelly.

- ¿Podría decirme el maldito precio de una vez por todas? - Dije.

Estaba desesperado, odiaba que no contestaran mis preguntas y daran vueltas y vueltas con el tema, y más cuando necesito que Casey esté bien.

- Son 40 dólares las terapias normales, pero si las quiere con el Dr. Tomás, más terapias intensivas serían 95 dólares por semana. - Dijo viendo el folleto del hospital.

-Lo pagaré todo.