Tarde o temprano vas a ser mía

Capítulo 8: Detalles del trabajo

-"Así es cómo funciona mi jefe y esto es lo que pasa si decides decir que sí al trabajo: mañana o al día siguiente, cualquier día que lo veas bien, te llevo a Fell City n-no te preocupes es co-completamente seguro! y tú ca-cantarás para mi jefe, su nombre es Grillby. Chico agradable y muy profesional por cierto, y si le gusta usted y su a-a-acto usted obtiene el tr-trabajo. Si no lo hace, te pagará por tu tiempo y yo te llevaré de vuelta a casa. ¿Qué dices?".

Frisk se reclinó en su silla y miró a Jim. Desde que ella enganchó su brazo con el suyo, el tipo fue, literalmente, un gran lío de nervios que sorprendió a Frisk.

Habría pensado que un tipo tan guapo con los ojos azules más brillantes que jamás haya visto y una deslumbrante sonrisa blanca que podría derretir el corazón de cualquier chica en un segundo no estaría nervioso por tener un almuerzo tardío en un restaurante familiar con una chica como ella, pero una vez más, como sus padres le enseñaron a Frisk, simplemente no se podía juzgar a alguien por su aspecto.

Y si ella era sincera consigo misma, había algo encantador en las rarezas vergonzosas y socialmente incómodas de Jim, pero para Frisk lo más cautivador de él era la ropa que llevaba puesta.

Llevaba pantalones marrones de trabajo con un par de tirantes rotos sosteniéndolos, una polvorienta camisa abotonada blanca con pequeñas manchas de grasa marrón y su cabello rubio estaba un poco descuidado.

Huelga decir que no se parecía a nadie especial o importante, pero lo que hizo que su ropa fuera tan impresionante para Frisk fue el hecho de que este tipo parecía compartir el sentido de la moda de su padre.

Frisk recordó que cuando su padre y su madre todavía vivían, el anciano tenía una cantidad de ropa "buena", pero nunca la usaba a menos que fuera a llevar a la madre de Frisk a cenar oa asistir a las presentaciones de coro de Frisk en la escuela, pero aparte de esos recuerdos, casi todos los recuerdos que Frisk tenía de su padre era que volvía a casa con ropa sucia y una gran sonrisa en su rostro.

Feliz de estar en casa después de un duro día de trabajo.

Se preguntó si Jim trabajó tan duro como lo hizo su padre. Tal vez ella le preguntaría cuál era exactamente su trabajo y cómo fue contratado por un monstruo para encontrar cantantes para el bar de ese monstruo, pero esa fue una conversación para más tarde. Por el momento, necesitaba centrarse en esta oportunidad de trabajo potencialmente valiosa.

Frisk planeó responder a la pregunta de Jim haciéndole muchas de sus propias preguntas sobre las expectativas de su jefe monstruo cuando se trataba de músicos y cuestiones de seguridad relacionadas con la ciudad monstruosa. También quería preguntar si este trabajo era solo un concierto de una vez o algo más permanente y cuánto podría hacer si su jefe la eligiera.

Frisk comenzó a hacer su primera pregunta, pero inmediatamente cerró la boca cuando la Sra. Vel, la mesera y la esposa del dueño del restaurante, se acercó a su mesa por lo que pareció la octogésima vez.

La primera vez fue para obtener su orden. La segunda vez fue para traerles sus bebidas. La tercera vez fue para traerles su comida. Cada vez que la Sra. Vel llegaba a su mesa era para escuchar la conversación de Frisk con el "joven y guapo extraño", como lo llamaba cuando Frisk y él entraron por primera vez en el restaurante.

-"¿Necesitas algo más, guapo? ¿Rellenar tu vaso? ¿Postre? ", Preguntó la Sra. Vel con dulzura y asintió cortésmente con la cabeza cuando Jim se negó en voz baja.

Entonces, Frisk vio cómo la dulce sonrisa de la señora Vel se convertía en una sonrisa lasciva cuando se volvió hacia ella. Frisk se sonrojó cuando la anciana le guiñó el ojo, agradecida de que Jim no pudiera ver la interacción entre ella y la esposa del dueño del restaurante.