Ripples.

Prefacio.

Despertó algo agitado, no sabía a ciencia cierta si ha sido un sueño, una premonición o un aviso de algo en su futuro. No recordaba del todo lo que había visto mientras estaba inconsciente, perdido para el mundo, pero lo que mantenía en su mente le incomodaba; pues no había contexto alguno para lo que su mente conjuraba como recordatorio de su "visión". Es una flor de terciopelo, cuando menos eso cree que es la extraña forma que vagaba en su mente. Sabe que de a poco va a perder el recuerdo, casi nadie recordaba lo que soñaba cuando despertaba, se levanta apurado y busca entre sus cosas un fino pincel y un lienzo en blanco.

Con cuidado, concentrándose en la imagen que quiere resguardar de todo, Donhua Dijun, termina un trazo, la tinta tarda un momento en secarse y cuando está completamente seguro de que no dañaría el trazo pasa su dedo índice por encima de este. Se queda un buen rato contemplándolo, admirándolo y buscando algún significado a lo que ha dibujado. Suspira, tiene el trazo correcto (o eso cree) pero no el color indicado, la imagen en su sueño era de un escarlata intenso, pero de nuevo eso no dice nada. Resignado y sabiendo que no puede obsesionarse con algo, el mismo guarda el dibujo en el fondo de una caja adornada con bellas joyas verdes, después la oculta en el ultimo estante de su biblioteca. Escondiéndolo de ojos ajenos.

Antes de girarse e irse de allí, duda; algo en el fondo le dice que ese dibujo es importante, pero también es consciente de que hay muchas cosas que hacer, hay más problemas que atender, especialmente lo referente a la tribu fantasma, se recuerda que no tiene tiempo para ponerse a meditar cuando no tiene alguna idea de que representa lo que ha dejado allí.

Sin saberlo a muchos, muchos Kilómetros, en otro reino muy diferente al Reino celestial, en aquellas tierras gobernadas por Bai Zhin, donde habitan el clan de zorros de nueve colas, bajo la bendición de las estrellas y siendo la primogénita del segundo hijo, la primera nieta del gran zorro ha nacido una niña, en la frente porta una flor de terciopelo roja, la emperatriz de esa tierra ha quedado encantada, y la misma emperatriz ha decidido nombrar a la niña como Bai Feng Jiu.

Nota; esta historia ha estado rondando en mi cabeza por demasiado tiempo, desde que termine de ver el drama, y hasta ahora me atrevo a publicarla. Tengo, por decirlo de alguna manera el esqueleto de la historia pero me falta algunos detalles, las actualizaciones no serán muy seguidas, menos porque otra historia esta en mi mente, pero tratare de que se concluya.