DEMONS /teen wolf

ocho

TALIA JAMAS se había sentido tan sola. Tenia a su amiga Claire pero solo podía hablar con ella por teléfono, no podía sentirla, tocarla ni abrazarla siendo que vivía muy lejos y apenas se veían en el verano, claro, muchos compañeros eran sus amigos y podía almorzar con ellos en la cafetería, ella era amiga de todos. Peros sus verdaderos amigos...Scott y Stiles. Talia siempre había estado sola la mayoría de su vida, pero Scott y Stiles siempre estuvieron a su lado, habi pasado mas años con los dos chicos que con su verdadera familia...familia que aveces Talia no recordaba sus rostros.  Estaba enojada con ellos, de eso no había duda, pero también los amaba demasiado, los había ignorado por semanas pero ella sabía que no importa cuanto tiempo estuviera enojada los perdonaría. De todas formas Derek no era el culpable de la muerte de Laura y pronto la policía se daría cuenta.

Llegó por fin la noche del partido de Lacrosse y ella se había sentado en las gradas esperando que los participantes del equipo salieran le había dolido que hubieran delatado a su primo, pero...ella les había ocultado eso, además ellos no conocían a Derek...y sabían lo poco que Talia lo conocía, entendió la preocupación de sus amigos por su seguridad. Una vez divisó a Stiles y Scott, cruzó miradas con el moreno mientras salía de su asiento e iba hacia ellos.

—Talia, de verdad nosotros...—comenzó Scott pero ella negó, no se veía enojada si no...triste. Ella le tapó la boca con la mano a Scott.

—Oh, cállate Scotty—lo abrazó a él y a Stiles. Scott olió el olor dulce y familiar de vainilla y grosella, su amiga siempre olía a aromas dulces y ahora lo podía notar mejor con todos sus sentidos mejorados. Talia los apretó contra ella, había extrañado sentir a los dos chicos en sus brazos y poder olerlos. Ellos dos eran su mundo, ella los seguiría al final del mundo al igual que lelos lo harían con ella.

—Eso es una...¿disculpa aceptada?—intentó Stiles, muy aliviado de que su amiga lo estuviera abrazando de nuevo como siempre hacía.

—Si y no. Los amo, de verdad los quiero mucho, pero la próxima vez que hagan algo a mis espaldas, los voy a golpear y no con un tomate. Lo siento.—dijo lo ultimo viendo a Scott.

—Esta bien, no te disculpes—dijo Scott tomándola por los hombros—.tienes buena puntería.

—Nos preocupamos por ti. Mira, entiendo que ese tipo sea tu primo y todo—Stiles comenzó—. Pero no lo has visto en nueve, diez años. Llega él y hay un cuerpo, estamos preocupados por ti.

—Lo se, y por eso los quiero mucho pero Derek no es el culpable. Ya lo verán. También buena suerte—le dijo Talia a Stiles dándole un abrazo. Los dos asintieron y ya se estaban yendo pero Talia tomó del brazo a Scott viendo al otro irse y le susurró ;

—Escúchame está es tu última oportunidad ahora mismo puedo romperte el brazo y decimos que es un accidente, es horrible y probablemente termine llorando y pidiéndote perdón pero evitara que juegues—dio un suspiro haciendo una mueca—.es eso o te arriesgas a jugar. Por favor no quiero que te sientas mal, no quiero verte si hieres a alguien...