Mateo sintió una punzada en su interior. Entonces, ¿por qué Dani lo había besado? ¿ y la otra noche? No es que se hubiera hecho ilusiones con el chico pero estaban haciendo cosas que simples amigos no hacían. Aún quedaba verano por delante y seguirían compartiendo habitación. Mateo separó a Dani con sus manos para reincorporarse, pero los brazos fuertes del gemelo se lo impidieron. Estaba cabreado porque se sentía un juguetito sexual para los calentones del gemelo. - No te enfades. Si te sirve de consuelo, me pones mucho. - comentó riendo tras ver la cara de desconcierto de Mateo. Acercó de nuevo sus labios a los del chico y antes de que pudiese volver a besarlo, sacó la lengua y le humedeció los labios. Se separó y se puso en pie para luego ayudar a Mateo a hacer lo mismo. - Deberías ahora ir a natación. Y por cierto, no vuelvas a llegar tarde. Te aconsejo descansar por las noches. - recomendó Dani con cierto rintintín guiñando un ojo.
Mateo se fue maldiciendo al chico y decidió regresar a la cabaña. Si lo regañaban, le daba igual. Pero estaba enfurecido. Decidió ir a darse un baño, relajarse y pasar la mañana en la cama hasta la hora de la comida. Como estaba tan a lo suyo no se percató de que en el baño ya había alguien. Cuando abrió la puerta se encontró de espaldas a Jesús desnudo. No se podía creer encontrar el mismo cuerpo del que consiguió zafarse hacía un rato. Aunque este tuviese ciertas diferencias. No visibles a la vista, pero a Mateo le parecía así. Jesús se dio la vuelta y rápidamente echó mano a la toalla para cubrirse. - Lo... lo siento. Iba a ducharme. - dijo Mateo mientras se daba la vuelta a toda prisa para salir. - No pasa nada tío. Pasa. Iba a darme una ducha y ahora me iba. - le dijo Jesús. - Queda poca agua caliente... - titubeó un poco nervioso. - ... Si quieres compartimos la ducha.
La propuesta de Jesús le pilló por sorpresa. Mateo se sonrojó inconscientemente mientras notaba como se ponía nervioso. - Puedo esperar. No te preocupes. - dijo dando un paso hacia fuera. - Acabas de hacer natación, venga. Luego te pondrás enfermo con el agua fría. - insistió más seguro Jesús. Mateo no quería contarle que finalmente no fue a su clase porque se enfadó con su hermano. Lo último que faltaba ahora era que pensase que era un infantil con un berrinche. - Vale. - aceptó finalmente Mateo.
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Dame todo (Hot Gay) GEMELIERS
Ficção AdolescenteMateo, un chico de Granada, se muda a la capital. Es joven, atractivo pero muy tímido. Cuando conoce a los hermanos Oviedo, más conocidos como Gemeliers, su mundo empezará a girar de una manera distinta. Una historia desenfrenada entre el amor por...
